El año se cierra con el mayor número de periodistas detenidos desde 1990
El último informe del Comité para la Protección de los Periodistas cifra los arrestos en 259
La Habana/Las detenciones de periodistas a escala mundial marcaron un nuevo récord a lo largo de este año, hasta alcanzar los 259 casos al 1 de diciembre, según un informe publicado este martes por el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés). La organización explica que se trata de la cifra más elevada desde 1990, año en el que empezó a mantener registros de los arrestos.
El total de este año supera con creces el de 2015, que clausuró con 199 casos, arrebatando el récord a 2012, cuando se registraron 232 detenciones. Aunque Cuba, Kazajistán, Nigeria, Panamá, Singapur, Túnez, Venezuela y Zambia encarcelaron a profesionales de la comunicación en 2016, sus casos no son objeto de la relación del CPJ.
La organización de defensa de la libertad de prensa en el mundo achaca la responsabilidad del repunte a la fuerte represión registrada en Turquía, que actualmente ostenta el mayor número de presos por ejercer su labor informativa frente a cualquier otro país en un momento específico. El CPJ denuncia que al menos 81 periodistas -alrededor de un tercio del total global- se encuentran entre rejas bajo la acusación de cometer delitos contra el Estado. La ola represiva de Ankara en respuesta a un fallido intento golpista en julio ha incluido el cierre de más un centenar de medios de prensa, según el informe especial elaborado por Elana Beiser. El CPJ ha estudiado los casos de otros 67 periodistas encarcelados en Turquía a finales de 2016, pero no ha podido verificar la existencia de vínculos directos con la labor periodística.
China también obtuvo uno de los peores registro del año, tras encabezar el listado de países con mayores detenciones de periodistas en las últimas dos ediciones del informe. El documento aborda también los casos de Egipto, donde el total ascendió levemente en comparación con 2015; Eritrea, donde los periodistas no han sido sometidos a ningún proceso jurídico; y Etiopía, donde la prolongada represión contra la prensa independiente se ha acentuado en los últimos meses.
Aunque Cuba, Kazajistán, Nigeria, Panamá, Singapur, Túnez, Venezuela y Zambia encarcelaron a periodistas en 2016, sus casos no son objeto de la relación
Montenegro hace su ingreso en la relación por primera vez tras la detención de un profesional del sector en 2015, mientras que Irán no se encuentra entre los cinco primeros países con el peor registro de periodistas presos, donde se mantenía desde 2008. Sin embargo, el informe destaca que el Gobierno de Teherán continúa encarcelando a la prensa y que actualmente ocho profesionales se encuentran presos, frente a los 19 de hace un año.
En las Américas, la situación empeoró con la presencia en las cárceles de cuatro periodistas, en comparación con ninguno el año anterior.
El CPJ solo incluye en el informe a periodistas encarcelados por las autoridades gubernamentales, excluyendo a los que han desaparecido o permanecen en cautiverio a manos de actores no estatales, así como los numerosos profesionales que han sido encarcelados y liberados a lo largo del año.
Del total de 259 detenidos a escala mundial, más del 20% sufre problemas de salud. Casi tres cuartas partes de los presos son acusados de cometer delitos contra el Estado y aproximadamente el 20% de ellos son freelance.
En las Américas, la situación empeoró con la presencia en las cárceles de cuatro periodistas
Este año el Gobierno cubano aumentó su preocupación por el fenómeno del periodismo independiente y la ha expresado aumentando los arrestos, las confiscaciones de útiles de trabajo y la imposición de cartas de advertencia policial a los reporteros.
La expulsión de su puesto de trabajo en la emisora local Radio Holguín del periodista oficial José Ramírez Pantoja, la detención del equipo de Periodismo de Barrio mientras intentaba cubrir los daños ocasionados por el huracán Matthew y el acoso contra los integrantes de la Asociación Pro Libertad de Prensa (APLP) se cuentan entre los casos más sonados en los últimos doce meses.
El periodista José Antonio Torres y excorresponsal del periódico oficialista Granma aún no ha recibido, a pesar de haberlo solicitado con insistencia, un beneficio penitenciario que le permita pasar el resto de la condena de 14 años en su casa. Torres lleva cinco años preso y sostiene su inocencia en relación con las acusaciones de espionaje por las que fue juzgado.