Con una votación dividida, el boxeador Erislandy Álvarez consigue la segunda medalla de oro cubana
La Isla consigue plata y bronce en lucha este miércoles, en su mejor jornada hasta ahora en París 2024
La Habana/El boxeador Erislandy Álvarez consiguió para Cuba su segunda medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París al ganar este miércoles al francés Sofiane Oumiha. El púgil, de 63,5 kilogramos y nacido en Cienfuegos, venció el combate por 3-2 en una votación dividida de los jueces.
A pesar de no partir como favorito –estos eran, en su lugar, Arlen López y Julio César La Cruz– el debutante Álvarez asumió enseguida el liderazgo del equipo de la Isla y su empuje lo llevó a la final, luego de cuatro combates.
En el primero, noqueó al representante de Papúa Nueva Guinea John Ume. En los tres siguientes, se impuso por decisión unánime de los jueces ante cada uno de sus rivales.
En la final frente a Oumiha, para quien era su tercera participación en unos Olímpicos, Álvarez arrancó con fuerza el primer asalto. Aunque ambos llegaron en varios ocasiones al cuerpo del rival, el cubano lo hizo con mayor efectividad. Sin embargo, en el segundo round el ritmo de intercambios bajó y tres de los árbitros vieron ganar al local, que enloqueció a la afición con cada golpe al rostro de Álvarez. Así, con dos imparciales asegurando la victoria del cubano y tres con empate llegaron al último round.
La intensidad en el último asalto no bajó. Álvarez mantuvo sus entradas con derecha e izquierda con fuerza. Ambos se mantuvieron técnicos y muy pocas veces descuidaron la guardia, a pesar de los fuertes intercambios.
La decisión de los jueces estuvo, al final, dividida, pero se impuso por un voto el cubano, que suma su presea de oro para la Isla a la conseguida el martes por el luchador Mijaín López.
En la que fue su mejor jornada olímpica hasta el momento, Cuba logró llevarse este miércoles dos medallas más, plata y bronce, en lucha.
El primero en colgarse una de ellas fue Gabriel Rosillo, que ganó bronce en lucha grecorromana contra el uzbeko Rustam Assakalov, en la categoría varonil de 97 kilogramos. Con apenas 37 segundos de combate, el luchador de la Isla realizó una llave que lo puso con un marcador de 2-0, pero en ese movimiento se dislocó el hombro de su rival, por lo que, aunque Assakalov intentó volver a la pelea, no pudo competir a la par y terminó por retirarse del duelo.
El atleta santiaguero de 25 años, que llegó a la cita en París como el favorito y con el título de campeón mundial en Belgrado 2023, cayó en semifinales contra el armenio Artur Aleksanyan, quien fue monarca olímpico en Río 2016 y medallista de plata en Tokio 2020.
En lucha libre femenil, la suerte le sonrió a Yusneylis Guzmán. La joven, que este jueves cumplirá 28 años, se llevó plata, pese a haber perdido el martes por un contundente 5-0 la semifinal en la categoría de 50 kilogramos con la india Vinesh Phogat; sin embargo, horas después del duelo, su rival no pasó el control de pesaje y quedó descalificada, por lo que su lugar en la final fue ocupado por la cubana.
La clavadista Anisley García aseguró su pase para la semifinal en el trampolín de tres metros
La rival de Guzmán por el título fue la estadounidense Sarah Ann Hildebrandt, medallista de bronce en Tokio 2020, quien dominó de inicio a fin la batalla, para llevarse el triunfo 3-0 después de seis minutos de combate. A pesar del segundo lugar, Yusneylis Guzmán se convirtió en la primera cubana de la historia en ganar una medalla olímpica en lucha.
Por su parte, la clavadista Anisley García aseguró su pase para la semifinal en el trampolín de tres metros. Con 272.40 se ubicó en el puesto 18, el último para acceder a la siguiente fase, que se llevará a cabo este jueves; si accede, disputará el viernes la final. Aun así, hizo historia, pues la última vez que una clavadista de la Isla llegó a una semifinal de esta prueba fue en 1980, con Milagros González, actual comisionada nacional del deporte.
Junto a García tuvo su debut olímpico la santiaguera Prisis Ruiz; sin embargo, la campeona de la especialidad quedó en el lugar 25, con 239.85 unidades, por lo que no pudo acceder a la semifinal.
Con las medallas obtenidas este miércoles, Cuba llegó a cinco en total y se ubica en el puesto 21 del medallero olímpico, cerca de la meta que se propuso la delegación antes de viajar a Francia: quedar, al menos, entre los primeros 20 lugares, aunque con una cosecha por debajo de la decena de preseas, algo que no se registra desde Múnich 1972, cuando ganó ocho.