El régimen pide la expulsión de un atleta cubano del equipo olímpico de refugiados
El Comité Olímpico Cubano estima que las críticas de Fernando Dayán Jorge Enríquez al Gobierno son "irrespetuosas y falaces"
La Habana/El Comité Olímpico Cubano se lanzó a la carga este martes, por segunda vez, contra los dos atletas cubanos que competirán en París 2024 como parte del equipo de refugiados (EOR). Después de criticar el pasado mayo la inclusión de los deportistas, el órgano estatal, que asegura que ha estado en contacto con el Comité Olímpico Internacional (COI), sostiene que Fernando Dayán Jorge Enríquez y Ramiro Mora deberían competir por los países en que residen y que su estatus de refugiados es injustificado.
“El EOR fue presentado públicamente como un conjunto de jóvenes deportistas ‘desarraigados por la guerra o la persecución’”, dice la institución cubana, que argumenta que “ninguno de esos deportistas cubanos es desarraigado por la guerra o perseguido”. Lo que el Comité no menciona es que a los atletas cubanos que abandonan delegaciones oficiales en el extranjero se les prohíbe volver a Cuba por ocho años y se les califica de “desertores”.
“La decisión de incluir a los deportistas cubanos en el EOR fue adoptada de espaldas al Comité Olímpico Cubano y con el claro objetivo de atacar la imagen del movimiento deportivo nacional, que tanta gloria ha dado a nuestro pueblo”, añade la declaración que, aunque asegura que no tiene “nada en contra de los deportistas”, pide que se les incorpore a los equipos de los países en que residen, EE UU en el caso de Jorge Enríquez, y Reino Unido en el caso de Mora.
Recientemente, el atleta criticó en una entrevista con una agencia internacional la situación cubana
El órgano también pide la expulsión “inmediata” de Fernando Dayán Jorge Enríquez, campeón olímpico de canotaje en la pasada edición de los Juegos, por sus “declaraciones políticas irrespetuosas y falaces contra su país, su pueblo y el movimiento deportivo que le permitió ser campeón olímpico en Tokio 2020”.
Recientemente, el atleta criticó en una entrevista con una agencia internacional la situación cubana y calificó al Gobierno de “farsa”. Razón suficiente para que el Comité Olímpico de la Isla pida la expulsión de uno de los favoritos a medalla de oro en canotaje por incumplir presuntamente las normas de la Carta Olímpica y del propio COI. “Ante esta realidad, y teniendo en cuenta que el COI no se ha pronunciado sobre nuestro más reciente mensaje al respecto, el Comité Olímpico Cubano se ve en la obligación de informar públicamente esta situación y exigir la inmediata expulsión del referido deportista de los Juegos Olímpicos de París 2024, según las normas que rigen el Movimiento Olímpico Internacional”.
“El Comité Olímpico Cubano reitera su más enérgico rechazo a la inclusión de deportistas cubanos en el EOR, como parte de la manipulación política del deporte”, concluye el documento.
El pasado mayo, tras el anuncio de que dos atletas cubanos exiliados participarán en el EOR, el Gobierno de la Isla acusó al Comité Olímpico Internacional y a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) de “robo de talentos” y de cómplices de “la política agresiva y criminal de Estados Unidos contra Cuba, que ha usado el robo de talentos y organizado la migración irregular –con todo su costo humano encima, porque la vida no les interesa–, con el objetivo de desacreditarla, atacando a una de sus grandes conquistas: su movimiento deportivo”.
La verdadera causa de la denuncia es el prestigio que le resta a las delegaciones deportivas cubanas, históricamente entre las de mejor medallero en las olimpiadas, que dos de sus nacionales participen en un equipo que incluye a atletas de países que persiguen a las voces críticas como Irán, Venezuela, Afganistán y Siria.
Jorge Enríquez abandonó el 6 de marzo la concentración de la delegación cubana que viajó a México para un campamento
Que uno de esos deportistas cuente con una medalla de oro de Tokio 2020 y el otro sea campeón en levantamiento de pesas (2022 y 2023) en Reino Unido, es otro duro golpe para el equipo cubano, que viajará a París con una de las delegaciones más mermadas que ha tenido nunca.
Jorge Enríquez abandonó el 6 de marzo la concentración de la delegación cubana que viajó a México para un campamento. Su fuga se dio siete meses después de haber conquistado la medalla de oro al lado de Serguey Torres en la prueba de 1.000 metros. Desde ese momento pasó a ser un desertor a ojos de las autoridades deportivas cubanas que lo acusaron de dar “la espalda al compromiso con nuevos resultados para su deporte y su pueblo”.
Por su parte, Mora abandonó la Isla en 2019 y llegó a Blackpool (Reino Unido). La necesidad de obtener ingresos para mantenerse lo llevaron a trabajar en un circo. De ahí pasó a Bristol, donde se estableció y consiguió el récord británico de halterofilia en las categorías de 89 y 96 kilogramos.
Otros 19 cubanos participarán en los juegos de París representando a países como España, Estados Unidos, Chile, Portugal, Canadá, Azerbaiyán, Bulgaria, Bélgica, Polonia, Puerto Rico, Brasil, Italia y Turquía. Seis de ellos son boxeadores o practican alguna disciplina del atletismo, dos de las categorías por las que se reconoce a Cuba mundialmente.