Decenas de productores cubanos se niegan a vender leche a la industria estatal en Las Tunas

La Habana/Las Tunas se suma a la debacle de la producción lechera en Cuba. La principal causa, según Periódico 26, consiste en la ineficiencia de 22 de las 31 cooperativas de la ciudad cabecera, que han fallado en entregar los litros pactados. A ello se suma, explican las autoridades, la negativa de 72 campesinos del mismo municipio a firmar contratos con el Estado.

El diario oficialista reconoce que en los últimos años ha habido una "drástica disminución de esas producciones", lo que dificulta en el municipio de Las Tunas garantizar la leche a más de 35.550 niños menores de 7 años, que deben recibir, a través del mercado racionado, un litro diariamente.

En medio de un proceso para contabilizar el ganado de todos los campesinos y evitar "desvíos" tanto de vacas como de sus productos derivados, la solución propuesta por las autoridades ha sido crear 15 comisiones de trabajo para visitar a los ganaderos uno por uno, y convencerlos de entregar más leche a la Empresa de Productos Lácteos, que compra el alimento para su posterior procesamiento.

La solución propuesta por las autoridades ha sido crear 15 comisiones de trabajo para visitar a los ganaderos uno por uno

Periódico 26 no ahonda sobre los beneficios que se ofrecerán en estos "intercambios" a los productores para que se animen a cumplir con los planes de entrega, pero asegura que la industria de la Isla, que tiene a sus principales provincias lecheras descarriladas, "no se puede permitir" otra debacle en Las Tunas.

Manuel Pérez Gallego, secretario del Partido Comunista en la región dijo que "el objetivo no es sancionar a nadie, es incrementar la entrega de leche para satisfacer las necesidades de los niños que requieren del alimento". El dirigente propone además  profundizar en las causas que afectan a los campesinos en la producción de leche y "convencerlos" de que deben entregar más al Estado.

El problema en Las Tunas no es reciente. Al cierre de diciembre de 2021, Periódico 26 informó de que, hasta noviembre de ese año, en la provincia se produjeron solo 16.911.500 litros de leche, en lugar de los 24.206.600 previstos en el plan anual.

La sequía, la falta de alimentos para el ganado y la escasez de medicamentos de uso veterinario eran, entonces, las causas esgrimidas para justificar la escasez de leche en la provincia. Dos años después, en el primer trimestre de 2023, en el mismo territorio la principal causa de muerte del ganado era la desnutrición, lo cual incidía principalmente en las gestantes.

Casi al cierre del pasado año, Periódico 26 volvió sobre el tema,  pero esa vez con un nuevo enfoque: los campesinos, reticentes a pactar con el Estado y que revendían la leche en el mercado informal a mejores precios que los estatales, eran los nuevos culpables de la debacle en la industria.

"El objetivo no es sancionar a nadie, es incrementar la entrega de leche para satisfacer las necesidades de los niños que requieren del alimento"

Jorge Luis Hechavarría Lozada, jefe del Departamento de Ganadería en la Delegación del Ministerio de la Agricultura, dijo en diciembre pasado al periódico provincial que "en los chequeos que se hacen en todos los municipios se ha demostrado que no se entrega todo lo que realmente se produce". También explicó el directivo que, en ese momento, había 47 termos de enfriamiento rotos, de los 124 de los que se dispone en Las Tunas para conservar la leche, pero que "no tenían recursos para reparar compresores y ventiladores, entre otros aditamentos".

La solución, en este caso, es dejar la responsabilidad a las cooperativas y que las mismas acudan a trabajadores del sector privado para realizar las reparaciones. 

El desplome en las entregas de leche normada ha afectado a todo el país. En 2023, Ciego de Ávila contrató 12,3 millones de litros de leche, cuatro millones menos de los que se podían producir en la provincia.

El pasado 15 de febrero, el diario Invasor publicó una "estrategia" de distribución de leche que incluye vender solo medio litro a los niños menores de 7 años y aquellos infantes con dietas médicas por padecer enfermedades crónicas, y complementar su dieta con un refresco vitaminado.

Otros malabares se han hecho en provincias como Ciego de Ávila o Sancti Spíritus, donde Invasor reconoció recientemente que hace meses Ciego de Ávila recibe cada día 3.000 litros de leche desde Sancti Spíritus. Sin embargo, según publicó en enero el diario Escambray, la industria espirituana hace meses que no logra cumplir con la entrega diaria de 20.000 litros que demandan los enfermos con dietas médicas, solo en la ciudad cabecera. 

Por su parte, Camagüey, la mayor productora láctea de Cuba, apenas entregó 42 de los 69 millones de litros pactados con el Estado el pasado año. En 2023, en toda Cuba se dejaron a deber 21.000 toneladas de leche, 6.715 más que en 2022.