La plana mayor de las FAR asiste al funeral del encargado de modernizar el armamento
El general Juan Cervantes Tablada dirigía la Unión de Industria Militar
La Habana/La prensa oficial ha sido discreta con el obituario de Juan Israel Cervantes Tablada, uno de los generales históricos del régimen al que se le atribuye –en una frase críptica que han repetido varios medios sin ofrecer más detalles– “la modernización del material de guerra” del país. Artífice de la Unión de Industria Militar, una de las secciones clave de las Fuerzas Armadas, al velorio del “prestigioso jefe” asistió la plana mayor del Ejército, pero no Raúl Castro ni Miguel Díaz-Canel.
Figura menor en los libros de historia del castrismo, Cervantes Tablada fue enterrado en el nicho 47 del Panteón de las Fuerzas Armadas en el habanero cementerio de Colón. Aunque las cámaras de Televisión Cubana insistían en enfocar las ofrendas florales de Castro y Díaz-Canel, fue el primer ministro, Manuel Marrero –de formación militar y coronel retirado–, junto a Álvaro López Miera y otros jerarcas del Ejército, quienes presidieron la ceremonia.
Cervantes Tablada fue designado jefe de la Unión de la Industria Militar en 2009. A juicio del Gobierno, era el hombre indicado para hacerlo por su formación como ingeniero en la Unión Soviética y por su lealtad al régimen.
Cervantes Tablada fue designado jefe de la Unión de la Industria Militar en 2009
Constan muy pocos datos de su vida –ni siquiera cuenta con una entrada en la enciclopedia oficialista Ecured– y Televisión Cubana solo proyectó imágenes suyas vestido de civil, mostrándole a Raúl Castro los “avances” de la institución a su cargo. A juzgar por las grabaciones del entierro, varios miembros de su familia también son militares.
Con tecnología militar y “de diseño propio”, Cervantes Tablada fabricó equipos para el depauperado Sistema Eléctrico Nacional, el Instituto de Recursos Hidráulicos y el Ministerio de Salud Pública. Díaz-Canel lo nombrará de manera póstuma, según la prensa, Héroe Nacional del Trabajo.
De la labor específicamente militar de Cervantes Tablada, la prensa oficial no dice una palabra. El trabajo de la Unión de Industria Militar rara vez aparece en reportes de prensa y su sitio web no funciona. Su misión, según el Ejército, es “garantizar los procesos de reparación, fabricación, modernización y desarrollo del armamento y la técnica militar, así como otras producciones y servicios para las FAR y la economía”.
Se sabe que la Unión puso en circulación dos fusiles diseñados en Cuba: el Mambí-1 AMR y el Alejandro, un rifle de francotirador. El Mambí, un arma de 2,10 metros y 14 kilogramos, es un fusil semiautomático que los militares cubanos utilizaron durante la guerra de Angola en los años 80, sobre todo contra vehículos terrestres.
En cuanto al Alejandro, inspirado en el Dragunov soviético llamado así en homenaje a Fidel Castro –que usaba un arma similar, con mirilla telescópica, para mantenerse lejos del combate y no arriesgar su vida, durante su estancia en la Sierra Maestra–, pesa cinco kilogramos y mide 1,12 metros.
Más recientemente, la Unión de Industria Militar mostró varios de sus locales de trabajo, donde científicos militares experimentan con dispositivos de realidad virtual y “simuladores de anatomía” llamados Simpro con los que solo cuentan los hospitales de las Fuerzas Armadas. De esta tecnología, destinada –de momento– a cirugías de mínimo acceso, tienen poca noticia los cubanos, que sufren, entre múltiples crisis, la del sistema sanitario.
Pero el simulador no se usa sólo para fines médicos y Televisión Cubana ha mostrado como la Unión los usa con escopetas de juguete que el Ejército usa “como medio de enseñanza”. Según los medios oficiales, hay 200 simuladores de este tipo en el país, al servicio de las escuelas militares.
La Marina cubana es quien más se beneficia del trabajo de la Unión, según la prensa
La Marina cubana es quien más se beneficia del trabajo de la Unión, según la prensa, que publicó el pasado febrero varios lanzamientos de cohetes desde buques de la Armada. “Realidad aumentada, realidad virtual e inteligencia artificial” son términos que a los militares cubanos no les son desconocidos durante su preparación, que mucho tiene que agradecer –según los discursos fúnebres publicados este sábado– a Cervantes Tablada.
Uno de los complejos más importantes de la Unión de Industria Militar está ubicado en la barriada habanera de Nuevo Vedado y ha crecido significativamente en los últimos años. Las naves que conforman el polígono se han multiplicado, también los edificios construidos en la zona como residencia para los directivos y funcionarios que laboran en el lugar. Con postas reforzadas y una iluminación que contrasta con la oscuridad de las calles cercanas, el área, sin embargo, es considerada por los vecinos como un sitio que “produce escobas, recogedores y otros insumos plásticos de uso doméstico”. Quizás sea, eso sí, un rumor echado a rodar para esconder su verdadera producción o, donde antes hubo balas, solo quedan biberones y palanganas.