Niegan las visitas y las llamadas al preso político cubano Jorge Luis Rodríguez Valdés 'Tangallo'
El Instituto Casla solicita una prueba de vida del músico y activista cubano Maykel Castillo Osorbo
La Habana/Las autoridades penitenciarias de la cárcel Kilo 5 y Medio, en Pinar del Río, están haciendo la vida imposible a los presos políticos que cumplen sus penas en esta prisión. Según denunció Cubalex, a Jorge Luis Rodríguez Valdés Tangallo, volvieron a negarle la entrega de alimentos, medicamentos y otros artículos de primera necesidad.
El activista, dijo también el centro de atención jurídica, lleva tres meses sin poder recibir su visita reglamentaria. Dado que Tangallo no tiene familiares cercanos, quien asiste a esos encuentros es Eduardo Díaz Fleitas, también activista y ex preso político de la Primavera Negra, pero una y otra vez se le niega el acceso al penal.
La restricción para recibir ayuda externa, incluso para cubrir necesidades básicas, “evidencia el uso de la privación de libertad como una forma de represalia basada en motivos políticos”, indicó Cubalex, que agrega que, incluso, le han restringido las llamadas telefónicas.
Dado que Tangallo no tiene familiares cercanos, quien asiste a esos encuentros es Eduardo Díaz Fleitas, también activista y ex preso político de la Primavera Negra
Tangallo fue sentenciado, en abril de 2022, a cuatro años de prisión por el delito de “desacato” y antes acusado de “propaganda enemiga” por pintar las frases “Díaz-Canel singao”, “Abajo el comunismo”, “Abajo los Castro” y “Viva el 27 de Enero” en las paredes de la estación de trenes del poblado Entronque de Herradura. En la prisión Kilo 5 y Medio enfrenta, además, constantes amenazas de ser trasladado a una celda de castigo por denunciar las condiciones de vida dentro del penal.
En la misma cárcel cumple su pena el músico y activista cubano Maykel Castillo conocido como Osorbo, de quien el venezolano Instituto Casla, que monitorea el estado de la democracia en Latinoamérica, solicitó el pasado viernes una prueba de vida.
A través de redes sociales, su directora ejecutiva, la abogada Tamara Suju, alertó de que el artista, miembro del Movimiento San Isidro, denunció que "intentan matarlo en la cárcel", que "está siendo castigado y la dictadura lo tiene incomunicado”. El pasado 18 de abril, el rapero fue agredido por cuatro reos comunes en complicidad con las autoridades del penal.
El Observatorio de Derechos Culturales denunció, el mes pasado, agresiones físicas y psicológicas contra Osorbo, que recibe “atención médica nula o defectuosa” ante los múltiples padecimientos que ha presentado. De igual manera, protestaron contra el ocultamiento del expediente médico a su familia. Al rapero lo confinan en celdas de aislamiento y le suspenden visitas como castigo por enviar mensajes o negarse recurrentemente a ser trasladado a otra prisión. Además, lo acusaron de planear “un levantamiento” dentro del penal, por lo que, incluso, le instalaron una cámara de seguridad para vigilarlo.
Al rapero lo confinan en celdas de aislamiento y le suspenden visitas como castigo por enviar mensajes o negarse recurrentemente a ser trasladado a otra prisión
Osorbo, uno de los autores e intérpretes de la canción Patria y Vida, ganadora de dos Grammy Latinos, fue arrestado dos meses antes de las históricas protestas del 11 de julio de 2021 y condenado a nueve años de prisión, acusado de “atentado”, “desórdenes públicos” y “evasión de presos o detenidos”, aunque permaneció un año entero en prisión sin juicio, hasta mayo de 2022.
El músico fue declarado por Amnistía Internacional como prisionero de conciencia, en agosto de 2021, y le otorgaron el Premio de la Libertad, de Freedom House, en mayo de 2022.