Maduro aprueba una "reestructuración absoluta" de la petrolera estatal PDVSA
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprobó hoy un decreto para una "reestructuración absoluta" y "un golpe de timón" de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) para "vencer la corrupción y la burocracia" que, según dijo, están presentes en esa empresa.
"La burocracia y la corrupción están unidas y son el cáncer que debemos sanar de la vida social, económica y política de la nación", dijo el jefe del Estado venezolano en cadena de radio y televisión desde el palacio presidencial de Miraflores.
Maduro aseguró que la industria petrolera venezolana tiene "infiltrados" y que tendrá "cero tolerancia con la corrupción y la traición".
Maduro aseguró que la industria petrolera venezolana tiene "infiltrados" y que tendrá "cero tolerancia con la corrupción y la traición"
"Nos han apagado las refinerías tres veces, cada vez que las apagaban estaban coordinaditos con los golpes de Estado que anunciaba la MUD -alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática-, la última vez fue el 1 de septiembre", dijo Maduro en referencia al día en que la oposición realizó una marcha multitudinaria en Caracas.
El gobernante venezolano pidió al presidente de PDVSA y actual ministro de Energía y Petróleo, Eulogio Del Pino, crear de la mano de los trabajadores una comisión de "políticas transformadoras concretas" para "fortalecer" esta empresa.
Maduro tomó esa decisión "para que la clase obrera pase al mando de PDVSA a todo nivel y haya un profundo proceso de transformación socialista, productiva", y añadió que espera recibir un informe cada 15 días sobre cómo va el proceso de reestructuración.
Maduro tomó esa decisión "para que la clase obrera pase al mando de PDVSA a todo nivel y haya un profundo proceso de transformación socialista, productiva"
También ordenó profundizar "el plan de siembra petrolera" y elevar la producción de este hidrocarburo.
El pasado 16 de noviembre el Parlamento venezolano, mayoritario de oposición al Gobierno, aprobó la determinación de responsabilidad política del expresidente de PDVSA Rafael Ramírez, a quien los opositores acusan de estar implicado en casos de corrupción por valor de 11.000 millones de dólares.
Al respecto, el presidente venezolano expresó hoy su solidaridad a Ramírez al afirmar que está siendo objeto de una campaña por parte del imperialismo.
Ramírez, por su parte, ha rechazado esas averiguaciones y asegura que el informe de la Asamblea Nacional (AN) es "falso" y que se "fundamenta en mentiras y difamaciones", por lo que adelantó que tomará acciones legales contra el Parlamento.