"Somos fuertes", el mensaje un año después de familiares de víctimas del ataque de Hamás

Recuerdan en Madrid a los cerca de 1.200 muertos, en varios actos con familiares de víctimas

Nissim Louk, padre de Shani Louk, asesinada por Hamás y cuya imagen en la parte de atrás de una furgoneta se hizo viral en todo el mundo, participó en el homenaje en Madrid de la comunidad judía.
Nissim Louk, padre de Shani Louk, asesinada por Hamás y cuya imagen en la parte de atrás de una furgoneta se hizo viral en todo el mundo, participó en el homenaje en Madrid de la comunidad judía. / Europa Press / Jesús Hellín.
EFE/14ymedio

07 de octubre 2024 - 17:15

Madrid/"Somos fuertes" fue el mensaje lanzado este lunes en Madrid por familiares de víctimas del ataque de Hamás a Israel, al recordarlas un año después.

La Federación de Comunidades Judías de España recordó a los cerca de 1.200 muertos, en un acto con familiares de algunas de las víctimas, tanto israelíes como españolas.

Como recordó Dan Poraz, representante de la Embajada de Israel en España, el ataque del grupo islamista Hamás del 7 de octubre del año pasado fue "la mayor masacre en su solo día desde el Holocausto" contra los judíos.

Poraz recordó que 383 de los muertos eran extranjeros, entre ellos dos españoles –Maya Villalobo e Iván Illarramendi–, así como 40 de los 251 secuestrados.

A sus palabras siguieron las de Nissim Louk, padre de la joven israelí Shani Louk, cuyo cuerpo exhibido por Hamás en Gaza se convirtió en una de las imágenes de la crueldad del ataque.

Nissim Louk llamó a preguntarse qué imagen prefiere el mundo, la de su hija feliz como otros jóvenes que disfrutaban en un festival de música aquel día o aquella de su cuerpo en un todoterreno junto a hombres armados.

"Cuando yo miro esa imagen siento orgullo", dijo Nissim Louk, "el orgullo de saber que Shani estaba del lado del bien"

"Somos fuertes", insistió el padre, pero reclamó el apoyo del resto del mundo, al la vez que denunció que sin el respaldo de Irán no habría ataques contra Israel de grupos armados desde Gaza, Líbano o Yemen. "Soy fuerte", aseguró en la misma línea una superviviente que trabajaba en el festival cuando se produjo el ataque, la joven israelí Carmel Efron, quien nunca olvidará aquel horror del que temió no salir con vida.

Ambos también intervinieron este domingo en un emocionante acto en la sinagoga del Centro Judío de Madrid. Louk, quien explicó que su apellido tiene raíces en España (Louk viene de Lugo, la ciudad gallega), expuso que cuando alguien tenga dudas de dónde se encuentra el bien y el mal, que mire la imagen difundida por numerosos medios y dividida en dos: a un lado, su hija, joven y hermosa, entre montañas verdes, y al otro, sus secuestradores llevándosela rota en un coche. "Cuando yo miro esa imagen siento orgullo", dijo Nissim Louk, "el orgullo de saber que Shani estaba del lado del bien".

Efron, por su parte, narró todo lo que tuvo que hacer hasta salvar su vida la mañana de aquel sábado. Su motor, contó, fue su hija pequeña, de la que es madre soltera.

"Cuando yo miro esa imagen siento orgullo", dijo Nissim Louk, "el orgullo de saber que Shani estaba del lado del bien"
"Cuando yo miro esa imagen siento orgullo", dijo Nissim Louk, "el orgullo de saber que Shani estaba del lado del bien" / Collage

Maya Villalobo, de 19 años doble nacionalidad española e israelí, se encontraba en la base de Nahal Oz, también atacada, cumpliendo el servicio militar. Su padre, Eduardo Villalobo, envió este lunes un mensaje en vídeo, al encontrarse en este día en Israel, donde fue enterrada su hija, en el que confesó que un año después "sigue la tristeza y el dolor" igual que entonces.

La otra víctima española fue Iván Illarramendi, de 46 años, que junto con su esposa chilena Loren Garcovich, de 47, fue asesinado en un kibutz.

Su hermano Ander recordó que su familia pasó el peor mes de su vida, algo "horroroso", hasta que identificaron sus cuerpos, asesinados "con una crueldad que no había manera de explicar".

"Lucharemos hasta que encontremos la justicia y que con ello venga la paz, no pararemos", exclamó.

El acto, que incluyó una oración en hebreo y música de violín, lo cerró el presidente de la entidad organizadora, David Obadía, con el aviso de que "se necesita mucho mayor compromiso" para frenar el aumento del antisemitismo en España desde hace un año, mientras "nadie piensa en las familias" de las víctimas en este aniversario "trágico y triste".

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