El Gobierno cubano está perdiendo la guerra por un dólar más barato
La divisa cayó porque menos gente quiso comprar cuando la tasa llegó a su máximo. "Ahora está sucediendo lo contrario”, dice el economista Pavel Vidal
Madrid/“El otro día en esa tiendita privada me compraron dólares por unos 280. Hoy me dieron 350, y sin rechistar”, cuenta Gladys, una habanera que ha intentado resistir el vendaval sufrido por la divisa en el mercado informal cubano las últimas semanas. Las mipymes y los grupos de compraventa han vuelto a ser un hervidero.
La lujuria por la moneda estadounidense ha rebotado casi tanto –un salto de 70 pesos en apenas tres días– como su hundimiento a lo largo de la segunda quincena de mayo, cuando registró la mayor caída desde que se mide la tasa de cambio. El 16 de mayo la divisa se cambiaba por 395 pesos, momento en el que comenzó a entrar en una espiral bajista que a muchos, por momentos, pareció imparable.
El lunes 3 de junio, cuando se vendía por apenas 280 pesos (un 29% menos que 15 días atrás), el dólar se estancó y comenzó una subida, 24 horas más tarde, que parece haber cogido la vertical. Este viernes, el valor ronda los 350 pesos y los vendedores se frotan las manos, muchos de ellos tras haber logrado resistir una temporada a la baja sin entrar en pánico y venderlo. Los que confiaron en los pronósticos de los economistas –no solo los vinculados a El Toque, también otros más próximos al régimen– respiran aliviados.
Este viernes, el valor ronda los 350 pesos y los vendedores se frotan las manos, muchos de ellos tras haber logrado resistir una temporada a la baja sin entrar en pánico y venderlo
“De alguna manera logré pasar el bajón con los 20.000 que tenía guardados y no tuve que tocar las lechugas”, cuenta, entre risas, un usuario de uno de los grupos de seguimiento a la tasa en el mercado informal.
“Esta ha sido la mayor corrección de todas, tanto por su tamaño lineal (115 cup) como estructural (29%)”, repasan en la conversación. Los expertos atribuyen la caída del dólar a varios factores coyunturales, empezando por el retorno de los servicios de envío de remesas de Western Union, anunciado el 9 de mayo, e incluyendo los apagones, que forzaron un descenso en las importaciones de las pymes en reacción a una disminución de las compras de los consumidores para evitar que la mercancía se echara a perder a falta de refrigeración.
Las anteriores grandes caídas fueron la de junio de 2021 (con un 25,2% y 10 días de duración), precipitada por la suspensión de los depósitos en efectivo de dólares que anunció el Gobierno cubano. Después hubo otras, como la de octubre de 2022, del 17,5% y 15 días: y la de mayo de 2022, muy similar, con 17,4% y 12 días.
Bastaba suponer que, tal y como bajó, iba a subir más pronto que tarde, ya que no se han producido cambios estructurales en la política económica del Gobierno ni, por descontado, del Banco Central de Cuba, sin margen de decisión sobre política fiscal.
Pasada la ilusión, en las filas del oficialismo vuelve la polémica. “Varias personas, desde Cuba, me dicen que hoy las ofertas de dólares están subiendo en grupos de Revolico y Compraventa a 320, a 330 y a 350 pesos por dólar, pero cuando les escribes a los supuestos vendedores no tienen nada o no responden”, denuncia El Necio en redes sociales para, a continuación, lanzar su diatriba.
"¿Qué ocurre? Señores, estamos claramente ante una operación dirigida desde Miami a través de 'bots' y perfiles anónimos que suban la oferta para generar inflación"
“¿Qué ocurre? Señores, estamos claramente ante una operación dirigida desde Miami a través de bots y perfiles anónimos que suban la oferta para generar inflación. ¿Quiénes lo hacen? Pueden ser bots automatizados para generar publicaciones en redes sociales con ofertas de dólares o personas detrás de perfiles anónimos. ¿Tantas personas para hacer eso? Una sola persona que esté siendo pagada para eso puede tener 10, 20 o 30 perfiles enfocados en hacer esas ofertas fantasmas que al final El Toque refleja”, acusa sin aportar pruebas.
Pero en el otro lado del cuadrilátero también están convencidos de una operación similar por parte del oficialismo y para ello toman como referencia un mensaje que se ve repetido en decenas de cuentas en redes sociales. “El Toque va a comenzar a subir la tasa en el mercado informal. Es importante orientar a todos nuestros amigos a que suban publicaciones en los grupos de compra y venta de cada poblado del país que compren dólares a menos de 250 pesos. Es importante seguir bajando la inflación inducida”, dice el texto.
El mensaje lo divulga en un grupo de Telegram un usuario que acusa al oficialismo de hacer circular este tipo de mensajes, incluso mediante el uso de bots, para manipular la tasa de cambio del dólar. “Evidentemente, la campaña de influir en el mercado informal de divisas es un hecho. Según lo que veo de Facebook, son miles de mensajes diarios, mayormente a la baja”, acusa.
"Lo que vemos es que la caída de la tasa no se explica por ofertas falsas, sino por un fenómeno extendido entre todos los participantes"
Pavel Vidal, investigador principal de El Toque y economista cubano afincado en Colombia, advierte de que está elaborando un nuevo informe que intente aportar luz a esta caída y auge de la divisa estadounidense en tan pocos días, pero rechaza de antemano, como ha mantenido siempre, que los movimientos sean fruto de la especulación. “Lo que vemos es que la caída de la tasa no se explica por ofertas falsas, sino por un fenómeno extendido entre todos los participantes. En general, más personas comenzaron a ofrecer sus dólares y menos querían comprar porque valoraban que el precio de las divisas había llegado a un máximo. Ahora está sucediendo lo contrario”, reflexiona.
Reconoce que hay un margen siempre para que ofertas falsas incidan mínimamente en la variación de la tasa, pero sostiene que no son determinantes. Además, añade que en el caso del mercado cubano, la informalidad, la escasa disponibilidad de estadísticas económicas oficiales y el hecho de que gran parte del mercado se mueva en redes sociales contribuyen a aumentar la incertidumbre, pero que la tendencia la determinan otros factores: el déficit fiscal (previsto por encima del 18% para este año en Cuba), la emisión de dinero (abundante, para cubrir, aunque sea precariamente, los programas sociales del Estado), la importación (que supone X miles de millones ) y el nivel de producción nacional (ínfimo). Mientras nada de esto cambie, la moneda nacional seguirá perdiendo valor frente a un dólar en constante escalada, no exenta de correcciones.