Vuelven a racionar por municipio la venta de alimentos en la Plaza de Carlos III en La Habana

La Habana/Las autoridades de La Habana han vuelto a imponer la "municipalización" para la venta de alimentos en pesos cubanos, una de las medidas establecidas para controlar los contagios de covid-19 y eliminada el pasado noviembre. A partir de ahora, según pudo comprobar este diario en la Plaza de Carlos III, solo podrán comprar en esas tiendas los habitantes de Centro Habana. "Nada más", recalcaba un cartel a un costado del mercado.

El cartel añade que será "por Consejo Popular". "No sé si es uno (consejo) diariamente, eso se va a ver el día 21", dice uno de los cubanos que observan el rótulo de la nueva limitación.

Con la pandemia en retroceso y sin que haya mediado un anuncio oficial, el restablecimiento de la norma puede que tenga como objetivo disminuir las colas kilométricas para adquirir pollo o aceite, además de las reventas.

A pesar de que la venta ha estado restringida a una cantidad cada cierto tiempo por núcleo familiar y la previa presentación de la libreta de racionamiento, con frecuencia los clientes adquieren estas mercancías para revenderlas en el mercado negro a varias veces su precios oficial.

A ello aludía en un comentario un médico en un artículo del periódico oficialista Tribuna de La Habana.

La misma regulación también fue aplicada antes, entre agosto y octubre del 2020, cuando la pandemia iniciaba en Cuba y se endurecieron las medidas

"El tema tienda+coleros+revendedores es inaguantable. Hay que cerrarles el cerco. Las ventas tienen que controlarse por Consejo Popular no por municipio, para ver si algún día los médicos podemos comprar sin tener que faltar al trabajo" y remató: "O hacemos la cola para comprar el pollo y el aceite para poder comer o trabajamos".

Una colega lo secundaba: "Nosotros no pedimos siquiera una atención privilegiada donde vende la comida en moneda nacional, no tenemos tiempo debido a nuestro trabajo de hacer esas cosas y después tenemos que comprar el alimento revendido a las mismas personas que atendemos a diario su salud".

En febrero del 2021, el Gobierno decidió restringir la compra en otro municipio distinto al propio para intentar frenar los contagios de covid-19. Los habaneros debían, entonces, mostrar su carné o una autorización "en caso de convivir" en un domicilio distinto al que figuraba en sus documentos de identidad.

La misma regulación también fue aplicada antes, entre agosto y octubre de 2020, cuando la pandemia iniciaba en Cuba y se endurecieron las medidas para evitar los contagios.

Otra de las novedades en la Plaza de Carlos III este lunes, y que congregó ante las puertas del mercado una nutrida cola, fue la venta de ventiladores en moneda nacional. "Por lo menos desde principios de la pandemia, que vendieron un buchito, y más nunca volví a ver ventiladores en moneda nacional", recordó uno de los usuarios. Los aparatos de pared, de unas 16 pulgadas tenían un costo de 1.078 pesos.

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