La perplejidad de la prensa extranjera ante la democracia "a la cubana"
Los medios concluyen que en Cuba no se vota realmente, aunque haya una puesta en escena de campañas, mítines y propaganda
La Habana/A dos días de las elecciones de los diputados al Parlamento cubano, la prensa internacional ha reseñado las jornadas previas a los comicios con perplejidad. La conclusión: en Cuba no se vota realmente, pero todo lo demás –campañas, mítines y propaganda– ha estado presente en la puesta en escena de la democracia "a la cubana".
Como una "inusual campaña política" califica Agence France-Presse (AFP) la proyección pública de Miguel Díaz-Canel durante estos días, sobre todo en Santa Clara, la ciudad que lo nominó al Parlamento y a la que "viajó más de una docena de veces", recuerdan.
La agencia define a Cuba como un "país comunista desacostumbrado al proselitismo electoral" que exhibe su actual presidente, que intenta contener el avance del abstencionismo en una "sociedad disconforme". Cita, además, la ley electoral cubana, que prohíbe "todo tipo de propaganda electoral individual", algo que ninguno de los candidatos –elogiados hasta el paroxismo por los medios de prensa de sus provincias– ha cumplido.
"El resultado de la jornada parece inevitable, aunque un indicador que será observado de cerca es cuántos votantes se abstienen"
Associated Press (AP), una agencia que generalmente se muestra complaciente con el régimen, ha adoptado un tono más crítico en su análisis del proceso electoral. "El resultado de la jornada parece inevitable, aunque un indicador que será observado de cerca es cuántos votantes se abstienen", expone.
Con sorna, AP comenta que los cubanos "elegirán a 470 diputados entre una lista con el mismo número de candidatos". "No hay indicios de que el actual mandatario, Miguel Díaz-Canel, deje el cargo, por lo cual se espera que sea reelecto", afirma sin ambages, lo cual subraya el carácter predecible de la jornada.
La agencia EFE define la situación como "relevante y controvertida", y señala que lo que verdaderamente está en juego no es la elección de diputados al Parlamento, sino la "legitimidad social del sistema", que la abstención masiva puede poner en tela de juicio. El hecho de que Cuba no admita la presencia de observadores internacionales en estos comicios es, como mínimo, preocupante, admite.
"A falta de encuestas públicas, un colectivo a seguir son los jóvenes, entre los que está calando el desencanto y la desafección política tras años de grave crisis económica", expone, tras aportar la cifra de los 13.000 cubanos mayores de 16 años que acudirán por primera vez a las urnas.
Al Jazeera, que en un largo reportaje repasa la historia de las últimas seis décadas desde el punto de vista del oficialismo cubano –destacando el embargo contra Cuba y ensalzando como logros la educación y la salud– y sin ápice de crítica al sistema, hace sin embargo hincapié en la posible abstención. "El ausentismo electoral se ha convertido en una característica de las recientes elecciones en Cuba. La participación en las elecciones municipales de noviembre de 2022, por ejemplo, cayó por debajo del 70 por ciento por primera vez, lo que indica una desconexión en un sistema político que depende del apoyo público", explican.
"A falta de encuestas públicas, un colectivo a seguir son los jóvenes, entre los que está calando el desencanto y la desafección política tras años de grave crisis económica"
El argentino Infobae se refiere a una "caída de la credibilidad" del régimen y del propio proceso electoral. El medio considera que la inconformidad social, agravada tras las protestas de 2021 y 2022, pasará factura a la imagen internacional del Gobierno cubano. "Las condiciones de vida que subyacen tanto a la rebeldía como al éxodo masivo y, probablemente también a la abstención en los procesos de votación, se mantienen intactas", zanja.
Por su parte, el digital mexicano Sin Embargoacusa al régimen de perpetrar un nuevo "simulacro electoral". Aclara que un nivel mínimo de democracia debería garantizar ciertas condiciones –"pluripartidismo, elecciones competitivas, libertades, rendición de cuentas, controles cruzados, Estado de derecho"– cuya ausencia expone el "modelo autocrático iliberal" de la Isla.
Mientras, agencias del régimen como Prensa Latina o cadenas aliadas como Telesur no cesan en su presentación de los comicios de este domingo como "una muestra de respaldo al modelo social y político socialista". A pesar de describir los detalles técnicos de las votaciones, ninguno de estos medios –ni tampoco los oficiales cubanos– explican las incoherencias señaladas por los analistas internacionales ni la exacerbada campaña que han protagonizado los candidatos durante las últimas semanas.
Fiestas, ausencia de apagones, un ligero reabastecimiento de las tiendas y un abrumador llamado a preferir el "voto unido" –la consigna oficialista para evitar la abstención y acudir a votar a los candidatos preelegidos– no logran aliviar la tensión que, tanto dentro como fuera de la Isla, ya caracteriza al preludio de estos comicios.
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