Siguen hospitalizados cuatro de los heridos en una agresión por arma blanca en Cabaiguán, Sancti Spíritus
Los vecinos arremetieron contra el agresor, al que "cayeron a planazos" con los machetes y amarraron con una soga hasta que llegó la Policía, cuenta una fuente
La Habana/Seis personas heridas, de las cuales cuatro continúan hospitalizadas, fue el saldo de la agresión con arma blanca, el pasado sábado, de un individuo en la Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA) Juan González, de Cabaiguán, en Sancti Spíritus.
En un gesto poco común cuando se trata de un caso de violencia, la prensa oficial se hizo eco enseguida de la noticia y ofreció el relato de los hechos en boca de Lester Pino, presidente de la CPA. "Tuvimos un incidente en la comunidad con un compañero, que no es cooperativista nuestro, pero sí vive en la comunidad hace unos cuatro años con su familia, y que incluso hasta ese momento había tenido buen comportamiento con los vecinos", narró Pino al diario Escambray. "Él había vendido un puerco y alegaba que le habían cogido el dinero, aunque después el dinero apareció debajo de la cama de su casa".
Convencido de que le habían robado, el agresor, del que no desvelaron el nombre, salió a la calle y comenzó a apuñalar a todo aquel que se le cruzó. El suceso tuvo lugar hacia las seis de la tarde. "Se habían tomado más de dos botellas de ron entre tres personas en su casa y salió de allí y por la calle apuñaló a personas que no tenían nada que ver con el problema, entre ellas un anciano jubilado de la cooperativa y dos mujeres, una de ellas fue a defender a la otra y él la hirió", prosiguió el funcionario.
"Él había vendido un puerco y alegaba que le habían cogido el dinero, aunque después el dinero apareció debajo de la cama de su casa"
Una fuente cercana a la comunidad rural de Juan González explica que "guajiros cubanos, en fin", los vecinos arremetieron contra el agresor, al que "cayeron a planazos" con los machetes (con la parte plana de la hoja) y amarraron con una soga hasta que llegó la Policía.
En las declaraciones a Escambray, el presidente de la CPA reafirma esta versión: "Ya había herido a varias personas y hubo que tomar la decisión de cogerlo a timbales [a cómo fuera], porque no podíamos permitir que siguiera apuñalando personas o, incluso, que matara a alguno. Llamamos a los vaqueros de la cooperativa, le dieron un planazo para poderlo neutralizar, todo el mundo le fue para arriba, le quitaron el arma y lo amarraron hasta que llegó la policía que acudió rápido a la cooperativa, lo trasladó y fue atendido en el hospital provincial", el Camilo Cienfuegos.
Junto al atacante ingresaron cinco heridos. Una de las más graves, Odalys Manzano Molina, de 57 años, tuvo que ser atendida en cuidados intensivos por la pérdida de sangre que tuvo, provocada por numerosas heridas, entre ellas una que le penetró la cavidad abdominal y otra en la cara. Tras ser sometida a una cirugía maxilofacial, este martes se encuentra estable, publicó Escambray en una segunda nota, "pero se mantiene ingresada de traslado a ortopedia para continuar tratamiento quirúrgico pertinente por las lesiones en los tendones", en palabras de Miguel Alexander Concepción López, jefe de los servicios de cirugía del centro hospitalario.
Otro herido que tuvo que ser intervenido fue Osmel Rodríguez Suárez, de 74 años, con una herida "importante" que penetró la cavidad abdominal y que le provocó un trauma abierto, además de un shock hipovolémico por pérdida de sangre. Aunque evolucionó favorablemente, "tenía heridas más pequeñas en otras regiones del cuerpo y signos de mordidas en la región anterior del tórax y en el dorso".
Llamamos a los vaqueros de la cooperativa, le dieron un planazo para poderlo neutralizar, todo el mundo le fue para arriba"
Un tercer paciente también fue operado, Maikel Quintana Cordero, de 33 años, a quien el atacante le causó una herida en la mano izquierda "que le afectó todos los músculos flexores".
Elio Cruz Sánchez, de 45 años, también se encontraba este martes estable, con una herida abierta en el abdomen y otra en el glúteo izquierdo. "Se encuentra con buen estado general, pero se mantiene ingresado por estar íleo-paralítico, mantener una ligera distensión abdominal y timpanismo o hinchazón en esa misma región", detalló el mismo médico.
Una quinta víctima, Mireya García, con lesiones más leves, recibió sutura y a las seis horas fue dada de alta. También tiene el alta el atacante, quien llegó golpeado por los vecinos. "Se mantuvo aislado y custodiado en observaciones para realizarle todos los exámenes correspondientes según los síntomas que manifestaba sin que se determinaran lesiones importantes en ningún sistema de su cuerpo", refirió el cirujano.
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