El periodista de la TV cubana Yunior Smith justifica su decisión de pedir asilo a EE UU

La Habana/El periodista y presentador oficial de la televisión cubana Yunior Smith ha confirmado a través de su cuenta de Facebook que está en la frontera sur de Estados Unidos intentando pedir asilo político en ese país. La información, inicialmente difundida por el influencer Alex Otaola, ha levantado una ola de críticas.

Smith, que trabajaba como redactor reportero para la sección internacional del Sistema Informativo y muchas veces fue criticado por sus trabajos relacionados con la política de EE UU hacia Cuba, asegura haber sufrido censura sobre su trabajo. Sin embargo, en la Isla se le recuerda como uno de los adalides de la propaganda oficial.

El periodista se destacó especialmente en los últimos años por sus ataques acérrimos a la oposición, especialmente al líder de la Unión Patriótica de Cuba, José Daniel Ferrer, preso desde el pasado 11 de julio. Smith también tuvo palabras duras para la política de Washington hacia La Habana y ensalzó la actitud del régimen cubano.

Ahora, en su escrito en Facebook, el periodista asegura que "casi nadie sabe" que tiene "un hermano preso político, Kessell Rodríguez". "Temprano aprendí que enfrentarse al Gobierno significa ir a prisión, recibir golpes, maltratos, torturas; significa tiempo aislado sin que tu familia sepa de ti, huelgas de hambre en defensa de derechos; dolor familiar, preocupaciones, separación. Y al final nada cambia", alega.

Smith asegura haber sufrido censura sobre su trabajo. Sin embargo, en la Isla se le recuerda como uno de los adalides de la propaganda oficial.

También asegura que no salió al aire un comentario que le encargaron sobre "Yunior García después del 15 de noviembre, porque lo censuraron". "Entonces dije que en Cuba era necesario profundizar las prácticas democráticas, que mientras la economía estuviera en crisis surgirían otros opositores (...) y fue demasiado para los que dirigen ese noticiero", relata.

"Todos vieron en pantalla al Yunior Smith que criticaba a otros Gobiernos, nadie jamás supo las veces que dije No", asevera, pero sus explicaciones no parecen contentar a los internautas que han recriminado a Smith por haber difundido el discurso oficial de intolerancia política y de rechazo a cualquier forma de activismo.

Justamente, uno de los trabajos más recientes del periodista antes de salir de Cuba fue un comentario con el que el oficialismo calificó de "provocación" la propuesta de hacer trámites consulares en la base naval de Guantánamo, proyecto de ley impulsado por los congresistas estadounidenses María Elvira Salazar y Mario Díaz-Balart.

Smith comenzó su comentario diciendo que el asunto "no debería ser siquiera motivo de análisis porque el proyecto está destinado al fracaso y no se dirige a ninguna parte", pero que "cumpliendo con el deber periodístico de informar y contextualizar" se acercaba al tema, aunque su comentario dentro del noticiero duró más de cuatro minutos.

"Mientras estos congresistas estadounidenses tiran las cuerdas en busca de tensar aún más las relaciones entre ambos países y quieren poner en práctica todas las ideítas que se les ocurren", prosiguió el reportero con sarcasmo, "muchos son los familiares que esperan para reencontrarse".

"Todos vieron en pantalla al Yunior Smith que criticaba a otros Gobiernos, nadie jamás supo las veces que dije No"

Smith, según fuentes cercanas a la televisión estatal, fue incluido en la locución de los noticieros por una política expresa de Raúl Castro cuando era presidente, que impuso más representación de personas de piel negra en los medios de comunicación, esferas políticas y gubernamentales.

En enero pasado, la llegada a EE UU de otro locutor oficialista cubano, Frank Abel Gómez Bernal, causó mucha polémica en la comunidad del exilio en Miami. El comunicador, popular en la radio y televisión, pidió asilo político y tras entrar al país dijo a la prensa que, aunque tenía su trabajo en Cuba, se "estaba muriendo de hambre".

Gómez fue señalado por cubanoamericanos de haber supuestamente criticado a una periodista exiliada por su posición contra el Gobierno cubano, pero el locutor negó esas acusaciones. Una vez circularon en las redes capturas de la supuesta conversación donde criticaba a esa periodista alegó que en la Isla él no podía opinar de nada "ni agredir a nadie y menos a un periodista o un colega".

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