La opositora María Corina Machado acusa a la justicia venezolana de arrodillarse a un régimen
Caracas/(EFE).- La opositora venezolana María Corina Machado dijo hoy que le quedó claro que la Fiscalía no tiene elementos para inculparla y que defendió "la verdad", después de ofrecer una extensa declaración en calidad de testigo sobre un supuesto plan magnicida contra el presidente, Nicolás Maduro.
"Yo no puedo relatar los detalles de mi declaración, fue una declaración muy extensa en la cual, con toda la tranquilidad hablé con la verdad y para mi ha quedado más evidente que nunca que no hay ningún elemento que puedan utilizar para inculparme de delito alguno", dijo Machado a periodistas tras declarar en la Fiscalía.
La exdiputada indicó que ofreció una declaración de casi ocho horas en la que ha "defendido la verdad" y ha "enfrentando la injusticia y la mentira".
Indicó que también fue "evidente" que está siendo investigada y que sus correos electrónicos y teléfonos han sido "infiltrados".
La opositora reclamó, además, que no le fue permitido entrar a declarar con su abogado y tampoco ver el expediente porque la fiscal insistió en que sus declaraciones se realizan solo en calidad de testigo.
"Por lo tanto tampoco se me quiso recibir el documento en el cual yo establecía efectivamente que a los efectos de declarar primero quería tener acceso al expediente y (estar) acompañada de abogados", comentó al tiempo que reiteró en que la "justicia está sometida y de rodillas a un régimen".
"Quiero decirle a los venezolanos que esta crisis terrible que vivimos sí tiene una salida y la salida depende de nosotros", insistió.
A su llegada a la Fiscalía a las 09.00 hora local (14.30 GMT) Machado aseguró que ella no podía ser detenida "porque eso sería la muestra final de una dictadura agonizante".
Machado fue citada junto a otros opositores a comparecer ante la Fiscalía en calidad de testigo en el caso abierto por un delito "contra la independencia y la seguridad de la nación" tras una denuncia realizada a finales de mayo por el dirigente del oficialista Partido Socialista Jorge Rodríguez.
Según Rodríguez, Machado estaría involucrada en un plan de desestabilización que incluía un "magnicidio" y un "golpe de Estado" que ya fue abortado, de acuerdo con una serie de correos electrónicos atribuidos a la opositora.
En esos mensajes, Machado supuestamente decía que había llegado la hora de acumular esfuerzos y obtener "el financiamiento para aniquilar a Maduro".
La opositora, que después denunció en la Fiscalía a Rodríguez por siete delitos, ha confirmado que los correos se corresponden con sus cuentas pero que son falsos y que ella no quiere ni un magnicidio ni un golpe de Estado sino una renuncia del actual presidente de Venezuela.
El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, decidió dejar de reconocer a Machado como diputada. El Tribunal Supremo avaló esta decisión, pero la exdiputada solicitó el viernes pasado "protección" a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y la "reivindicación" de sus derechos constitucionales como diputada.
Machado, López y el alcalde Metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, lanzaron a finales de enero una iniciativa denominada "La Salida" por la que exigían el final del Gobierno de Maduro en el marco de la Constitución y llamaban a la protesta de manera pacífica.