Los familiares de un periodista chino que huía del país creen que puede haber sido "secuestrado" por Pekín
Pekín/(EFE).- El periodista chino Li Xin desapareció hace dos semanas cuando trataba de huir de su país, y su familia y amigos temen que haya sido "secuestrado" por las autoridades chinas, según alertaron este miércoles en declaraciones a Efe.
El activista y exlíder estudiantil de las protestas de Tiananmen de 1989 Zhou Fengsuo, que ayudó en el pasado a disidentes y otras personas mal vistas por el Gobierno chino a pedir asilo político en otros países, explicó desde Estados Unidos a través de un e-mail a Efe que Li le contactó para que le ayudara a exiliarse pero no lo consiguió.
Li, editor de un periódico de la provincia sureña de Cantón, huyó primero a India cuando no pudo más con la presión que ejercían las autoridades sobre él, que le obligaron a espiar a gente y a conseguir información.
El periodista y, en ocasiones, activista, consiguió llegar a Tailandia en su intento de conseguir asilo en algún país de Occidente, cuenta Zhou, y desapareció cerca de la frontera con Laos, justo después de que le dijera a su mujer por mensaje dónde se encontraba.
"Lo más probable es que haya sido secuestrado por el Gobierno chino", asegura Zhou, que hace referencia a los casos ocurridos recientemente.
Los activistas chinos Jiang Yefei y Dong Guanping también vieron frustrado su objetivo de escapar del régimen chino al pasar por Tailandia
Entre ellos, está el del sueco Gui Minhai, librero de origen hongkonés que trabaja para una editorial que publica libros críticos con el régimen y que está en paradero desconocido, presuntamente en manos de las autoridades chinas.
Gui desapareció a mediados de octubre durante un viaje a Tailandia, y este mes apareció por sorpresa en la cadena oficial de la televisión china CCTV afirmando que se entregó a las autoridades chinas para "rendir cuentas" por un crimen que cometió hace años.
Los activistas chinos Jiang Yefei y Dong Guanping también vieron frustrado su objetivo de escapar del régimen chino al pasar por Tailandia. Allí viajaron el año pasado para intentar refugiarse en un tercer país pero Bangkok decidió deportarles, a pesar de su estatus de refugiados.
Ambos habían huido después de haber sido encarcelados en el pasado en China por sus críticas al Gobierno.
La familia del periodista Li ha intentado denunciar su caso, pero las autoridades han comenzado a presionarles.
La esposa de Li, He Fangmei, ha sido citada por la policía bajo la sospecha de que pertenecía a una secta y le ha requisado el teléfono tras hablar de la desaparición de su marido con los medios.
Según pudo comprobar Efe, el teléfono de He se encuentra sin servicio, y ningún otro familiar quiere hablar sobre el tema.