La Policía desarticula una banda que robaba motos en Ciego de Ávila
"No me siento segura y es un peligro andar por ahí con estas cosas", dice a '14ymedio' una residente que fue asaltada para robarle su 'motorina'
La Habana/La Policía cubana desarticuló una banda, compuesta por cinco hombres, que se dedicaba a robar motos en la ciudad de Ciego de Ávila. El arresto, del que no se precisa fecha, fue publicado en una página oficialista que intentó calmar los ánimos de los residentes en la provincia, golpeados duramente por el aumento de la inseguridad en las zonas rurales y urbanas.
Según la nota de Avileños del corazón, los individuos operaban, usando la violencia, en la ciudad cabecera donde sustraían motos de combustible y también modelos eléctricos. "Cuando fueron sorprendidos llevaban pasamontañas, cuchillos, flechas con bulones, tuercas, balines y guantes", detalla el texto que en pocas horas ha cosechado decenas de comentarios, la mayoría pidiendo mano dura contra los criminales.
"Cinco menos para hacer daño, fueron devueltos a las víctimas sus medios", subraya la publicación que identifica a los ladrones, que operaban fundamentalmente en el Reparto Maidique, como Julio Inocente, Ángel Luis, Kevin, Yunior y Maikol Leandro. El texto está acompañado con fotos de los cinco individuos y tres de ellos parecen ser menores de 25 años.
El texto está acompañado con fotos de los cinco individuos y tres de ellos parecen ser menores de 25 años
"Aquí ya uno no puede ni pegar un ojo", cuenta a 14ymedio una trabajadora del turismo que reside en Ciego de Ávila y recientemente fue víctima de un intento de asalto para robarle su motorina. "Pasé tremendo susto y al final no lo lograron porque el conductor de un carro que vio el forcejeo se acercó y los ladrones, cuando vieron que se les echaba encima la luz de los faros, pensaron que era la Policía y se fueron corriendo".
Tras el aparatoso incidente, la avileña de 42 años tuvo que pasar tres semanas con un brazo en cabestrillo debido a una luxación en el codo que le provocaron los ladrones al intentar arrebatarle su vehículo. Otra secuela es que desde el intento de robo, ocurrido a inicios de diciembre pasado, la mujer no ha vuelto a usar su moto.
"No me siento segura y es un peligro andar por ahí con estas cosas, así que ahora dependo de que mi esposo me acompañe al trabajo caminando o trato de coger algún transporte que vaya para allá". Su movilidad actual se ha visto seriamente afectada por temor a otro asalto: "Se sale a lo imprescindible y hay que evitar las noches, las calles oscuras y los lugares apartados".
Tras el aparatoso incidente, la avileña de 42 años tuvo que pasar tres semanas con un brazo en cabestrillo
Una experiencia similar vivió Julio, un espirituano que, en una visita que realizó a sus familiares en el barrio de Chincha Coja, en Ciego de Ávila, vio cómo unos ladrones casi desarman la moto de su cuñado. "La violencia y los robos son algo normal en Ciego. A mi no me gusta ni aparecer por ahí. En una reunión familiar mi cuñado dejó su motoneta de tres ruedas solo dos horas parqueada en la calle, y cuando regresó le habían llevado los puños del timón, los espejos y le estaban zafando las gomas traseras", cuenta el hombre. Además, asegura, Chincha Coja es "uno de los barrios más conflictivos" de la ciudad.
La propia página de Avileños del corazón ha publicado en las últimas semanas el arresto de varios delincuentes, algunos prófugos de la justicia y otros que también se dedicaban al robo de motos. Uno de ellos es Dervis Lázaro que, además de sustraer vehículos, "especulaba con armas de fuego", aseguran en su testimonio varios vecinos.
Pero más allá de estas noticias de la captura de atracadores, los cubanos se quejan constantemente de la falta de efectividad de la Policía para resolver los crímenes que se denuncian. La falta de personal, la crisis de insumos y el aumento de la delincuencia han dejado en evidencia la incapacidad de los órganos policiales para detener y procesar a los perpetradores de robos, asaltos y otros actos delictivos.
La falta de personal, la crisis de insumos y el aumento de la delincuencia han dejado en evidencia la incapacidad de los órganos policiales
En noviembre de 2023, la oficialista revista Bohemia publicó un minucioso reportaje en el que detalló los resultados de una encuesta en la que el 92,3% de los entrevistados consideraba que había aumentado mucho la criminalidad en la Isla, y el 48,9% había sido víctima directa en los seis meses previos a la indagación. Un tercio no confiaba en las autoridades para denunciar el crimen y, de los que sí lo hicieron, el 73,4% "no vieron solución a su reclamo".
El Derecho Penal, lamentaba Bohemia, "no es un instrumento de cambio". No se puede erradicar la criminalidad sin una mejoría en las condiciones de vida. "Los directivos del sector jurídico vinculan el notable incremento de los delitos en nuestra nación a la escasez de recursos, bienes, alimentos y también a la elevada inflación".