México ofrece a los ajedrecistas cubanos la experiencia y el dinero que no encuentran en su país
Estados Unidos y España, no obstante, son los escenarios en los que más victorias cosechan los jugadores de la Isla
La Habana/México, un país cuyo desempeño internacional en el ajedrez ha sido modesto, se ha convertido en un terreno donde los maestros cubanos prueban suerte. En los certámenes que el país norteamericano ofrece, los jugadores de la Isla aumentan –casi sin dificultad– sus puntos Elo, se miden contra maestros regionales y vuelven con experiencia y dinero a la Isla, cuyo prestigio como anfitrión no puede ser peor.
De ello daba fe este miércoles Carlos Daniel Albornoz, el ajedrecista que con más frecuencia –junto al campeón nacional, Luis Ernesto Quesada– representa al oficialismo en el extranjero, en una entrevista con Juventud Rebelde. El camagüeyano criticaba la baja calidad del torneo mexicano Carlos Torre In Memoriam, celebrado en Mérida la semana pasada, pero hacía notar la presencia de no pocos cubanos: 19, todos avalados por la Federación Cubana de Ajedrez.
De hecho, Albornoz era el tercer ajedrecista con mayor ránking en la competencia, por debajo de dos peruanos –uno de ellos nacionalizado mexicano–, si bien acabó en cuarto lugar. Logró cuatro victorias, cuatro tablas y perdió una vez. Para Albornoz, el torneo no significa un reto mayor. Ha sido el campeón de tres ediciones –2018, 2019 y 2023– y este año se conformó, en sus propias palabras, con presentar un desempeño “aceptable”.
México fue el remate de una larga cadena de eventos internacionales en los que Albornoz ha participado este año
México fue el remate de una larga cadena de eventos internacionales –de las olimpiadas de ajedrez en Budapest al torneo del hotel Bali, en Benidorm, España– en los que Albornoz ha participado este año. Perdió la corona “por un detalle”, señaló, y porque subestimó a los dos maestros peruanos, que estaban en México para ganar con estilos de juego “muy exigentes”.
En el Carlos Torre también participaba el habanero Dylan Berdayes, que siguió de cerca a los líderes y derrotó en la sexta ronda al ruso –nacionalizado estadounidense– Aleksandr Ostrovsky. En la competencia figuraban también el santiaguero Lelys Martínez y el tunero Michel Alejandro Díaz.
En el segundo grupo de este certamen había, por su parte, tres cubanas: la santiaguera Oleiny Linares, la matancera Amy Cepero y la villaclareña Roxángel Obregón. Además, en la categoría para menores de diez años participaba el habanero Alberto García Tabasco.
Los cubanos tienen una larga tradición de victorias en el Carlos Torre. En 1997 lo ganó Jesús Nogueiras. En 2001 se impuso Leinier Domínguez, considerado el mejor ajedrecista cubano desde José Raúl Capablanca. En 2003, ganó Yuniesky Quesada; en 2011 Fidel Corrales; y en 2012 Ayram Abreu. El récord, no obstante, sigue siendo el de Lázaro Bruzón, ganador en 2005 e invicto de 2013 a 2016.
Mientras Albornoz perdía su lugar en el podio, tres cubanos lideraban el torneo de partidas rápidas en el apartado Libre del Festival de Ajedrez de Cancún. El campeón juvenil de la Isla, Daniel Hidalgo, se enfrentaba en el apartado Libre a otros dos cubanos, el villaclareño Rodney Pérez y el matancero Lisandro Fernández, este último residente en México.
Hidalgo, campeón en su categoría desde el pasado agosto, está considerado como uno de los mejores ajedrecistas jóvenes de la Isla. Su desempeño en Cancún fue ejemplar –solo pactó tablas con Fernández– y obtuvo el primer lugar del apartado Libre. Por su parte, Pérez quedó en segundo lugar, mientras que la mayabequense Greter Caballero quedó en cuarto.
Reynaldo Vera, un veterano del ajedrez de la Isla, fue el ganador del torneo Senior durante el Memorial Duchamp de Río de Janeiro
En otros países del continente, como Brasil, también los cubanos cosechan abundantes éxitos. Reynaldo Vera, un veterano del ajedrez de la Isla, fue el ganador del torneo Senior durante el Memorial Duchamp de Río de Janeiro. Vera, nacido en Matanzas en 1961, fue una de las estrellas del deporte a nivel internacional desde los años 80 y representó a Cuba en no pocas olimpiadas.
Estados Unidos y España, no obstante, son los escenarios en los que más victorias cosechan los jugadores cubanos. En el prestigioso certamen Saint Louis Masters 2024 –uno de los más exigentes del mundo, en la meca del ajedrez estadounidense–, el villaclareño Yasser Quesada acabó en noveno lugar. El primer lugar fue para Fabiano Caruana y Alexander Donchenko.
En cuanto a Leinier Domínguez, cuya edad –en un deporte en cuya élite es extraño encontrar mayores de 30 años– no le impide ocupar el lugar 12 entre los mejores del mundo–, lidera el Campeonato Mundial Abierto de la Federación Internacional de Ajedrez, en partidas rápidas y blitz, celebrado en Nueva York.