Iglesia católica de Puerto Rico pide referéndum sobre matrimonio homosexual
(EFE) El arzobispo de San Juan, Roberto González Nieves, propuso hoy un referéndum para que los ciudadanos expresen su opinión sobre el matrimonio entre parejas del mismo sexo en Puerto Rico, una opción que critica el conjunto de la iglesia católica local.
"Exhortamos a nuestro pueblo a iniciar un proceso para que una decisión de esta magnitud y trascendencia histórica se decida mediante un referéndum donde los ciudadanos y ciudadanas se expresen. De no ser así se trataría de una imposición dictatorial par parte del Estado", dijo González Nieves.
Esta propuesta tiene lugar después de que el viernes el Gobierno de Puerto Rico, a través de su secretario de Justicia, anunciara que ceja en su intento de defender que el matrimonio debe ser sólo entre un hombre y una mujer, y que avanzará en el reconocimiento de los matrimonios entre homosexuales así como de todos los derechos que ello conlleva.
"A este tipo de imposición por parte del Estado el papa Francisco la ha llamado colonización ideológica", dijo el también presidente de la Conferencia Episcopal Puertorriqueña, quien en un comunicado calificó la decisión del Gobierno de "muy lamentable y desconcertante".
A su juicio "el deber ministerial" del Gobierno es defender, como había hecho hasta ahora, la constitucionalidad de la legislación actual, que en el Artículo 68 del Código Civil -que se rebate estos días ante la Justicia federal- restringe el matrimonio a las uniones entre hombre y mujer.
"Queremos una sociedad que acoja, acompañe, ame y proteja los legítimos derechos de sus hijos e hijas homosexuales, lesbianas, bisexuales, transexuales y transgénero. Queremos una sociedad que ore por ellos y ellas y que condene y erradique los crímenes de odio. Por eso pedimos igualdad, respeto y tolerancia", afirmó.
Sin embargo, "esto no justifica que su unión sea análoga al matrimonio hombre y mujer, única unión capaz de transmitir vida y que refleja el designio del creador. El Estado tiene que resolver este reclamo de otra manera".
El obispo de la localidad de Arecibo, Daniel Fernández Torres, también lamentó esta decisión, porque "la naturaleza no cambia" y "no se puede reclamar trato igual a lo que por naturaleza no es igual".
"No es lo mismo el efecto de las decisiones de las personas sobre su vida privada que el efecto público de llamar matrimonio a lo que por naturaleza no lo es. Es lamentable que se hayan traicionado de este modo lo valores fundamentales de nuestro pueblo y el futuro de nuestro país", dijo en un comunicado.
La conocida pastora Wanda Rolón, apóstol de la iglesia Tabernáculo de Alabanza y Restauración La Senda Antigua, dijo igualmente que es "un día nefasto para la historia de Puerto Rico. (Desde el Gobierno) se revelaron contra el mismo Dios, pero Jehová no ha perdido una sola batalla. Sigamos orando".
A estos comentarios de crítica y censura, el propio secretario de Justicia, César Miranda, se adelantó el viernes cuando durante la conferencia de prensa en la que anunció el cambio de actitud del Gobierno dijo profesar "todos mis respetos".
Miranda insistió en que respeta "absolutamente" la opinión de todos respecto a este asunto, pero incidió en que "todos los puertorriqueños y puertorriqueñas somos iguales ante la ley".
"Por motivos de orientación sexual en Puerto Rico a unas personas se les niega lo que a otros se les concede, y eso no es correcto ni jurídica ni éticamente", defendió, "particularmente cuando jurídicamente no tienen otra alternativa".
Añadió que las parejas heterosexuales se transmiten entre sí múltiples derechos y protecciones por virtud del matrimonio.
"Esos mismos derechos deben estar disponibles para aquellos que se aman, se cuidan entre sí, que trabajan y aportan a esta sociedad igual que los demás", dijo.