Los residentes de las 'petrocasas' serán reubicados
'14ymedio' publicó la semana pasada un reportaje sobre el deterioro alarmante en el asentamiento del barrio El Molino (Cotorro)
La Habana/Este martes, los vecinos del barrio El Molino, en el municipio Cotorro, fueron convocados en dos grupos a la sede del Poder Popular municipal para informarles de que en un plazo no mayor de 18 meses serán reubicados en otras viviendas, debido al estado calamitoso de las petrocasas que les entregaron hace menos de un año.
En un reportaje titulado Las 'petrocasas' se caen a pedazos, publicado por 14ymedio la pasada semana, se reveló el deterioro y la falta de terminación que mostraban los inmuebles y las obras de infraestructura en este asentamiento habanero. El descontento de sus vecinos había llegado a una situación "a punto de estallar", confiesa una vecina de la zona.
Según los testimonios de varios residentes del lugar que participaron en la reunión de este martes, la presidenta de la Asamblea Municipal, Teresa Beltrán Santana, les hizo saber que sus quejas habían llegado "muy arriba" y que, de acuerdo con los estudios realizados, a "las edificaciones les quedaba apenas un año de vida".
Zoraida Dopico, madre de dos hijos y residente en El Molino, se muestra sorprendida por la solución que les han prometido y aclara: "Todo el mundo sabe que esto aquí se construyó de corre corre, que no aguanta el primer ciclón". "Cuando nos quejábamos de que estábamos corriendo peligro, muchos decían que estábamos exagerando", cuenta la mujer.
Dopico confirma la extensa lista de reclamos y cartas que enviaron a las instituciones oficiales. "Fuimos a ver a Esteban Lazo, el presidente del Parlamento, y escribimos cartas a todos los niveles... ¡Hasta en internet salió este problema!", comenta la señora en alusión al reportaje aparecido en este diario.
El descontento de los vecinos había llegado a una situación "a punto de estallar", confiesa una residente de la zona
Carlos, cuyo testimonio fue recogido en el primer reportaje de 14ymedio, recuerda que poco después de inaugurar los edificios, pasaron por ahí protagonistas del programa Cuba Dice", un espacio de la televisión oficial. Sin embargo, "solo les enseñaron los edificios de tecnología china, que son de concreto", recuerda el anciano.
Con cierta sorna, el hombre vaticina que "de seguro en algún momento aparecen por aquí y siempre encontrarán a uno que parezca contento para ponerle un micrófono frente a la cara".
Algunos fueron más precavidos desde el inicio y no dejaron correr sus ilusiones con el asentamiento de petrocasas, como es el caso de un jubilado de la construcción quien comenta: "Yo estaba claro, ni siquiera había hecho el cambio de dirección en la oficina del Carné de Identidad". "Ahora con la mudada no voy a tener que volver a hacer la cola, porque nunca estuve aquí en los papeles", sonríe.
"Estas piezas las trajeron de España, pagaron salarios y gastaron millones haciendo esto que quedó mal", asegura una vecina
Para algunos, como Zoraida Dopico, el problema no termina con el traslado de los vecinos hacia otro lugar. "Lo peor de todo es que a nadie le importa quién va a pagar todo esto". "Estas piezas las trajeron de España, pagaron salarios y gastaron millones haciendo esto que quedó mal", asegura la vecina.
Cuando se le pregunta si el Gobierno encontrará en menos de año y medio casas para tantas personas, contesta: "Ellos no quieren ver a la gente de aquí explotar y si no se soluciona este problema rápido, lo que se va a armar aquí va a ser una revolución".
Cuba enfrenta una profunda crisis habitacional con un déficit de más de 600.000 viviendas, debido también a la falta de mantenimiento de las edificaciones que se encuentran en precario estado. Según datos oficiales, de los 3,7 millones de inmuebles existentes en el país, casi un 40 por ciento está en mal estado. Sin embargo, apenas 27.000 viviendas fueron construidas en 2015.