Muere en La Habana la actriz Corina Mestre, incondicional del régimen cubano
Obituario
Para los cubanos más jóvenes, el recuerdo que queda de la intérprete se acerca más a la vocera apasionada del ‘castrismo’ que al de la excelente actriz
La Habana/Como una "firme militante" de la Revolución ha catalogado Miguel Díaz-Canel a la actriz Corina Mestre, que ha muerto en La Habana este sábado, a los 69 años. La también profesora será recordada no solo por sus actuaciones y declamaciones, sino también por la acérrima defensa que hizo del régimen cubano.
Nacida en La Habana en 1954, mostró desde pequeña una gran inclinación para recitar y actuar en obras infantiles. Se graduó de Licenciatura en Artes Escénicas por el Instituto Superior de Arte y se vinculó al Movimiento de la Nueva Trova, interpretando poemas y canciones. En 1970 integró el movimiento de teatro estudiantil donde combinaba la actuación con la declamación.
Fue su entrada al Grupo Teatro Estudio, dirigido por la actriz y dramaturga Raquel Revuelta, la que la colocó en la senda de interpretar a grandes clásicos de las tablas
Fue su entrada al Grupo Teatro Estudio, dirigido por la actriz y dramaturga Raquel Revuelta, la que la colocó en la senda de interpretar a grandes clásicos de las tablas, especialmente del teatro español. Sus más destacadas interpretaciones fueron Macbeth y Bodas de Sangre, en las que imprimía a sus personajes la fuerza avasalladora que caracterizaba su personalidad.
Para la televisión también actuó en varias versiones de piezas teatrales y fue su papel de madre autoritaria en La casa de Bernarda Alba el más recordado por la audiencia cubana. También actuó en telenovelas y obras de teatro para niños, donde con frecuencia asumió el rol de personaje estricto y mandón.
Tenía una voz muy radiofónica que destacó en diferentes espacios y emisoras. Allí asumió desde varios papeles en radionovelas, pasando por la declamación de poemas románticos y patrióticos, hasta la conducción de programas.
Su trabajo como pedagoga fue también muy amplio. En la década de los 80 fue profesora auxiliar del Instituto Superior de Arte, y posteriormente jefa de cátedra de actuación en esa misma institución docente. Impartió diversos talleres en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños.
Mestre asumió varios cargos oficiales y fue, entre 1993 y 1998, vicepresidenta de la Asociación de Artistas Escénicos de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, una institución en la que llegó a formar parte de su Consejo Nacional. En 2022 la actriz recibió el Premio Nacional de Teatro por su trayectoria en las tablas cubanas.
Frecuentemente entrevistada en los medios cubanos, no perdía oportunidad para resaltar su fidelidad incondicional al Gobierno cubano y al Partido Comunista
En los últimos años, la intérprete había elevado el tono y el número de sus apariciones más vinculadas al tema ideológico que artístico. Frecuentemente entrevistada en los medios cubanos, no perdía oportunidad para resaltar su fidelidad incondicional al Gobierno cubano y al Partido Comunista.
En su cuenta de Facebook, el dramaturgo y escritor Yunior García, exiliado en España, reaccionó a la muerte de Mestre con dolor, aunque recordó que el último encuentro de ambos, poco antes de su salida de la Isla, "fue como enemigos declarados". "Sé que hizo muchas cosas contra mí, incluso después de mi salida de Cuba. Y aun así, no le reprocho nada".
La voz de la intérprete se hizo escuchar en innumerables actos políticos públicos en los que se buscaba cerrar filas con el modelo cubano o se vituperaban a los opositores, las protestas populares en la Isla o alguna medida tomada por Estados Unidos. Para los cubanos más jóvenes, el recuerdo que queda de Corina Mestre se acerca más a la vocera apasionada y tronante que apoyaba al castrismo que al de la excelente actriz que se ganaba largos aplausos del público en los teatros.