El presidente de Bacardí asegura que la compañía estará en Cuba "una vez se levante el embargo"
En los últimos días, la arremetida contra el embargo norteamericano a Cuba está llegando desde varios frentes. A los editoriales de The New York Times sobre el tema se han sumado ahora las declaraciones que Joaquín Bacardí, presidente del gigante de las bebidas, ha hecho al sitio digital just-drinks y que han sido reproducidas en The Royal Gazzette, el principal diario de las islas Bermudas.
"Tenga la seguridad de que, una vez que se levante el embargo, Bacardí volverá a estar presente en Cuba algún día. No hay duda", afirmó Joaquín Bacardí, de la quinta generación de la familia. Estas aseveraciones coinciden con la publicación este domingo de un editorial en The New York Times donde se insta al Gobierno norteamericano a canjear a los tres espías cubanos que aún cumplen condenas en Estados Unidos por el contratista Alan Gross, condenado a quince años de prisión en la Isla.
La compañía de bebidas alcohólicas también aclaró a just-drinks que “no es probable que toda la producción de ron de la compañía se mueva a Cuba”. Para agregar inmediatamente, "tenemos un montón de activos en todo el mundo”, de manera que "va a tener que haber un equilibrio entre los productos que deben salir de Cuba y los que deben provenir de nuestras instalaciones existentes, es probable que haya una combinación de ellos”.
La compañía Bacardí fue fundada en Santiago de Cuba en 1862 por el español Facundo Bacardí Massó. Aunque actualmente la sede internacional de la empresa está en Bermudas, posee oficinas en México, Estados Unidos (Miami) y en Puerto Rico. En 1960 el Gobierno de Fidel Castro confiscó todos los activos de la compañía en Cuba.
Precisamente sobre esto también se mostró esperanzado Joaquín Bacardí. "Debido a que la propiedad ha sido abandonada por muchos años –a pesar de que está siendo operada para producir otros rones– sabemos que las condiciones son muy pobres; no se mantienen muy bien. Por lo tanto, va a requerir una importante inversión de capital".
El Gobierno cubano, a través de su empresa Cuba Ron, y en compañía de la empresa francesa Pernod Ricard, produce la marca Havana Club que ambas tienen registrada en casi todos los mercados fuera de Estados Unidos.
En el año 2011, tras una larga batalla legal de 17 años, la familia Bacardí ganó el derecho a usar el nombre Havana Club para su ron en el mercado de EE UU.