La Justicia china destaca la condena a abogado de DD HH como un logro de 2016
Pekin/(EFE).- La Justicia china destacó hoy la condena a siete años de cárcel a un destacado abogado de derechos humanos, Zhou Shifeng, como uno de sus principales logros durante el año pasado.
Durante 2016, "el Tribunal Supremo Popular ha castigado severamente a quienes amenazaban las seguridad del Estado, terminó el caso por subversión contra Zhou Shifeng y otros de acuerdo a la ley y aumentó los castigos contra el terrorismo y las sectas", afirmó el informe.
El presidente del Tribunal Supremo, Zhou Qiang, presentó este domingo el documento junto con el presidente de la Fiscalía Popular Suprema, Cao Jianming, ante el pleno anual de la Asamblea Nacional Popular, y en presencia de los principales dirigentes, como el presidente, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang.
Zhou Qiang se comprometió en su intervención a seguir actuando para "proteger con decisión la seguridad política del país, en particular la seguridad del poder del Estado y el sistema político".
El abogado Zhou Shifeng, del bufete legal pequinés Fengrui, fue condenado en agosto de 2016 a siete años de cárcel tras ser declarado culpable de intentar subvertir el estado socialista, tras un breve juicio en la ciudad de Tianjin (noreste) en medio de un control policial y un acoso a la prensa muy intensos.
El abogado Zhou Shifeng, del bufete legal pequinés Fengrui, fue condenado en agosto de 2016 a siete años de cárcel tras ser declarado culpable de intentar subvertir el estado socialista
El presidente del Supremo también destacó el caso de Hu Shigen, veterano defensor de la democracia y líder religioso de varias iglesias clandestinas, y que fue condenado a siete años y medio de cárcel un día antes que el abogado Zhou Shifeng.
Otros activistas de los derechos humanos o sindicales fueron también encarcelados o condenados durante el año pasado.
El letrado Zhou Shifeng fue uno de los aproximadamente tres centenares de abogados de derechos humanos, empleados de bufetes legales o familiares que fueron detenidos o interrogados en el verano de 2015, en una campaña inusitada contra ese sector.
Solo cuatro de los detenidos entonces han sido sentenciados, y algunos de los restantes siguen a la espera de que se presenten cargos o incluso en paradero desconocido, sin poder contactar con familiares y abogados.