Ibeyi: cuando el talento llega por partida doble
La Habana/Lisa-Kaindé baja del escenario un poco temblorosa, casi con miedo. Sin embargo, allá arriba se le ve segura y multiplicada. A su lado, canta su hermana Naomi Díaz. Juntas forman el dúo franco-cubano Ibeyi que este jueves se presentó en el Salón Rosado de la Tropical en la inauguración de la primera edición del Festival Musicabana.
Al terminar la actuación, las mellizas recibieron el aplauso cerrado de sus fieles seguidores. Un público que llegó al lugar en busca de esa melodía en que se mezcla la espiritualidad y el atrevimiento. Como en un típico ajiaco cubano, estas peculiares intérpretes echan mano de las sonoridades de lo mejor del soul, gospel, hip hop y la música electrónica, junto a los cantos yoruba.
Lisa comenta a este diario que la actuación de este jueves estuvo dedicada a su padre, Miguel Angá Díaz, el reconocido percusionista cubano que llevó la conga a su máxima expresión al agregarle ritmos latinos clásicos, jazz, reggae, funk y hip-hop. La joven toca el piano y es la voz principal en una dupla que comenzó el mismo día en que ambas nacieron.
Naomi le saca sonoridades a la percusión afro-cubana, al cajón y batá. “Cantar ante el público cubano es un verdadero honor”, explica Lisa a 14ymedio. La armonía entre ambas hermanas es perfecta, porque se basa no en sus similitudes sino en sus diferencias. Mientras que Lisa tiene una voz que enternece, Naomi se muestra en el escenario más eléctrica y vivaz.
Nacidas en la Isla, pero con una niñez y una adolescencia que transcurrió fundamentalmente en Francia, las mellizas apenas superan las dos décadas de vida y cantan mayormente en inglés y yoruba. De esta última lengua han tomado el nombre de Ibeyi para su agrupación, palabra que alude a los “gemelos”, en especial al indestructible vínculo emocional que los une. En la santería personifican la fortuna, la suerte y la prosperidad.
Las voces de estas hermanas son suaves y melosas, acompañadas por instrumentos que evidencia sus orígenes familiares y musicales. Esas características no le pasaron desapercibidas a la compañía disquera británica XL Recordings, con la que en 2013 firmaron un contrato a partir del cual han ganado en difusión y madurez.
El video que acompañó a su segundo sencillo River, con una estética minimalista y un apoyo esencial en el trabajo de las voces, contribuyó también al reconocimiento del que gozan hoy. Su primer álbum homónimo Ibeyi, fue lanzado en febrero de 2015 y las consolidó como un fenómeno musical que no se debe perder de vista, mucho menos de oídas.
La pérdida del padre, cuando las mellizas tenían 11 años, junto al reciente fallecimiento de la hermana mayor Yanira, quien tocaba la batería junto a ellas, hacen del disco Ibeyi una compilación que apunta al duelo y al recordatorio
La madre de Lisa y Naomí también ha jugado un papel trascendental en su desarrollo artístico. Se trata de la cantante franco-tunecina-venezolana, Maya Dagnino, quien fomentó desde bien temprano las inquietudes de sus hijas. En especial las composiciones que Lisa comenzó a realizar para plasmar emociones alrededor del amor, la familia y la muerte.
La pérdida del padre, cuando las mellizas tenían 11 años, junto al reciente fallecimiento de la hermana mayor Yanira, quien tocaba la batería junto a ellas, hacen del disco Ibeyi una compilación que apunta al duelo y al recordatorio. Las alusiones a la pérdida son constantes, pero en lugar de un dolor que se encierra en sí mismo, las 13 canciones que componen el álbum son un tránsito por las circunstancias que las han hecho fuertes.
Las mellizas viven un año por todo lo alto. Hace pocos días sus voces abrieron el desfile de Chanel en La Habana y la cantante estadounidense Beyoncé, las invitó a formar parte de su último álbum Lemonade, que se presenta como “el viaje de cada mujer hacia el autoconocimiento y la curación”.
Una escala de ese viaje personal y artístico que han emprendido Lisa-Kaindé y Naomi Díaz las ha traído a La Habana, donde es muy probable que las inquietas Ibeyi den mucho que hablar en los próximos años en la escena musical de la Isla.