Rumanía juzgará a un excomandante comunista por crímenes contra la humanidad
Bucarest/(EFE).- Un excomandante de un campo de trabajos forzados de Rumanía en el que murieron más de cien opositores a la dictadura comunista será juzgado por crímenes contra la humanidad, según ha anunciado este lunes la Fiscalía General del país.
Ion Ficior, de 85 años, está acusado de dirigir entre 1958 y 1963 el campo de trabajo de Periprava, en el sureste de Rumanía, donde impuso "un régimen de detención represivo, abusivo e inhumano contra los detenidos políticos, registrándose 103 muertes", explica la Fiscalía en un comunicado.
Los fallecimientos se produjeron por desnutrición, frío, golpes y falta de asistencia médica, indica la abogacía del Estado.
La Fiscalía General rumana no informa sobre la fecha de inicio del proceso judicial contra el acusado, quien niega cualquier responsabilidad en esas muertes.
Ficior es el segundo antiguo responsable comunista enviado ante la justicia a petición del Instituto de Investigación de los Crímenes Comunistas.
En septiembre se celebrará un proceso parecido contra Alexandru Visinescu, excomandante de la prisión política Ramnicu Sarat, en el este del país.
El Tribunal Constitucional facilitó a finales del pasado año el camino para condenar a torturadores comunistas, al determinar que los asesinatos no prescriben.
Se calcula que entre 100.000 y 500.000 personas fueron encarceladas en Rumanía por motivos políticos durante el régimen comunista, de 1945 a 1989.
Los únicos condenados hasta la fecha por los crímenes durante el régimen comunista fueron Nicolae Ceausescu y su mujer, Elena, que fueron juzgados en un proceso sumario y fusilados en 1989 durante la revolución que puso fin a la dictadura.