La Cámara de Comercio de España ve en Cuba “importantes oportunidades de negocio”
Madrid/La Cámara de Comercio de España se ha fijado como "prioridad" el reforzamiento de las relaciones empresariales con Cuba, como lo demuestra el nombramiento a la vicepresidencia este jueves de Modesto Piñeiro, que dirige la sección española del Comité Bilateral Hispano-Cubano.
La organización destaca la importancia de hacer negocio con la Isla "tras los primeros movimientos de apertura económica que está acometiendo el Gobierno" y confía en que esto generará "importantes oportunidades de negocio", aunque reconoce que la normalización de las relaciones con Cuba no es inminente.
Piñeiro aseguró que las empresas españolas podrán contar con su apoyo para mejorar las relaciones con la administración de la Isla y se propuso "consolidar el papel de la Cámara como principal institución española canalizadora de la interlocución empresarial" con Cuba.
Los próximo 19 y 20 de mayo se celebrará en La Habana una reunión del Comité Bilateral, presidido por Juan Bautista González Escalona, presidente de Cuba Ron, para que las empresas españolas puedan conocer las prioridades sectoriales y de política económica para los próximos años establecidas en el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba.
En el centro de las peticiones de los empresarios españoles a la Isla se halla la eliminación del monopolio estatal sobre la contratación del personal de las empresas extranjeras, una limitación que lastra la capacidad de los inversionistas para elegir a sus trabajadores calificados.
España es el principal inversor extranjero en el sector turístico y el tercer socio comercial de la Isla con más de 200 empresas operando -sobre todo pymes- y un intercambio comercial anual que ronda los 1.000 millones de euros. En 2015, la exportación a Cuba creció un 38%, hasta alcanzar los 964 millones de euros, según datos de la Secretaría de Estado de Comercio. Mientras la exportación española está muy diversificada, la importación está muy concentrada en productos como ron, azúcares, marisco, tabaco y chatarras de diversos metales y en 2015 supuso un total de apenas 125 millones de euros.