Reparten azúcar donada por Brasil en las bodegas, mientras la zafra se anuncia pésima en Cuba
La mayoría de centrales han empezado a aportar algunos datos que indican que la contienda será nuevamente mala
La Habana / Madrid/Lucía no sale de su asombro cada vez que, como este martes, llega a la bodega a recoger el módulo que, en calidad de donativo, entrega el Gobierno de tanto en tanto. “A mí me parece bastante alucinante que otro país done azúcar a este”, señala, incrédula. El reparto gratuito de este febrero, comenzó ayer en La Habana, previa presentación del carné de identidad, con los productos que algunas “naciones amigas” aportan.
En esta ocasión, el combo lleva un paquete de 500 gramos de espagueti procedentes de Turquía, un kilo de azúcar brasileño y una lata de sardinas en aceite de Venezuela para embarazadas, niños y mayores de 65. La cantidad está en función de lo que las autoridades denominan “núcleos familiares” y aumenta según cuántas personas conviven bajo el mismo techo.
La entrega de estos módulos, que se realiza regularmente desde al menos julio de 2021 e incluye productos muy básicos llegados de todas partes, debería tener acostumbrada a Lucía a encontrarse con el habitual paquete de azúcar extranjero, pero esta jubilada, que ha conocido los mejores años de la zafra en la Isla sigue llevándose las manos a la cabeza.
En esta ocasión, el combo lleva un paquete de 500 gramos de espagueti procedentes de Turquía, un kilo de azúcar brasileño y una lata de sardinas en aceite de Venezuela
Nada hace pensar que las cosas puedan cambiar a corto ni medio plazo. La industria azucarera está en unas condiciones irrecuperables y la zafra 2024-2025 discurre sin que se sepan aún los datos de producción de la anterior. La última de la que hay datos es la correspondiente a 2022-2023, cuando se lograron 350.000 toneladas de azúcar, la peor cosecha desde 1898 y muy por debajo de la demanda nacional, estimada en al menos medio millón. El dato fantasma, y esto sí se ha reconocido, es peor que ese, aunque no se sabe cuánto.
En los últimos días, la prensa provincial ha estado ofreciendo algunos datos que permiten constatar que las cosas tampoco pintan mejor para esta contienda. Este martes, Escambray contaba que el central de Tuinucú, Melanio Hernández “ha logrado estabilizar su paso”, pero tiene “deudas aún en su plan de producción en cerca de 3.000 toneladas”.
Antonio Viamontes, director de la empresa azucarera, indicó que se han producido 7.400 toneladas de azúcar crudo hasta la fecha, solo el 40%, por el retraso acumulado por la caña. Otros lastres han sido el déficit de combustibles, averías en la maquinaria o escaso rendimiento de los trabajadores, pero en el lado positivo está el rendimiento de la maquinaria. Además, el ingenio no solo se autoabastece, sino que entrega más de 40 megavatios (MW) al sistema eléctrico nacional (SEN), los salarios han mejorado y hay cuatro cuatro conexiones ferroviarias con el Uruguay (en Jatibonico) –que aunque no muele aporta el 60% de la caña– con las que amortiguar los inconvenientes.
Más presión sienten en el central Carlos Manuel de Céspedes, único de Camagüey que fabricará azúcar y cuyo destino es, fundamentalmente, la canasta. El objetivo es obtener 23.500 toneladas, moliendo 250 diarias de caña durante 115 días. La escasez de personal se siente por un lado en este ingenio, donde la mitad de los trabajadores son nuevos. A cambio, recibirá la experiencia de otras empresas que no harán zafra este año.
En su caso, también la planta se autoabastece, pero apenas aporta 1 MW al SEN. “No queda otra opción que cumplir, y los trabajadores están claros del papel que les toca en garantizar esas 23.500 toneladas, en una provincia con tradición azucarera, pero que en los últimos años ha estado muy por debajo de sus potencialidades reales y lejos de cumplir los planes”, advertía el martes Granma.
"No queda otra opción que cumplir, y los trabajadores están claros del papel que les toca en garantizar esas 23.500 toneladas, en una provincia con tradición azucarera, pero que en los últimos años ha estado muy por debajo de sus potencialidades"
En Santiago de Cuba molerán dos centrales, aunque solo uno de ellos lo hace para la canasta. Se trata del Dos Ríos, ubicado en Palma Soriano y que asume la carga del América Libre, en Contramaestre, y Julio Antonio Mella, en el municipio de Mella –cabe recordar que este año harán zafra apenas 14 centrales, si todos lo logran–. Su tarea es elaborar 20.000 toneladas de azúcar, pero ya va con retraso si se tiene en cuenta que arrancó el pasado fin de semana.
"La fábrica arrancó sin contratiempos, se comprueban los parámetros concebidos en las diferentes áreas, entre el lunes y el martes debe aportar las primeras toneladas de azúcar para la canasta y el consumo social", dijo su administrador, Osvaldo Arias. El propósito, dice Sierra Maestra, es “dejar en el pasado los incumplimientos y hacer del uso racional y eficaz de los recursos humanos, materiales y financieros un pilar de su gestión”.
El otro central santiaguero que participa en la contienda es el Paquito Rosales, de San Luis, pero en su caso está llamado a producir meladura, aunque, destaca el diario provincial, “no se renuncia a fabricar, de ser posible, azúcar, luego del extraordinario proceso de reparación al que fue sometido y que dio notables resultados”.
En Las Tunas, donde está activo el central Antonio Guiteras –del que se espera mucho más que de la termoeléctrica homónima– se produjeron este domingo 130 toneladas de azúcar de buena calidad, para alegría de las autoridades, que lo contaron a Periódico 26.
Carlos Górgora Serrano, jefe de producción del central, celebró que ese había sido el mejor día de la actual contienda y lo consideraba una evidencia de la mejora del ingenio, todo un alivio cuando es el que mayor encargo tiene para este año, superior a las 40.000 toneladas y que, junto con el de Majibacoa deben ascender a 61.000.
Por poner las cifras en perspectiva, en 2015 el Guiteras logró, por sí solo, 100.000 toneladas de azúcar, cantidad que se queda ridícula si se compara con las 218.000 de 1983, récord nacional en la zafra, nunca superado
La industria cuenta con cinco molinos en funcionamiento y es preciso, afirmó Górgora, que se sume uno más, ya que la actual cantidad “no permite cumplir las expectativas".
Por poner las cifras en perspectiva, en 2015 el Guiteras logró, por sí solo, 100.000 toneladas de azúcar, cantidad que se queda ridícula si se compara con las 218.000 de 1983, récord nacional en la zafra, nunca superado.
En una reunión celebrada este martes, Eduardo Walter Cueli, coordinador de Programas y Objetivos del gobierno provincial, atribuyó a las azucareras de Las Tunas la mayoría del déficit de las cuentas públicas, 1.800 millones de los 2.600 totales que han dejado 35 entidades estatales. El funcionario destacó que en 2024 “se dejaron de producir más de 50.000 toneladas de azúcar, lo que afectó directamente el consumo social y la Industria Alimentaria local, así como la cadena de suministro de derivados del azúcar”.