Dos turistas resultan heridos en su boda tras derrumbarse el techo del hotel donde se alojaban
Miami/John y Sarah Wenham tenían planificada la boda de sus sueños en Cuba, un país que en los últimos años se ha convertido en un imán para turistas de todas las latitudes. Sin embargo, esta joven pareja británica no sospechaba que su unión se convertiría en una pesadilla.
Los Wenham reunieron más de 30.000 dólares durante años para casarse en Cuba. Jamás imaginaron que el techo del vestíbulo del hotel Sol Río De Luna y Mares sería menos fuerte que su amor y se desplomaría en plena boda hiriendo a varios invitados, incluida la novia.
El novio también quedó muy afectado tras el derrumbe. Dos costillas fracturadas y hematomas severos fueron el resultado de la fallida ceremonia. La novia terminó con lesiones en la cabeza y los ojos. Una herida en la cara tuvo que ser suturada con diez puntos y probablemente le deje la cicatriz
"Estábamos a punto de reunirnos con el personal del hotel para discutir nuestros planes de boda en el vestíbulo, cuando John señaló el techo cuando empezó a moverse", contó la novia, de 35 años, al diario.
"Se oyó un fuerte golpe y, de repente, el techo se derrumbó sobre nosotros dejándonos atrapados".
Los abogados de la pareja iniciarán acciones legales contra el operador turístico que los llevó a tan amarga experiencia
"Los escombros del techo nos hicieron caer al suelo", cuenta la novia.
El peso del falso techo impedía que la pareja pudiera moverse, a lo que se sumaban los gritos de la multitud, entre los cuales sobresalían los lamentos de las hijas de Sarah.
Otros asistentes sufrieron graves lesiones, incluyendo golpes y heridas en la cabeza y la columna vertebral, fracturas de huesos. Uno de los invitados tuvo que ser suturado con 19 puntos en el cuero cabelludo.
La experiencia en el hotel holguinero era mala incluso antes de derrumbarse el falso techo. Según cuenta la pareja inglesa, desde el segundo día de sus vacaciones su habitación se encontraba inundada por aguas albañales. Había cables eléctricos sin protección y varios de los asistentes a la boda terminaron con diarreas, que después se confirmó era producto de la salmonela.
Los abogados de la pareja iniciarán acciones legales contra el operador turístico que los llevó a tan amarga experiencia.
"En una fracción de segundo todo lo que habíamos planeado y guardado durante tanto tiempo había desaparecido", dijeron los novios.
"Nos sentimos muy mal porque toda estas personas gastaron tanto dinero y habían viajado para estar con nosotros en nuestro nuestro día especial y entonces sucedió esto".