"Argentina es peronista, Argentina es especial"
Buenos Aires/(EFE).- "En Argentina no puede haber un Gobierno que no sea peronista. Argentina es especial", presume un "puntero" en el cierre de campaña del oficialista Daniel Scioli en Buenos Aires, un acto multitudinario ajustado a la más pura liturgia peronista.
Antonio Benjamín González es un puntero (operador político), o, como él prefiere, un "referente social", del oficialismo en La Plata, la capital de la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, gobernado durante ocho años por el hoy candidato presidencial por el Frente para la Victoria.
"Estamos aquí para acompañar a Daniel" dice, en medio de una multitud de militantes y de un mar de banderas argentinas y de pancartas de las más dispares agrupaciones peronistas, que abarrotan el Luna Park de Buenos Aires.
"Llega al 41 % y puede subir más hasta el domingo", presume un estrecho colaborador de Scioli antes de acceder a un estadio abarrotado.
Las encuestas no adelantan certezas, por el contrario, apuntan a una segunda vuelta, el próximo 22 de noviembre
Para ganar en primera vuelta, Scioli tendría que alcanzar un 45 % o llegar al 40 con diez puntos de ventaja en las elecciones del domingo. Y las encuestas no adelantan certezas, por el contrario, apuntan a una segunda vuelta, el próximo 22 de noviembre.
Pero en su último acto electoral, se vive un clima de triunfalismo. El candidato lo convierte en una fiesta con su amigo Ricardo Montaner, que calienta el ambiente interpretando dos temas que encandilan a la multitud.
Arropado por gobernadores y pesos pesados del peronismo tradicional, Scioli comienza agradeciendo a Cristina Fernández su gestión porque deja "un país ordenado, desendeudado, con paz social". Y el fondo del Luna Park se viene abajo: Los gritos de "Néstor no se murió" se mezclan con "Si nos tocan a Cristina que quilombo se va a armar".
Uno de los que grita es Mariano Bruera, operador político y hermano de Pablo Bruera, alcalde de La Plata. Bruera presume de haber llevado hoy al Luna Park a más de 1.200 militantes de La Plata en decenas de colectivos (autobuses).
Otros tantos, dice, han llegado de otros municipios de la provincia, como Lomas de Zamora o La Matanza. En conjunto, calcula un centenar de autobuses. "Los han puesto las empresas de autobuses, que quieren colaborar", comenta. "La gente quiere venir a defender al peronismo" asegura, convencido de que Scioli se adjudicará la presidencia el domingo,
"Hemos hecho un trabajo de mucho tiempo. Barrio a barrio, casa por casa. Militando. Hablamos con los vecinos, les explicamos que Macri (Mauricio Macri, el candidato conservador, segundo en los sondeos) quiere acabar con las ayudas, con la asignación universal por hijo, con el fútbol gratis". "Y lo entienden. Van a ir a votar", asegura.
A su lado, González no quiere ni pensar en que Scioli no logre su objetivo: "Si perdemos se queda mucha gente en la calle. Mucha gente del mundo político. Y no vamos a perder".
"En Argentina no puede haber un Gobierno que no sea peronista. No lo dejan. No lo dejaron a Alfonsín porque los paros se los hacían los peronistas"
"En Argentina no puede haber un Gobierno que no sea peronista. No lo dejan. No lo dejaron a Alfonsín (el presidente Raúl Alfonsín, radical) porque los paros se los hacían los peronistas. Por eso te digo, la Argentina es especial", resume.
Mientras, Scioli va terminando su discurso. Convoca a votar por su candidatura a los indecisos, a los independientes y hasta a los radicales, "porque Alfonsín inició muchas de las políticas que nosotros implementamos en estos años", clama desde el escenario.
A su espalda, una imagen emblemática: Evita se refugia en los brazos de Perón en el balcón de la Casa Rosada ante una multitud de "descamisados" que abarrota la Plaza de Mayo. Fue en 1951.
En las gradas, se agitan cientos de banderas, entre ellas una que reza "Peronistas sin fronteras".
"Mirá lo que es esto. La Argentina es peronista. Es especial", concluye el puntero.