El aumento del hambre obliga a más personas a migrar en el mundo
Roma/(EFE).- El aumento del hambre hace que más personas tengan que abandonar sus hogares y exacerba los conflictos armados en todo el mundo, según los últimos datos difundidos por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de Naciones Unidas.
Un nuevo estudio establece que cuando la inseguridad alimentaria de una población crece un 1%, también aumenta en un 1,9% el número de personas que se ven obligadas a emigrar.
Además, un 0,4% más de personas dejan atrás sus países de origen por cada año que pasa de conflicto, lo que implica que un Estado con altos niveles de hambre y conflicto tendrá mayores flujos de migración hacia el exterior de sus fronteras.
El PMA recordó en una nota que, pese a que las personas buscan reducir su inseguridad alimentaria a través de la migración, el mismo hecho de desplazarse puede causar hambre por el alto costo y las duras condiciones del viaje.
El director ejecutivo de la organización, David Beasley, señaló que entender las dinámicas que llevan a las personas a migrar permite ayudarlas mejor para intentar acabar con su sufrimiento.
David Beasley señaló que entender las dinámicas que llevan a las personas a migrar permite ayudarlas mejor para intentar acabar con su sufrimiento
Según el informe, la comunidad internacional debe invertir en la alimentación de los desplazados cerca de sus lugares de origen para evitar más movimientos, fomentar el desarrollo socioeconómico de las áreas e intervenir de forma más eficiente.
El PMA constató que las personas que huyen normalmente no quieren abandonar sus hogares y prefieren permanecer lo más cerca posible.
Casi ocho de cada diez familias de refugiados sirios entrevistados han sido desplazados internos en su país al menos una vez, y el 65 % de ellas dos o más veces.
Las agencias humanitarias se quejan de que no tienen fondos suficientes para atender actualmente a los 30 millones de personas que sufren o están en riesgo de padecer hambruna en el Yemen, Sudán del Sur, el noroeste de Nigeria y Somalia, además de otros países en conflicto.
En 2016 el PMA entregó alimentos y dinero para comprarlos a unos 7 millones de refugiados en 32 países, y ahora necesita 600 millones de dólares para seguir asistiéndolos hasta septiembre próximo.