Preocupación en Venezuela ante las intrigas para anular las elecciones

Acorralado por el descrédito internacional y el avance cívico de la oposición, la próxima jugada del chavismo para garantizar su supervivencia es tema de decenas de teorías, opiniones y rumores. El planteamiento sobre la posible anulación de los resultados electorales por parte del régimen es –en palabras del ex presidente de Colombia Iván Duque– una de las hipótesis más difundidas y “peligrosas”. 

“Se habla de que en el interior del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela se estaría estudiando la posibilidad de declarar nulas las elecciones, dado que la data pudo haberse corrompido debido al ‘ataque cibernético’ que Maduro quiere utilizar como cortina de humo”, dijo este lunes en la red social X el político colombiano, que ve en el supuesto hackeo de la base de datos del Comité Nacional Electoral (CNE) un pretexto que el chavismo quiere aprovechar.

La teoría no solo es “posible”, sino “estratégica” para el régimen de Nicolás Maduro, opina Duque, que describe paso a paso el posible desarrollo de este plan para mantenerse en el poder. 

En primer lugar, el Tribunal Supremo crearía la escenografía pidiendo al CNE pruebas del ataque cibernético, y las conseguiría pagando a empresas especializadas en seguridad digital, teoriza el ex mandatario. “El dinero lo compra casi todo”, por lo que “conseguir un informe técnico forense de ciberseguridad de una empresa especializada no les será difícil”.

En primer lugar, el Tribunal Supremo crearía la escenografía pidiendo al CNE pruebas del ataque cibernético

Con las pruebas en la mano, el Tribunal declararía corruptas las actas de las votaciones y “desproclamaría” a Maduro como presidente, creando a la vez una coartada para disculpar a las autoridades del CNE que declararon presidente electo al dictador, por contar con información manipulada y poco veraz.

“Esto permitirá al chavismo salir del rincón donde está arrinconado y reorganizar sus fuerzas. Tendrán un período de cuatro meses para corregir todas las fallas, blindar el sistema y garantizar su triunfo en diciembre”, explica Duque, que añade que el régimen podría amplificar su margen de victoria ordenando la liberación de los detenidos durante las protestas de la última semana –“lo cual daría un alivio social”– y prometiendo garantías a la oposición.

“Congelar” la situación, como llama el colombiano a esta estrategia, eliminaría además los “motivos para protestar” y limpiaría la imagen de la dictadura frente a parte de la comunidad internacional reconvirtiendo el “fraude” en “error”.

Duque también señaló que su sucesor en la presidencia de Colombia, Gustavo Petro, podría ser quien negocie –“para ayudar a Maduro”– la anulación de las elecciones con Venezuela, respaldado por otros aliados de la región. “Se está buscando que México y Brasil hagan lo propio”, dijo. 

“Congelar” la situación, como llama el colombiano a esta estrategia, eliminaría además los “motivos para protestar”

Según una entrevista del diario El Tiempo a una fuente del Gobierno colombiano, “Petro es consciente de que Maduro perdió las elecciones y que lo que hicieron los deslegitima, por ello, Colombia trabaja en darle condiciones (al chavismo) y generar confianza para una transición pacífica”. El funcionario también negó que Colombia apoye una anulación de las elecciones: “Se ha hablado de repetir incluso las elecciones, pero Colombia no está del todo de acuerdo porque van a volver a perder y eso incitaría a una mayor escalada del conflicto”.

Otros escenarios posibles, basados en las alianzas del chavismo en la región, incluyen desde el repliegue de la represión para evitar más denuncias y dejar que la tormenta pase, hasta una escalada de la violencia o una dictadura sin Maduro –un “cambio fraude”– que podrían facilitar tanto La Habana como el Grupo de Puebla.

La información de más de 24.000 actas publicadas –el 80% del total– por la coalición del candidato opositor Edmundo González Urrutia en su página web da la victoria a la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) con el 67% de los votos, mientras que Maduro se queda en el 30%.

Los datos han sido validados por varios Gobiernos y decenas de medios independientes y extranjeros. Algunos expertos, como el español Kiko Llaneras, han publicado gráficos y mapas sobre la victoria contundente de la oposición en todos los estados del país a partir de las actas, que incluyen las firmas de los testigos y de los miembros de las mesas, entre otros datos que apoyan la veracidad de la documentación.