Los ucranianos esperan que la operación en Kursk ayude a revertir el curso de la guerra
Rusia frenó el rápido avance de Kiev en su territorio, pero admite que tardará tiempo en expulsar al enemigo
Moscú/Leópolis/Kiev/El éxito inicial de la incursión en Kursk da esperanzas a Ucrania de que, al quedar expuesta la vulnerabilidad de Rusia, los aliados extranjeros relajen sus restricciones al uso de armas occidentales contra territorio ruso y aumenten su ayuda para proteger su integridad territorial en lugar de abocarla potencialmente hacia concesiones territoriales y de otro tipo.
Aunque es demasiado pronto para sacar conclusiones definitivas sobre los resultados de la operación, entre persistentes preocupaciones sobre la presión rusa en el este, muchos ucranianos han recibido las noticias de Kursk con renovado optimismo, tras la larga escasez de buenas noticias desde el frente.
“Nuestras fuerzas allí pueden causar estragos entre los rusos al demostrar que ambos bandos pueden verse afectados por la guerra y que no sólo Rusia puede entrar en nuestro territorio”, dijo a EFE Maksim, un soldado de 30 años de Odesa con el alias de Forest. La incursión también muestra a los aliados que “el demonio no es tan terrible como lo pintan ” y que los rusos también tienen debilidades, subrayó.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró este domingo que las fuerzas ucranianas sufrieron hasta 1.350 bajas desde el inicio de la incursión
La operación militar especial de Ucrania en Kursk es “una acción asimétrica” que demuestra que los ucranianos son “audaces y valientes”, mientras que los rusos no son tan “fuertes y temibles”, coinicidió la analista de asuntos internacionales Olga Tokariuk. “Si este cambio de percepción ayuda a Ucrania a conseguir más apoyo para sus acciones en territorio ruso, entonces la operación merece la pena”, subrayó en X.
Son estas “acciones asimétricas” las que pueden servir para que Ucrania consiga la victoria, en un contexto de continua ventaja de Rusia en número de fuerzas y equipamientos, así como el lento apoyo militar por parte de los aliados, explicó a EFE Oleksi Melnik, experto en seguridad internacional del Centro Razumkov de Kiev. Para impedir que Rusia siga aumentando sus fuerzas en Ucrania, Ucrania necesita la capacidad de destruir la logística militar rusa al otro lado de la frontera, subrayó.
En tanto, durante el sexto día de la ofensiva ucraniana en la región de Kursk, Moscú ha logrado frenar su rápido avance por territorio ruso pero se prepara para largos combates con tropas enemigas, mientras la población local es evacuada en masa a lugares más seguros.
"Pueden ser semanas, un mes o hasta dos", dijo este domingo uno de los presentadores del canal Soloviov Live, acerca de la duración de la operación para la expulsión de las tropas ucranianas que incursionaron en territorio ruso el pasado martes.
Coincide con él Ruslán Levíev, analista ruso y fundador del proyecto de investigación Conflict Intelligence Team, quien afirmó en un vídeo publicado este domingo que la ocupación de territorios rusos en Kursk puede alargarse por "semanas o meses".
Simultáneamente, varios blogueros militares informaron de los intentos de los ucranianos de reforzar las posiciones ocupadas en Rusia y conquistar nuevos territorios sin que se sepa hasta el momento la magnitud exacta de la operación de Kiev, que se ralentizó tras la llegada de refuerzos rusos a la zona.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró este domingo que las fuerzas ucranianas sufrieron hasta 1.350 bajas desde el inicio de la incursión terrestre en la región de Kursk. A la vez, los militares informaron de nuevos intentos de las tropas enemigas de avanzar en el marco de la ofensiva en Kursk, que fueron rechazados por el Ejército ruso.
Moscú ha logrado frenar su rápido avance pero se prepara para largos combates con tropas enemigas
Kiev no se ha pronunciado explícitamente acerca de los objetivos de la incursión, que pilló por sorpresa a la parte rusa, aunque el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, sí agradeció a los soldados que "ayudan a llevar la guerra al territorio del agresor" sin mencionar la operación en Kursk. "Agradezco a cada unidad de nuestras Fuerzas de Defensa que hace que esto suceda. Ucrania está demostrando que realmente sabe cómo restablecer la justicia y garantiza exactamente el tipo de presión que se necesita: presión sobre el agresor", subrayó Zelenski el sábado.
Las autoridades rusas reconocieron este domingo la incursión ucraniana en el distrito de Belovski de la región de Kursk, colindante con la vecina Sudzha, por donde las tropas entraron a Rusia el martes pasado sin que se haya logrado hasta ahora su expulsión. "Ayer se registró la entrada de un grupo subversivo ucraniano en el territorio del distrito de Belovski, nuestros defensores lograron estabilizar la situación", escribió el gobernador en funciones de Kursk, Alexéi Smirnov, en su canal de Telegram.
Smirnov aseguró que actualmente en esa zona "no hay combates" y que las tropas rusas hacen "todo lo necesario para proteger a la población civil". "Es importante no dejarse llevar por el pánico. Pero si quieren abandonar voluntariamente el distrito, lo pueden hacer", dijo, y llamó a los lugareños a contactar con las autoridades locales o llamar a una línea telefónica especial para informarse sobre las posibilidades de evacuación.
La portavoz del Ministerio de Exteriores, María Zajárova dijo este domingo que la respuesta a los ataques ucranianos contra la infraestructura civil rusa con el fin de intimidar a la población "no se hará esperar" y será "dura". "Condenamos rotundamente estos bárbaros actos terroristas destinados a destruir la infraestructura civil, matar e intimidar a civiles", afirmó al comentar el bombardeo nocturno de Kursk y otras regiones rusas con drones y misiles.
Zajárova aseguró que los "organizadores y autores de estos crímenes" tanto en Ucrania, como en el extranjero, tendrán que rendir cuentas. "La dura respuesta de las Fuerzas Armadas rusas no se hará esperar", aseveró. Mientras, las autoridades de Kursk, donde anoche fueron derribados 14 drones y 4 misiles Tochka-U, elevaron a 15 el número de los heridos en el bombardeo, que dañó varios edificios. Otros 16 drones fueron derribados en las regiones de Bélgorod, Briansk, Voronezh y Oriol, según el Ministerio de Defensa ruso.
En la noche de este sábado varios blogueros militares rusos informaron sobre la entrada de tropas regulares ucranianas en el distrito de Belovski con armamento pesado, información que luego fue retractada por ellos mismos. Según datos oficiales, al menos 76.000 personas abandonaron desde el martes pasado las localidades próximas a la frontera con Ucrania en la región de Kursk.
A la vez, este domingo las autoridades de otra región fronteriza, Bélgorod, también informaron de la huida de la población de algunas localidades colindantes con la vecina Kursk ante el temor a la intensificación de los ataques.
Las autoridades de otra región fronteriza, Bélgorod, informaron de la huida de la población de algunas localidades colindantes con la vecina Kursk
El avance de las tropas ucranianas por Kursk desde el pasado martes se ralentizó este fin de semana coincidiendo con la llegada de refuerzos de Moscú, pero la actividad de las fuerzas de Kiev dio lugar a temores de nuevos ataques fronterizos a gran escala. "Durante la última jornada se rechazaron los intentos de unidades enemigas de adentrarse profundamente en territorio ruso", afirmó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
Moscú subrayó que las unidades de la agrupación Séver (Norte) y la aviación rusa, así como los refuerzos que llegaron a Kursk entre ayer y hoy, continúan combatiendo al enemigo al que causaron hasta 175 bajas en un día, asevera. En total, desde el inicio de la incursión Ucrania ha sufrido más de 1.100 bajas, según Defensa.
A la vez, Rusia señaló que sigue combatiendo también en el Donbás, donde el Ejército ruso ha mejorado sus posiciones en varios sectores del frente a lo largo de la jornada pasada.
A la vez, hoy las autoridades de otra región fronteriza, Bélgorod, también informaron de la huida de la población de algunas localidades colindantes con la vecina Kursk ante el temor a la intensificación de ataques ucranianos.
La escasa información sobre la ofensiva ucraniana y el silencio de las autoridades de Kiev no permite a los analistas evaluar correctamente su magnitud. En su último informe diario, el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) aseguró que las tropas ucranianas habían logrado adentrarse 20 kilómetros en territorio ruso y no 35, como se había informado el viernes. Además, aunque ese día se difundió un video que muestra a soldados ucranianos cerca del centro de la ciudad de Sudzha, a unos 8 kilómetros de la frontera, el ISW no ha podido confirmar que la localidad se encuentre totalmente bajo control ucraniano.
Los blogueros militares rusos informaron, por su parte, de que las fuerzas rusas lograr parar el avance ucraniano hacia Lgov y Korénevo, dentro de la región de Kursk. También se informa sobre la recuperación de la localidad de Martínovka, que había caído en manos de las tropas de Kiev en el marco de su ofensiva.
Paralelamente, los canales de Telegram ucranianos difundieron imágenes de una supuesta entrada de sus grupos subversivos en territorio de la región rusa de Bélgorod, fronteriza con Kursk y con Ucrania. El gobernador de Bélgorod, Viacheslav Gladkov, aseguró que había visto los polémicos videos, pero aseguró que los lugareños no habían alertado de la posible presencia del enemigo en la comunidad en cuestión.
Ante la amenaza de nuevos ataques, las autoridades rusas declararon el "régimen de operación antiterrorista" en tres regiones fronterizas
"No han visto al enemigo, ni han escuchado disparos", aseguró y llamó a las fuerzas del orden a esclarecer la situación. Sin embargo, ante la amenaza de nuevos ataques, las autoridades rusas declararon el "régimen de operación antiterrorista" en tres regiones fronterizas: Kursk, Bélgorod y Briansk.
Mientras, la agencia nuclear rusa Rosatom alertó de que las acciones de las fuerzas ucranianas en Kursk, que acoge una central atómica, "representan una amenaza directa" no sólo para esa planta, ubicada en la ciudad de Kurchatov, "sino también para el desarrollo de toda la industria mundial de la energía nuclear". Según la empresa, este jueves en el recinto de la planta atómica fueron hallados fragmentos de unos misiles derribados, incluido la zona del complejo de procesamiento de residuos radiactivos.
Además, los ataques de Kiev en Kursk dejaron ayer sin electricidad la ciudad de Kurchatov, situación se que pudo subsanar en unas horas.
La guerra entre Rusia y Ucrania resonó hoy en Bielorrusia, cuyas autoridades acusaron a Kiev de violar su espacio aéreo y escalar así las tensiones entre ambos países. El ministro de Defensa de Bielorrusia, Víktor Jrenin, anunció que el país eslavo reforzará sus tropas en la frontera con Ucrania tras derribar unos drones lanzados por Kiev.
"El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas dio instrucciones para reforzar la agrupación de tropas en las direcciones tácticas de Gómel y Mozir, declaró Jrenin. Entre los equipos que Minsk traslada a la frontera se encuentran los sistemas de misiles Polonez e Iskander, precisó. La nueva escalada de tensiones entre Minsk y Kiev se produce poco después de que ambos países decidieran retirar sus refuerzos de la frontera común al considerar improbable la posibilidad de un ataque en ese frente.