Jesús Santrich intentó quitarse la vida en cárcel, según un senador colombiano
El parlamentario visitó a Santrich en el búnker de la Fiscalía, donde se encuentra detenido el exlíder guerrillero tras recibir el alta médica por parte del Hospital Méderi de Bogotá
Bogotá/(EFE).- El senador colombiano Iván Cepeda, del izquierdista partido Polo Democrático Alternativo (PDA), afirmó este domingo que el exjefe de las FARC Jesús Santrich intentó quitarse la vida antes de ser recapturado segundos después de salir de la cárcel La Picota de Bogotá el viernes pasado.
Así lo aseguró el parlamentario, que visitó a Santrich en el búnker de la Fiscalía donde se encuentra detenido el exlíder guerrillero tras recibir el alta médica por parte del Hospital Méderi, de Bogotá, donde estuvo internado por más de 24 horas.
"Él sostiene que tomó la decisión de quitarse la vida con plena conciencia cuando se enteró (...) de que se estaría en proceso de declarar una conmoción interior y que parte de esa decisión del presidente (Iván Duque) podría ser él tomar el camino de la extradición por encima de decisiones judiciales", afirmó a periodistas.
"Él sostiene que tomó la decisión de quitarse la vida con plena conciencia cuando se enteró (...) de que se estaría en proceso de declarar una conmoción interior"
Según la Constitución, la conmoción interior es un estado de emergencia que puede ser declarado por el presidente de Colombia cuando existan graves perturbaciones del orden público que atenten de manera inminente contra la estabilidad institucional.
No obstante, la Presidencia aclaró el viernes que no tenía ni tiene contemplado decretar ese estado.
El exguerrillero, que tiene problemas de visión, salió de la cárcel La Picota en una silla de ruedas y rodeado por agentes del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), la Fiscalía y la Policía.
Esto ocurrió en cumplimiento de una orden de "libertad inmediata" librada el miércoles por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), que le concedió la garantía de no extradición a Estados Unidos por no contar con pruebas suficientes del caso.
Sin embargo, nada más traspasar la puerta principal, agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía lo recapturaron y lo devolvieron a La Picota desde donde minutos después fue sacado en un helicóptero de la Policía que lo condujo al búnker de esa entidad.
La Fiscalía anuncio que este lunes se llevarán a cabo las audiencias de "imputación de cargos y medida de aseguramiento"
Entre tanto, un juez de control de garantías formalizó ayer la recaptura del exjefe de las FARC, decisión que la Procuraduría (Ministerio Público) apeló, y la Fiscalía anuncio que este lunes se llevarán a cabo las audiencias de "imputación de cargos y medida de aseguramiento".
La Fiscalía también autorizó la visita de Cepeda al búnker, así como de los parlamentarios del partido FARC Victoria Sandino y Benedicto González.
"Él está en la silla de ruedas, tiene una chaqueta muy gruesa, tiene una cobija en las piernas (...) Nos dan confianza en que ahí está el personal médico, que era una de nuestras preocupaciones", señaló, por su parte, Sandino.
El sábado Santrich fue llevado al Hospital Méderi, según el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, por "alteración del estado de conciencia y signos neurológicos positivos".
En ese sentido, la Procuraduría manifestó ayer que considera que al exlíder guerrillero "se le garantizaron los derechos a contar con asistencia legal de sus abogados de confianza, a su protección con el traslado al búnker de la fiscalía, a ser examinado y valorado por médicos allegados, así como por un galeno del Instituto de Medicina Legal y su remisión a una institución médica especializada en un plazo razonable".
Santrich fue detenido en Bogotá el 9 de abril de 2018 por la Fiscalía colombiana acatando los cargos de EE UU por narcotráfico, delito que, según la denuncia, cometió después de la firma de la paz
Santrich fue detenido en Bogotá el 9 de abril de 2018 por la Fiscalía colombiana acatando los cargos de EE UU por narcotráfico, delito que, según la denuncia, cometió después de la firma de la paz.
En caso de que esa denuncia sea cierta, el caso quedaría en manos de la justicia ordinaria y no de la JEP, el mecanismo de justicia transicional creado para juzgar los crímenes cometidos durante el conflicto armado del país.
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