La industria del azúcar en Cuba
En la primera década del siglo XX, Cuba comenzó a controlar gran parte del negocio con fábricas en su territorio, además de exportar unos cinco millones de toneladas del endulzante
La producción y la exportación de azúcar han sido elementos clave en la economía cubana durante siglos pero la situación ha cambiado radicalmente en la última década. La isla se ha convertido en un importador neto de azúcar. Sin embargo, la sociedad cubana ha estado profundamente marcada por el cultivo de la caña de azúcar que el militar español Diego Velázquez introdujo a finales del siglo XV y, al principio, supuso un tedioso proceso para extraer el endulzante.
Posteriormente, se desarrollaron métodos más eficaces y rápidos, que derivaron en la expansión de las plantaciones y, por lo tanto, en una extracción que fue creciendo paulatinamente.
En la primera década del siglo XX, Cuba comenzó a controlar gran parte del negocio con fábricas en su territorio, además de exportar unos cinco millones de toneladas del endulzante.
No obstante, desde 1960, el negocio comenzó a tener altibajos destacables, particularmente con la ruptura de relaciones con Estados Unidos. Aunque inicialmente Cuba sustituyó con éxito a su socio comercial por la Unión Soviética, la desaparición de la potencia rusa, a principios de los años 90, provocó una fuerte crisis económica. Cuba tuvo que abrirse a nuevos mercados pero le está costando mucho trabajo adaptarse a la nueva situación.
A nivel mundial el azúcar sigue siendo un elemento codiciado, aunque las tendencias saludables que recomiendan un uso moderado del endulzante han provocado una ligera baja de su cotización internacional, como se ve reflejado en el precio de las materias primas.
Si bien Cuba sigue siendo exportadora, en 2018 tuvo que importar azúcar de Francia para cubrir las necesidades básicas de su población. Desde entonces, el Gobierno ha estado trabajando en varias estrategias para incentivar el mercado y la diversificación de la industría azucarera con varias inversiones en el sector. La más notable es la transformación del central azucarero Ciro Redondo, en el que se invertirán más de 70 millones de dólares con el objetivo de mejorar su productividad.
La gastronomía cubana utiliza el endulzante de forma generosa en distintos platos, como la mazamorra con queso, que se compone de maíz molido mezclado con azúcar y otros ingredientes. La cocina cubana es un referente en varios países, sobre todo en Estados Unidos, donde restaurantes como Son Cubano o Kuba se han vuelto muy populares. Asimismo, la historia del azúcar en el país atrae a centenares de turistas al museo de Morón, en la provincia de Ciego de Ávila, donde se puede ver a qué punto esa materia prima ha tenido un papel clave en la historia y el desarrollo de la sociedad cubana.