El Estado cubano no tiene MLC para pagar su deuda con los productores de leche

La Habana/La empresa láctea de Ciego de Ávila debe ya 60.000 en moneda libremente convertible (MLC) a los ganaderos de la provincia, que están produciendo muy por encima de lo contratado para acceder al estímulo que se les prometió por ello. Sin embargo, el Estado cubano afirma no disponer de suficientes fondos en divisas para cumplir con su promesa.

Rubén Pina Ángel Bello, el director de producción en la Empresa Láctea, cuenta al diario Invasor que los ganaderos están haciendo su parte y más, pero los esfuerzos son nulos porque no hay divisas. "Muchos están sobrecumpliendo, como promedio, unos 800 [litros] cada mes y nuestros contratos son con 2.309 ganaderos, lo cual debe seguir aumentando; pero aun cuando la empresa alcanza un 110% de sobrecumplimiento del plan de leche, el destino de nuestras producciones no genera toda la moneda convertible que necesitamos", explica.

Según el texto, los ganaderos avileños están entregando este año 21.900 litros de leche más cada día que el año pasado. Pero el sector lácteo recibía aproximadamente 70 toneladas de leche en polvo anual que, sumadas a la fresca, servían para completar parte de sus producciones y rutas.

Para cubrir esa importación, que la nota no menciona si ha desaparecido por completo y las razones, los ganaderos tendrían que añadir unos 19.000 litros de leche diarios y, además, un excedente no concretado para los derivados, tales como helados, yogures, mantequilla o queso que se puedan vender en MLC. De ahí se obtendrían los ingresos para pagar lo prometido a los ganaderos, que han debido producir en unas condiciones en que la divisa es imprescindible.

Pina explica que para este año el volumen total previsto es superior a 16 millones de litros, uno más que en 2021, pero calcula que se quedarán en 12 millones

Pina explica que para este año el volumen total previsto es superior a 16 millones de litros, uno más que en 2021, pero calcula que se quedarán en 12 millones. Según el funcionario, la deuda se acumula desde febrero "sin que allí puedan hacer algo" porque la culpa, según se desprende del resto del texto, es de quienes no producen o quienes optan por vender por la izquierda, bien porque saben que no van a recibir el pago del Estado o porque van a sacar más rendimiento en el mercado informal.

"Ante la deuda lógica del sector lácteo con los sobrecumplidores (y quizás precisamente por ello) otros han aplicado la suya: producen sus derivados y los venden, o se van al mercado informal donde el litro puede llegar a 50 pesos y un MLC alcanzar los 110.00. Aplican ellos la convertibilidad que no aplica el Estado y deducen que vendiendo 'por fuera' ganan más que con el sobrecumplimiento, por el que reciben 20 pesos, más 10 centavos de MLC. Esos centavos, en la tasa informal, representan unos 11 pesos. O sea, el litro sobrecumplido los deja con 31 pesos, por debajo del litro en la calle", reza la nota.

La industria avileña necesita, según el texto, 44.000 litros diarios de los que 38.000 se van en la canasta, lo que no revierte en las divisas que el Estado busca desesperadamente.

El Gobierno incluyó como medida estrella entre las 63 dictadas para estimular las producciones el pago por los excedentes de leche en moneda libremente convertible. La idea era motivar al ganadero a producir más y que, a su vez, pudiera hacer frente a los costos de importaciones y otros gastos que cada vez se presentan más en moneda dura. Pero las denuncias por impagos han aparecido casi desde el principio y la devaluación de la divisa en el mercado oficial no atrae al ganadero que, en efecto, puede conseguir mucho más si vende la leche en el mercado paralelo.

La producción de leche de vaca en toda la Isla fue en 2020 de apenas 455.300 toneladas, un derrumbe total frente al 1.120.000 de 1989.

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