Un caótico consejo de ministros televisado refleja las fracturas del Gobierno de Petro
El Gobierno colombiano se reúne con los jefes de la principal banda criminal del país
Bogotá/El presidente colombiano, Gustavo Petro, y su gabinete protagonizaron este martes un caótico consejo de ministros de más de cuatro horas de duración que por primera vez fue transmitido por televisión y redes sociales y reflejó las fracturas internas del Gobierno.
Petro decidió transmitir la sesión, según dijo, después de ver que se hacía en Cuba, con el argumento de que "la democracia es que el pueblo pueda vigilar, participar" en las decisiones del Gobierno, pues cree que "todo acto administrativo debe ser público y transparente".
Sin embargo, el consejo de ministros terminó siendo un escenario de confrontación en el que varios funcionarios, con la vicepresidenta Francia Márquez a la cabeza, criticaron decisiones del presidente, como el regreso al Gobierno como jefe de despacho del ex embajador Armando Benedetti, acusado de corrupción, así como el excesivo poder de la canciller Laura Sarabia, mano derecha de Petro.
"No comparto su decisión de traer a este Gobierno a esas personas que sabemos que tienen gran parte de responsabilidad con lo que está pasando"
Petro, que afronta el último año y medio de su Gobierno, también aprovechó para cuestionar los resultados de algunos de sus ministros y hablar sobre otros temas importantes como la crisis diplomática con EE UU y el apoyo de Venezuela para enfrentar la violencia guerrillera en la frontera.
El punto de quiebre lo marcó la vicepresidenta, que también es ministra de la Igualdad, y quien aprovechó que el espacio era transmitido al país para manifestarle públicamente a Petro su inconformidad por el nombramiento de Benedetti y para criticar a la canciller Laura Sarabia.
"No me parece, y respeto a Benedetti, pero no comparto su decisión; la respeto porque usted es el jefe de Estado y es el presidente, pero no comparto su decisión de traer a este Gobierno a esas personas que sabemos que tienen gran parte de responsabilidad con lo que está pasando", expresó Márquez, quien fue secundada en su crítica por la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, y por el director del Departamento para la Prosperidad Social (DPS), Gustavo Bolívar.
Benedetti, nombrado el mismo martes en el nuevo cargo por Petro, fue uno de sus mayores apoyos en las elecciones presidenciales de 2022 y su primer embajador en Venezuela, cargo que dejó en medio de un escándalo de escuchas ilegales en el que incluso amenazó con revelar supuestas irregularidades de la campaña del actual mandatario.
En ese escándalo también estuvo involucrada Sarabia, entonces jefa de gabinete, pues fueron conocidas interceptaciones ilegales a su niñera, Marelbys Meza, quien fue sometida a una prueba de polígrafo sin orden judicial tras el supuesto robo en su casa de una maleta en la que había unos 7.000 dólares.
"Trump cree que nos arrodillamos por la mercancía, él cree que somos como él. ¡Ojo! Nosotros somos diferentes, no somos él"
Sin embargo, Sarabia goza de enorme poder en el Gobierno, donde ha ocupado diferentes cargos, el más reciente, el de canciller, desde la semana pasada.
"Y no me parecen en este Gobierno las actitudes de Laura Sarabia con nosotros, conmigo, que me ha tocado decirle, 'Respétenme que soy la vicepresidenta'", reclamó Márquez.
Por esos escándalos, la ministra de Ambiente aseguró: "Tengo que decir que ni las relaciones exteriores ni la actual jefatura de despacho están en manos de este proyecto (progresista), están en manos de todo lo contrario a este proyecto".
Por su parte, la ministra de Justicia de Colombia, Ángela María Buitrago, criticó el manejo de las distintas negociaciones de paz porque no han servido para llevar seguridad y tranquilidad a la gente, así como la corrupción que carcome las instituciones.
"La población hoy está sintiéndose en una inseguridad permanente bajo el fuego de grupos que no entienden, algunos, la bondad del proceso de paz y otros que se aprovechan de esa bondad del proceso de paz", manifestó Buitrago en un consejo de ministros transmitido por televisión y redes sociales al país.
Buitrago dijo que el Gobierno puede hacer obras de infraestructura defendidas por Petro, como carreteras o acueductos, pero el tema de la paz y la seguridad "se lo claman desde todas las regiones".
"Hay que replantearse ciertos aspectos" de la política de paz porque hay gente que "abusa" de la buena voluntad del Gobierno
Por eso, la titular de Justicia le dijo a Petro: "con toda la franqueza, hay que replantearse ciertos aspectos" de la política de paz porque hay gente que "abusa" de la buena voluntad del Gobierno.
"Hay gente a la que solo le interesa la oferta y la demanda y esos grupos tienen un negocio transnacional", reclamó Buitrago, quien también advirtió de la corrupción existente en los centros carcelarios como un factor de violencia. Según la ministra, "el tema carcelario es una expresión minúscula de una sociedad corrupta".
Buitrago lamentó: "Tengo notarios que han salido amenazados de su territorio y que prestaban un servicio público vital, tengo jueces, tengo fiscales que han sido amenazados".
Por eso pidió al presidente replantearse algunos aspectos del Gobierno y dar "garantías de seguridad" a las poblaciones y "dar un viraje fundamental" en el tema de la lucha contra la corrupción.
Petro aprovechó el consejo de ministros para criticar, de nuevo, al presidente de EE UU, Donald Trump, porque considera que los migrantes deben llegar a sus país sin estar esposados y que una vez esto ocurra se hablará de negocios.
"Trump cree que nos arrodillamos por la mercancía, él cree que somos como él. ¡Ojo! Nosotros somos diferentes, no somos él, podemos entendernos sí, no estoy diciendo que no, tiene que entender la diferencia. El progresismo pone la persona por encima de la mercancía. Primero llegan sin esposas y después hablamos de negocios, no al contrario", expresó.
También valoró que las autoridades de Venezuela están "desactivando campamentos" del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en ese país, algo que sucede en medio de las confrontaciones entre esa guerrilla y una disidencia de las FARC en la región fronteriza del Catatumbo.
"Nuestra estrategia con Venezuela en política internacional funcionó, es decir que están desactivando campamentos del ELN en Venezuela"
"Nuestra estrategia con Venezuela en política internacional funcionó, es decir que están desactivando campamentos del ELN en Venezuela porque consideran que es valioso (tener) una relación diplomática sana con Colombia", resaltó Petro.
En el cierre del consejo de ministros, el director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), Jorge Rojas, calificó de "muy audaz, incluso arriesgada" la decisión de transmitir por televisión y redes sociales la sesión.
"En un gesto que valoro por su capacidad de transparencia y comunicación con la opinión pública, pero que seguramente tenemos que revisar en su metodología para que esta comunicación con el pueblo colombiano sea asertiva, tenga resultados y conclusiones", manifestó.
Lo sucedido en la Casa de Nariño encendió las redes sociales donde los ciudadanos han comentado con sarcasmo lo dicho por el jefe de Estado y sus ministros.
Petro autorizó en agosto pasado abrir un "espacio de conversación sociojurídico" con el Clan del Golfo, heredero de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia
Por otra parte, una delegación del Gobierno colombiano se reunió con los principales jefes del Clan del Golfo, la principal banda criminal del país, para avanzar en las negociaciones sociojurídica con las que se busca el "fin de esta organización".
Así lo manifestó este martes el jefe de la delegación del Gobierno nacional en el Espacio de Conversación Sociojurídico, Álvaro Jiménez, quien dijo que la reunión tuvo lugar el lunes.
En ella participaron el máximo jefe del Clan del Golfo, Jobanis de Jesús Ávila, alias Chiquito Malo, y otros líderes de ese grupo como José Gonzalo Sánchez, alias Gonzalito; José Miguel Demoya, alias Chirimoya; Luis Armando Pérez, alias Bruno, y Orozman Osten Blanco, alias Flechas.
Petro autorizó en agosto pasado abrir un "espacio de conversación sociojurídico" con el Clan del Golfo, heredero de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), para fijar los términos de sometimiento a la justicia en los términos permitidos en la Ley.
Al contrario de las otras mesas de negociación instaladas –con el ELN y con una parte de las disidencias de las FARC del Estado Mayor Central (EMC) y con un grupo escindido de la Segunda Marquetalia– se trata de un espacio de conversaciones sociojurídicas, ya que el Gobierno no le reconoce al Clan del Golfo estatus político.
"Esta conversación da lugar a una continuidad que tendremos prontamente en la que aspiramos darle buenas noticias al país"
El encuentro con los líderes del Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), como se autodenomina esta banda, fue "para discutir sobre el desarrollo de las conversaciones alrededor de dos propósitos: el primero la transformación del territorio y el segundo el fin de esta organización y su transición hacia una condición en la que se vitalice el estado social de derecho en las regiones donde hace presencia" ese grupo armado, el mayor de Colombia.
"Además (se habló) de los temas evidentes de protección de la vida, disminución de la violencia en las regiones donde el grupo hace presencia, también abordamos el tema de la migración y el tema del fin de las economías ilegales o la transición de las economías y ilegales en esta transición", expresó Jiménez.
Agregó: "Esta conversación da lugar a una continuidad que tendremos prontamente en la que aspiramos darle buenas noticias al país y es la continuidad también de unas conversaciones que hemos sostenido durante el año anterior, en una etapa que llamamos construcción de confianza".