El opositor cubano Sandalio Mejías sale de prisión y rompe en llanto al contar los malos tratos
A pesar de sus dificultades para expresarse, el activista manifestó que la "libertad de Cuba tiene que llegar, quieran ellos o no"
La Habana/"Yo soy un guerrero", dijo con dificultad el opositor Sandalio Mejías Zulueta, miembro de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), tras salir de prisión el 14 de mayo bajo licencia extrapenal. En un corto video publicado por la organización, el activista casi rompe en llanto contando la tortura a la que fue sometido por sus carceleros durante los tres años que estuvo detenido.
Mejías, también promotor del movimiento ciudadano Cuba Decide, abandonó la prisión con un notable deterioro de su estado de salud y un trastorno del habla. El líder opositor denunció que en la cárcel sufrió una isquemia (disminución del aporte sanguíneo) en el brazo y en la pierna derecha, pero el régimen cubano le negó los medicamentos para tratar sus padecimientos.
El Gobierno le otorgó una licencia extrapenal por un año, contó. A pesar de sus dificultades para expresarse, el activista manifestó que la "libertad de Cuba tiene que llegar, quieran ellos o no".
El Ministerio del Interior detuvo al activista el 13 de enero de 2020 en un parque de La Habana Vieja. Siete días después, fue sentenciado a un año de cárcel en un juicio sumario por un delito común. Cuatro meses más tarde, recibió libertad condicional, pero la medida fue revocada y tuvo que permanecer en prisión.
Mejías, también promotor del movimiento ciudadano Cuba Decide, abandonó la prisión con un notable deterioro de su estado de salud y un trastorno del habla
Antes de su encarcelamiento, Mejía había sido víctima en varias ocasiones de hostigamiento por parte de las autoridades. En septiembre de 2019, fue detenido para evitar su participación en una marcha pacífica, y en octubre de ese año también fue apresado durante una manifestación en favor de los presos políticos.
En una publicación del 16 de mayo pasado, el Centro de Denuncias de la Fundación para la Democracia Panamericana (FDP) recordó que, según un informe de marzo de 2021, el activista no recibió la atención médica después de sufrir una parálisis facial mientras se encontraba encarcelado.
La Fundación urgió al Gobierno a frenar el maltrato contra el activista, así como con el resto de presos políticos cubanos, y consideró que la privación de la atención médica es una "violación flagrante" de sus derechos humanos.
"Hacemos un llamado a la comunidad internacional, a los defensores de los derechos humanos y a las organizaciones pertinentes para que se unan a nosotros en este llamado urgente y tomen medidas concretas para garantizar la libertad y bienestar de Sandalio Mejías Zulueta, y de todos aquellos que sufren represión en Cuba", señaló.
Mejías es uno de los cientos de presos políticos del régimen, junto con otros disidentes como José Daniel Ferrer, líder de Unpacu, a quien las autoridades han golpeado, torturado y encerrado desnudo en una mazmorra en la cárcel donde lo mantienen preso, según denuncias de sus familiares.
Amnistía Internacional denunció esta semana que en las cárceles de la Isla aún hay 768 presos políticos, de las 1.812 personas que fueron detenidas por manifestarse contra el Gobierno tras las masivas protestas del 11 de julio de 2021. Esta cifra supera los 1.000 al sumar las decenas de detenidos en las protestas del año pasado.
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