Señalan al ministro cubano de Economía por su incitación a matar opositores
Represores
Joaquín Alonso Vázquez publicó un post en Facebook pidiendo "disparar con cualquier calibre y utilizar cualquier arma" contra quienes pedían obstaculizar el envío de remesas y los viajes a Cuba
La Habana/La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba incluyó este viernes en su lista de Represores Violentos a Joaquín Alonso Vázquez, ministro cubano de Economía desde el pasado febrero. El proyecto, una suerte de inventario "de la infamia" –como lo denominan sus impulsores–, acusa al político de "incitar a la violencia" en 2020, en sus redes sociales, contra varios opositores exiliados y presos políticos.
Alonso Vázquez, que en 2020 se desempeñaba como presidente de las Casas de Cambio de Cuba (Cadeca), publicó un post en Facebook pidiendo "disparar con cualquier calibre y utilizar cualquier arma" contra quienes pedían obstaculizar el envío de remesas y los viajes a Cuba a través de un "parón general".
Donde quiera que se metan están en mi sector de fuego, escribió Alonso Vázquez, junto a una imagen en la que aparecían los opositores colgados de seis dianas, en un campo de tiro
Se trata de los youtubers Alexander Otaola –que convocó el "parón"–, Eliécer Ávila y Jorge Ramón Batista, conocido como Ultrack, además de Rosa María Payá, fundadora de la plataforma Cuba Decide, el actor Roberto San Martín –todos ellos residentes en Estados Unidos–, y el opositor José Daniel Ferrer, preso en Santiago de Cuba desde el 11 de julio de 2021.
"Donde quiera que se metan están en mi sector de fuego", escribió Alonso Vázquez, junto a una imagen en la que aparecían los opositores "colgados de seis dianas, en un campo de tiro", explica el comunicado de la Fundación, cuya sede está en Miami.
El "parón" sugerido por Otaola a través del medio Cubanos por el mundo pedía "erradicar fuentes de divisas del régimen basadas en el exilio como las remesas, las recargas, los viajes y los envíos a Cuba", una medida que, valora la Fundación, "pudo ser el detonante que enfureció al entonces presidente de Cadeca, y lo llevó a incitar al fusilamiento ‘con cualquier calibre’ de estos opositores pacíficos".
Un agravante para las consecuencias de la actitud de Alonso Vázquez, señala el comunicado, es que en noviembre de 2023 el Ministerio del Interior dio "fuerza legal" a sus amenazas, al incluir a Otaola, Ávila y Batista en su "lista de terroristas".
La Fundación se hace eco de las declaraciones de Cuba Decide, que tras el nombramiento de Alonso Vázquez como ministro de Economía denunció su post de 2020 y alegó que el verdadero "terrorista" era quien había pedido la muerte de opositores como Ferrer o la propia Payá.
Para finalizar, el comunicado recuerda que su lista de Represores Violentos "incluye a los que protagonizan actos de violencia política bien por iniciativa propia o cumpliendo órdenes superiores; a aquellos ciudadanos que organizan o participan en turbas al estilo de los pogromos fascistas; y también a los que desde sus cargos o su estatus de personalidad pública incitan a la violencia".
En noviembre de 2023 el Ministerio del Interior dio "fuerza legal" a sus amenazas, al incluir a Otaola, Ávila y Batista en su "lista de terroristas"
El proyecto constituye también una revisión de la memoria histórica de Cuba a la luz del presente, como demostró este viernes, al incluir a seis funcionarios de prisiones a los que responsabiliza de la muerte del preso político Orlando Zapata Tamayo, en 2010, mientras realizaba una huelga de hambre.
En una nota de prensa, la Fundación afirma que rinde homenaje, así, tanto a Zapata, en el aniversario de su deceso, como a Juan Carlos Herrera Acosta, fallecido el pasado sábado en su exilio de EE UU. A ambos los considera "dos héroes del presidio político".
La organización considera que Zapata, que murió el 23 de febrero de 2010 luego de 83 días de huelga de hambre, "fue víctima de una ejecución extrajudicial" pues los carceleros de Kilo 8 lo privaron de agua durante 18 días. Así, aseguran, se lo contó el propio disidente a su madre, Reina Loyda Tamayo, en el hospital Amalia Simoni de Camagüey, uno de los lugares donde estuvo ingresado.
La muerte de Zapata, albañil de profesión y uno de los presos de la Primavera Negra de 2003, silenciada por los medios oficiales, obligó al régimen a negociar con España el exilio de sus compañeros de la llamada causa de los 75.