Comey desmenuza las presiones de Trump sobre los vínculos con Rusia
Washington/(EFE).- "Necesito lealtad. Espero lealtad", le dijo el presidente de EE UU, Donald Trump, a su entonces director del FBI, James Comey, según el testimonio, con tintes cinematográficos, que ofrecerá este jueves ante el Comité de Inteligencia del Senado y en el que desmenuza sus "preocupantes" conversaciones con el mandatario.
El texto preparado para la esperada intervención de Comey en la Cámara Alta fue revelado el miércoles por el propio Comité, y recoge con sumo detalle los encuentros y las conversaciones telefónicas que el director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) mantuvo con Trump hasta que este lo cesó de forma fulminante.
Trump le despidió de manera inesperada hace un mes, lo que despertó una gran polémica, ya que muchos lo interpretaron como un intento de frenar las pesquisas de Comey sobre los vínculos entre la campaña del magnate y el Gobierno ruso para influir en los comicios presidenciales del año pasado.
"Espero que puedas ver claro el camino para dejar pasar esto, para dejar que Flynn se vaya. Él es un buen tipo", le dijo Trump a Comey
Tras su cese, los comités del Congreso que investigan el papel del Kremlin en las elecciones solicitaron a Comey que testificara a puerta cerrada, algo a lo que éste se negó, pidiendo que fuera en público, lo que ocurrirá hoy.
Además de exigirle "lealtad", Comey relata en sus anotaciones cómo el multimillonario le solicitó que "dejara pasar" las investigaciones sobre su exasesor de seguridad nacional Michael Flynn, quien tuvo que renunciar por sus nexos con Rusia.
"Espero que puedas ver claro el camino para dejar pasar esto, para dejar que Flynn se vaya. Él es un buen tipo", le dijo Trump a Comey, según las notas que redactó tras uno de sus encuentros a solas y que citará en su esperado testimonio del jueves.
Asimismo, el ya exdirector del FBI confirma que en reiteradas ocasiones le dijo al presidente que él no estaba siendo investigado personalmente sobre esta trama.
Comey detallará, además, cómo el mandatario le invitó poco después de tomar posesión, en enero, a una cena en la Casa Blanca en la que parecía que iba a haber más asistentes y que acabó siendo sólo entre ellos, en la que el magnate le preguntó si deseaba seguir al frente del FBI.
"Empezó preguntándome si quería seguir siendo el director del FBI, cosa que me pareció extraña porque ya me había dicho dos veces en conversaciones anteriores que esperaba que me quedara, y le había asegurado que tenía la intención de hacerlo. Dijo que a mucha gente le gustaba mi trabajo y, dada la presión que había tenido durante el año anterior, él entendería si yo quería irme", escribe Comey.
"Mis instintos me dijeron que el encuentro cara a cara y la pretensión de que nuestra primera discusión fuera sobre mi puesto, significaba que la cena era, al menos en parte, un esfuerzo para que yo le rogara por mi trabajo y crear algún tipo de relación de clientelismo. Eso me preocupó mucho, dada la posición tradicional del FBI de independencia del Poder Ejecutivo", agrega.
Comey, según sus anotaciones, reiteró a Trump su deseo de cumplir su mandato de diez años al frente de la policía federal, cargo al que accedió en 2013, y le aseguró que "siempre podría contar" con su "honestidad" y para decirle la verdad.
De corroborarse esta versión, Trump podría ser acusado de intento de obstrucción a la Justicia, violando la separación de poderes que ampara la Constitución estadounidense
"Momentos más tarde, el presidente dijo: 'Necesito lealtad, espero lealtad'. No me moví, hablé, ni cambié mi expresión facial de ninguna manera durante el incómodo silencio que siguió. Nos miramos simplemente en silencio. La conversación siguió adelante, pero volvió al tema cerca del final de nuestra cena", asegura.
El exdirector del FBI explica que después del primer encuentro decidió tomar nota de sus conversaciones con el mandatario y notificárselo a la dirección de la Oficina, textos que han sido filtrado a varios medios, pero que Comey no había confirmado públicamente.
Comey asegura que revisó el asunto con la cúpula del FBI, que no tenía intención de acatar la solicitud del presidente sobre Flynn, y concluyeron que "dado que se trataba de una conversación cara a cara no había manera de corroborar" su versión.
Con el testimonio revelado en la víspera de su comparecencia ante los senadores, el exdirector del FBI asegura también que "imploró" al fiscal general, Jeff Sessions, que no le dejara de nuevo solo con el presidente dado el cariz inapropiado que estaban tomando las conversaciones.
De corroborarse esta versión, Trump podría ser acusado de intento de obstrucción a la Justicia, violando la separación de poderes que ampara la Constitución estadounidense.