Los socorristas siguen sin poder acceder a las montañas de Baracoa, muy afectadas por Oscar
Imías ha recuperado el 48% del servicio eléctrico, pero no tiene agua
La Habana/Justo una semana después del paso del huracán Oscar por Guantánamo, las autoridades aún no han podido llegar a las zonas montañosas de Baracoa y Maisí, dos de las localidades más afectadas por el ciclón. Las tareas se complican, confirmó en televisión nacional el director de la Unión Eléctrica de Cuba (UNE), Alfredo López Valdés, porque sigue lloviendo en esos territorios.
El funcionario celebró que este domingo ya estuviera abierto el acceso a Imías y que tuviera el 48% del servicio restablecido. Sin embargo, lamentó, en la localidad todavía no hay agua. “Por un problema de acceso no le llegamos al agua”, dijo a Canal Caribe, y ese es justo el propósito de este lunes.
Luego de recuperar los servicios en San Antonio del Sur en más de un 96%, detalló el director de la UNE, la idea es mover el contingente procedente de la provincia de Granma que tienen desplegado ahí hacia Baracoa y Maisí. “En Baracoa nos queda la montaña, una montaña difícil, con pendientes muy grandes, con dificultades para tener acceso”, declaró López Valdés, que añadió, con vocabulario militar, cuál sería la zona a la que llegarían en último lugar: “Maisí va a ser el lugar en que nosotros probablemente tengamos los últimos combates”.
Al replicarle, de forma afirmativa el reportero: “pero está planteada la recuperación”, el funcionario matizó: “Están todas las fuerzas y medios en el lugar”
Allí, prosiguió, existe “un ramal” al que no se ha podido llegar “con ningún recurso”. La zona montañosa, pronosticó el director de la UNE, “todavía nos va a llevar unos días, quizá esta semana completa”. Al replicarle, de forma afirmativa el reportero: “pero está planteada la recuperación”, el funcionario matizó: “Están todas las fuerzas y medios en el lugar”.
Otros ciudadanos de a pie llegaron también a las localidades afectadas para llevar ayuda. Es el caso del cineasta Daniel Ross Diéguez, que documentó en sus redes sociales los trabajos de recuperación de los accesos viales y el reparto de comida.
Por su parte, la prensa oficial realiza este lunes una loa a los tripulantes de los helicópteros empleados en llevar alimentos y evacuar a los habitantes afectados por las inundaciones en San Antonio del Sur, Imías, Baracoa y Maisí. “Vimos las casas bajo el agua y el desastre en relación a las pertenencias que perdieron los pobladores, que son artículos primordiales para la vida y que en un abrir y cerrar de ojos lo perdieron”, cita Venceremos al piloto de la Fuerza Aérea Miguel Savón Favier. “Son cosas que duelen. La Revolución nunca ha dejado a nadie desamparado, aunque cuesta trabajo resolver tantos problemas, más con la situación que estamos viviendo, donde la crisis es inmensa. Dará trabajo llegar con todo a todos, pero estoy convencido de que siempre se hará”, dice también el coronel, voluntarioso.
Según publicó el mismo periódico el domingo, 17 pacientes del servicio de emergencias de Imías fueron trasladados también en helicóptero al hospital provincial de Guantánamo y al de Baracoa. Están, asegura Venceremos, “estables, algunos ya de regreso a casa”.
El pronóstico energético para el país, por lo demás, no mejora este lunes. La UNE prevé para esta jornada una capacidad máxima de generación eléctrica de 2.060 megavatios (MW) para una demanda que alcanzará los 3.050 MW, por lo que el déficit será de 990 MW. En el horario pico, la afectación real será de 1.060 MW.
El informe diario refiere que tres unidades de generación se encuentran averiadas y otras dos, que emplean petróleo nacional, en mantenimiento. Además, 64 centrales de generación distribuida están fuera de servicio por falta de combustible (diesel y fueloil).
En estas circunstancias, cada barco que llega con petróleo es una pequeña tabla de salvación. El Vilma, por ejemplo, salió del puerto mexicano de Pajaritos (Veracruz) el 26 de octubre y tiene prevista su llegada a La Habana el 30 de octubre con una carga de crudo mexicano.