Las dictaduras son las responsables del éxodo cubano y venezolano, no las sanciones de EE UU
Dos expertos desmontan los argumentos de congresistas y economistas contra el senador Bob Menéndez
La Habana/Los académicos cubanos Juan Antonio Blanco y Emilio Morales, que presiden la organización Cuba Siglo 21, criticaron este jueves el contenido de dos cartas firmadas por congresistas y economistas estadounidenses contra el senador demócrata Bob Menéndez, en las que se le acusa de usar una "falsa narrativa" en su defensa de las sanciones de EE UU contra los regímenes de Cuba y Venezuela.
En mayo pasado, un grupo de congresistas encabezados por la demócrata Verónica Escobar envió una misiva a la Casa Blanca demandando a la Administración de Joe Biden el cese de las sanciones a Cuba y Venezuela –entre otros reclamos–, bajo el pretexto de que la asfixia económica provocada por esta medida era la causa de que los cubanos y venezolanos emigraran a EE UU.
Menéndez, que preside el Comité de Relaciones Exteriores de la Casa Blanca, respondió negando que hubiera una relación entre las sanciones y la estampida migratoria, que atribuye más bien a la falta de derechos humanos y la presencia de "brutales dictaduras" que "han destruido las economías de sus países".
A inicios de julio, otra carta de crítica a Menéndez fue rubricada por 50 economistas y académicos, entre los que se encontraba el Premio Pulitzer Greg Grandin
A inicios de julio, otra carta de crítica a Menéndez fue rubricada por 50 economistas y académicos, entre los que se encontraba el Premio Pulitzer Greg Grandin, e insistía en el reclamo de Escobar. Además, alegaba que no existía "ninguna investigación seria" que apoyara los argumentos del senador.
Al debate se suman ahora, en defensa de Menéndez y con sendos artículos publicados en la página web de Cuba Siglo 21, Blanco y Morales. Ambos académicos desacreditan la propuesta de los congresistas y economistas, por olvidar que los regímenes de Cuba y Venezuela son los "causantes de la deplorable situación" socioeconómica de ambos países.
"Hay que comenzar por decir que Cuba y Venezuela no son, ni de lejos, los principales países que aportan migrantes en esta crisis que se ha producido desde que Joe Biden entró a la Casa Blanca, en enero del 2021", asegura Morales, quien ofrece datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE UU para respaldar su argumento.
Cuba y Venezuela ocupan el cuarto y quinto lugar respectivamente entre los países emisores de migrantes. Desde 2020, ambos han contribuido a la crisis migratoria en apenas un 5,8% y 5,5%, mientras que México (con 2.323.278 migrantes), Honduras (690.888) y Guatemala (683.031) representan en conjunto el 49,5% de los migrantes que llegaron a las fronteras estadounidenses en el mismo período. Sin embargo estos tres países reciben financiamiento e inversiones de Washington, y no están sometidos a embargos ni sanciones, lo cual demuestra que culpar a las sanciones de EE UU del éxodo es una falacia.
Las causas de que los cubanos se exilien, asevera Morales, hay que buscarlas en la represión gubernamental. La estampida "se desató después de darse la orden para reprimir al pueblo por el dictador Miguel Díaz-Canel, el 11 de julio de 2021", explica. Desconocer el efecto de la vigilancia, el miedo y la violencia policial en la Isla por parte de los académicos que enviaron su misiva a Menéndez los convierte, a los ojos de Morales, en figuras "buenistas" que ignoran cómodamente la realidad del país pecando, como mínimo, de "ligereza intelectual".
El problema de Cuba y Venezuela no proviene de las sanciones de EE UU, sino en las dictaduras que durante décadas "han destruido internamente a sus respectivas economías"
El problema de Cuba y Venezuela no proviene de las sanciones de EE UU, sino en las dictaduras que durante décadas "han destruido internamente a sus respectivas economías con el robo impune de los recursos del Estado y con políticas de control que impiden a sus ciudadanos generar riquezas", insiste Morales en su artículo.
Varios ejemplos ofrecidos por el académico hacen referencia a la economía cubana que –incluso analizando las cifras oficiales– se encuentra en números rojos. Morales asegura que basta mirar los ingresos de los nueve rubros más importantes de la economía de la Isla –remesas, turismo, minería, servicios médicos, tabaco, azúcar, pescados y mariscos, y productos agrícolas– para constatar que se han mostrado en progresiva degradación desde 2013.
"Este declive no se debe ni al embargo, ni a las sanciones implementadas por la administración de Donald Trump al régimen cubano, sino a un régimen de gobernanza con instituciones políticas y económicas totalitarias al que se suma la ineptitud de la élite de poder y su Gobierno", resume.
Para Morales, los 7.000 millones de dólares en concepto de alimentos que ha importado Cuba desde EE UU entre 2001 y 2023 demuestran que el embargo no tiene tanto peso en la economía cubana como le adjudican los funcionarios y dirigentes en la Isla para justificar la escasez.
"En el caso de Venezuela ocurre algo similar. El deterioro de la economía venezolana no se debe a las sanciones que impuso la Administración de Donald Trump, sino al desfalco y la corrupción del chavismo, que llevó a Venezuela a la quiebra financiera", agregó.
La conclusión de Morales y Blanco es idéntica y defiende la postura de Menéndez, que insiste, frente al Gobierno de EE UU, en recrudecer su postura hacia el régimen de la Isla. Ambos piden a los académicos firmantes de las cartas contra el senador que reclamen, más bien, la devolución de las libertades a los ciudadanos de Cuba y Venezuela, su derecho a generar riquezas y a expresarse libremente. De lo contrario, concluyeron, su posición los hace cómplices de dos de las dictaduras más criminales del continente americano.
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