Identifican los posibles restos de otro estudiante desaparecido en Iguala
México/La Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) ha dado a conocer un nuevo informe de la Universidad de Innsbruck que indica que uno de los restos que le fueron entregados el pasado noviembre pueden pertenecer a Jhosivani Guerrero de la Cruz, estudiante de Ayotzinapa desaparecido junto a 42 compañeros entre el 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Sería el segundo de los muchachos identificados por el laboratorio de Medicina Legal de esa institución austriaca, que en diciembre del año pasado ya determinó que uno de los huesos pertenecía a Alexander Mora Venancio, de 21 años.
En una conferencia de prensa sin preguntas, la fiscal Arely Gómez leyó el comunicado textual de Innsbruck, que señala "evidencia moderada" de que una de las 16 muestras óseas que analizaron es del joven Jhosivani. El informe también reafirma que el primer resto identificado pertenece a Mora Venancio, tras un tercer análisis de ADN.
La procuradora anunció, además, que se creará un equipo de trabajo para que se revisen nuevamente "uno a uno" los más de 63 mil fragmentos óseos recolectados del río San Juan el pasado otoño.
Según la versión de la PGR, el 26 de septiembre de 2014 un grupo de policías disparó en Iguala contra un centenar de alumnos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa por órdenes del entonces alcalde esa localidad, José Luis Abarca, en varios ataques que se saldaron con seis muertos y una veintena de heridos. Los policías municipales, a sueldo del grupo criminal "Guerreros Unidos", capturaron a 43 de ellos y los entregaron a sicarios que los asesinaron e incineraron en el basurero de Cocula. Después, siguiendo la hipótesis de la fiscalía, fragmentaron los huesos carbonizados, los metieron en bolsas de basura y los arrojaron al río. Diecisiete de estos restos óseos fueron los enviados a Innsbruck para su análisis.
Los nuevos resultados de la universidad austriaca llegan diez días después de hacerse público el informe del grupo de expertos independientes de la OEA que revela las carencias de la investigación oficial y asegura que es imposible haber quemado en aquel lugar a los 43.
Jhosivani Guerrero de la Cruz, al que apodaban Coreano por sus ojos rasgados, tenía 20 años cuando desapareció y era originario de la comunidad de Omeapa, cerca de Ayotzinapa, donde estudiaba para ser maestro rural.