Hamás espía la actividad política e incluso la amorosa de los palestinos, según el NYT
- EE UU, preocupado por un informe que alega abusos a palestinos en centros de detención de Israel
- La ONU niega haber rebajado a la mitad el número de víctimas en Gaza
Jerusalén /Washington/Dos investigaciones en torno al conflicto que se libra entre Israel y Hamás, y que afectan a ambos actores, preocupan en EE UU. Por un lado, el diario neoyorquino The New York Times publica este martes un reportaje en el que afirma que la organización islamista monitorea desde hace años la actividad política, las publicaciones en línea y aparentemente incluso la vida sentimental de los palestinos que viven en la franja, atrapados entre el bloqueo israelí y una fuerza de seguridad represiva.
El líder de Hamás, Yahya Sinwar, ha supervisado durante años una fuerza de policía secreta en Gaza que vigilaba a los palestinos comunes y corrientes y creaba archivos sobre jóvenes, periodistas y aquellos que cuestionaban al gobierno, asegura el NYT.
El rotativo, que cita como fuentes documentos internos gazatíes y funcionarios de inteligencia israelíes, habla de una unidad, conocida como Servicio de Seguridad General, que dependía de una red de informantes de Gaza, algunos de los cuales denunciaban a la policía a sus propios vecinos.
Los documentos fueron proporcionados al Times por funcionarios de la dirección de inteligencia militar de Israel, quienes dijeron que habían sido incautados en redadas en Gaza.
Muchos de los gazatíes han acabado en archivos de seguridad por asistir a protestas o criticar públicamente a Hamás
Muchos de los gazatíes han acabado en archivos de seguridad por asistir a protestas o criticar públicamente a Hamás, movimiento considerado terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea. En algunos casos, los registros y las vigilancias se extendieron de modo que se siguió a personas para determinar si mantenían relaciones fuera del matrimonio, señala el NYT.
El rotativo dice que Hamás ha dirigido durante mucho tiempo un sistema de gobierno opresivo en Gaza y muchos palestinos allí saben que los funcionarios de seguridad los vigilan de cerca.
Los documentos con 62 diapositivas sobre las actividades del Servicio de Seguridad General a los que ha tenido acceso el diario, escritos sólo unas semanas antes del ataque del 7 de octubre contra Israel que desató la guerra en Gaza, revelan hasta qué punto la unidad, en gran medida desconocida, penetró en las vidas de los palestinos.
«Nos enfrentamos a bombardeos por parte de la ocupación y matones por parte de las autoridades locales», dijo en una entrevista telefónica desde Gaza Ehab Fasfous, un periodista de la franja que apareció en los archivos del Servicio de Seguridad General.
Israel también está bajo la mira del Gobierno de EE UU por el reportaje publicado por CNN sobre el abuso contra los detenidos palestinos en una base militar que ahora funciona como centro de detención en el desierto de Negev. El artículo incluye declaraciones de denunciantes israelíes que dan detalles y proporcionan imágenes.
"Hemos sido claros y coherentes con cualquier país, incluido Israel, en que debe tratar a todos los detenidos humanamente, con dignidad, de conformidad con el Derecho Internacional, y debe respetar los Derechos Humanos de los detenidos", ha indicado el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Vedant Patel.
"Hemos sido claros y coherentes con cualquier país, incluido Israel, en que debe tratar a todos los detenidos humanamente, con dignidad, de conformidad con el Derecho Internacional"
En este sentido, ha afirmado durante una rueda de prensa que Washington ha "reiterado que Israel tiene la obligación de investigar a fondo las violaciones creíbles del Derecho Internacional Humanitario".
En las imágenes que se han hecho públicas se pueden ver filas de hombres vestidos con chándal y sentados en colchones finos en un espacio cercado por un alambre de púas. Todos ellos parecen tener los ojos vendados y les cuelgan las cabezas.
Los denunciantes son israelíes que trabajaban en la instalación y han relatado que los arrestados tenían prohibido hablar entre ellos y moverse. Además, han señalado que hay un hospital de campaña contiguo en el que los detenidos que están heridos han sido atados a las camas, les han puesto pañales y les alimentan a través de pajitas.
La administración del presidente Joe Biden está preocupada también al constatar que Israel ha acumulado suficientes tropas en las afueras de la ciudad de Rafah para poder lanzar una incursión a gran escala sobre ese territorio en los próximos días, informó este martes la cadena CNN. No obstante, altos funcionarios estadounidenses dijeron a CNN que no están seguros de si Israel ha tomado una decisión final sobre ese ataque, que supondría un desafío a Biden, que se ha mostrado contrario a que se produzca.
Una de las fuentes también advirtió de que Israel no ha realizado los preparativos adecuados, que incluyen la construcción de infraestructuras relacionadas con el suministro de alimentos, higiene y refugio para los palestinos, antes de evacuar potencialmente a más del millón de habitantes que actualmente residen en Rafah. La cadena estadounidense indica que, si Israel decidiera acometer una importante operación militar terrestre en Rafah, iría en contra de meses de advertencias de Estados Unidos de renunciar a una ofensiva a gran escala en esa ciudad densamente poblada.
La cadena estadounidense indica que, si Israel decidiera acometer una importante operación militar terrestre en Rafah, iría en contra de meses de advertencias de Estados Unidos
El propio Biden ha expresado su desacuerdo en los términos más explícitos hasta el punto de amenazar con dejar de suministrar armamento a Israel, su principal aliado en la zona. Según CNN, a medida que la guerra avanza –ya ha entrado en su octavo mes–, los funcionarios estadounidenses cuestionan cada vez más el enfoque de Israel hacia el conflicto, incluso sugiriendo públicamente que es poco probable que logre finalmente su objetivo declarado de destruir a Hamás y eliminar su liderazgo.
El pasado lunes, Kurt Campbell, el número dos del Departamento de Estado, dijo que claramente ha habido tensiones entre los dos países sobre “cuál debe ser la forma de obtener una victoria” en esta guerra. “A veces, cuando escuchamos atentamente a los líderes israelíes, hablan principalmente de la idea de algún tipo de victoria arrolladora en el campo de batalla, una victoria total. No creo que creamos que eso sea probable o posible”, precisó Campbell.
El alto funcionario aludía a las repetidas referencias del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, sobre obtener una “victoria total” en el conflicto. Las fuentes citadas por CNN consideran que “tiene que haber una solución más política. De hecho, atacar “precipitadamente Rafah” podría tener consecuencias nefastas, advirtió el domingo el secretario de Estado, Antony Blinken. "Israel está en camino, potencialmente, de heredar una insurgencia en la que quedan muchos Hamás armados o, si se va (De Gaza), un vacío lleno de caos, lleno de anarquía y probablemente llenado por Hamás”, dijo Blinken el domingo en el programa Meet the Press de NBC.
"Por ello, la falta de interés de Israel en los planes del llamado “día después” tras la guerra ha sido una fuente de creciente frustración para los asesores de Biden, según uno de los altos funcionarios de la administración, quien llegó incluso a decir que para que Tel Aviv cree que ese momento postbélico es una cuestión que tiene que resolver alguien más. Este funcionario dijo a CNN que Israel no ha ofrecido puntos de vista claros sobre dos cuestiones importantes: la gobernanza de posguerra y quién supervisaría la seguridad de la franja cuando la guerra finalmente llegue a su fin.
Unas 450.000 personas han huido de Rafah desde el pasado 6 de mayo, según la Unrwa
Este martes, Rafah sufre intensos bombardeos aéreos y de artillería, mientras los tanques israelíes avanzan en dirección oeste hacia el centro de la ciudad, entrando en los barrios de Geneina, Salam y Brazil. Unas 450.000 personas han huido de Rafah desde el pasado 6 de mayo, según la Unrwa.
"Las calles están vacías en Rafah y las familias huyen en busca de seguridad. La gente se enfrenta al agotamiento, hambre y miedo constantes", afirmó la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa).
"Ningún lugar es seguro. Un alto el fuego inmediato es la única esperanza", indicó la agencia sobre la situación en esa ciudad que hasta hace una semana albergaba 1,4 millones de personas.
En cuanto a las cifras, la ONU negó este lunes haber rebajado a la mitad el número de personas muertas en la guerra de Gaza y explicó que el hecho de que queden 10.000 cadáveres sin identificar fue lo que pudo haber inducido a la confusión.
El portavoz de la Secretaría General, Farhan Haq, dijo este lunes que el número total de 34.622 muertos "sigue sin cambios" y de ellos hay disponibles detalles sobre 24.686, mientras que quedan "más de 10.000 cadáveres que aún deben ser identificados”.
De los que se disponen datos, Haq detalló que hay 7.797 niños, 4.959 mujeres, 1.924 ancianos y 10.006 hombres. Precisó que la ONU no tiene capacidad de confirmar de forma independiente estas cifras suministradas por el Ministerio de Sanidad de Gaza, pero recordó que "en el pasado, sus datos han resultado ser generalmente exactos".
El número total de 34.622 muertos "sigue sin cambios" y de ellos hay disponibles detalles sobre 24.686, mientras que quedan "más de 10.000 cadáveres que aún deben ser identificados"
Los tanques hoy han traspasado el umbral de la carretera de Salah al Din, que parte la ciudad en la mitad oriental y occidental, y se llevan a cabo enfrentamientos entre las tropas israelíes y las milicias palestinas ya en la zona urbanizada de la ciudad, indicó a EFE un vecino de la ciudad.
Vídeos en las redes sociales y en medios palestinos muestran un taque israelí en la calle George, en pleno barrio residencial de Geneina, en el centro de la urbe.
Las Brigadas al Qasam, brazo armado de Hamás, informaron de sus ataques con artillería hacia tropas israelíes apostadas en el cruce de Rafah, que conecta con Egipto, y contra un convoy de infantería en el barrio de Salam con un misil Yasin 105.
Mientras, el primer ministro de Catar, Mohamed bin Abderrahmán, aseguró en Doha que las negociaciones para una tregua se encuentran ahora "casi en un punto muerto", pese al avance que hubo en las últimas semanas.
"En las últimas semanas vimos que se generaba cierto impulso. Pero, desafortunadamente, las cosas no avanzaron en la dirección correcta. En este momento, estamos casi en un punto muerto", afirmó el también ministro de Exteriores en el Foro Económico de Catar, país mediador en la guerra junto a Egipto y Estados Unidos.
En una conversación en el foro, aseguró que lo que ha pasado en la localidad palestina de Rafah, en el extremo sur del enclave, "nos ha hecho retroceder un poco". El diplomático catarí indicó que podría haber "un acuerdo en cuestión de días", pero –aseveró– "no hay claridad por la parte israelí sobre cómo parar la guerra. No creo que estén considerando eso como una opción".
El hecho de que no se llegue a un acuerdo es que hay "una diferencia fundamental entre las dos partes: hay una parte que quiere terminar la guerra y luego, hablar sobre los rehenes. Luego, hay otra parte que quiere los rehenes y que quiere seguir (...) y eso no nos llevará a un resultado".