Rusia declara en busca y captura a Zelenski y a un ex presidente de Ucrania
Conflicto
No es la primera vez que Moscú emite una orden de esta clase contra una autoridad ucraniana
Moscú/El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, fue incluido este sábado por Rusia en la lista del Ministerio del Interior de personas en busca y captura en relación con un delito contemplado en el Código Penal de ese país, sin ofrecer más detalles al respecto, informó la agencia oficial rusa Tass.
A la par de Zelenski también fue declarado en busca y captura, por el régimen que encabeza Vladimir Putin, el ex presidente ucraniano Petró Poroshenko, que ejerció la jefatura del Estado entre 2014 y 2019.
Desde la escalada del conflicto a inicios de 2022, Rusia ha intentado capturar a otras autoridades ucranianas, incluido el encargado de la Inteligencia Militar
Esta no es la primera ocasión que Moscú lanza una cacería similar en contra de alguna autoridad ucraniana. Con anterioridad, han emitido órdenes de arresto contra otros altos cargos del país con el que se encuentran en guerra desde febrero del 2022.
En diciembre del año pasado el Ministerio del Interior de Rusia puso en busca y captura al jefe de la Inteligencia Militar, Kirilo Budánov, después de que el Comité de Instrucción ruso inició un proceso penal contra él y otros tres militares ucranianos.
Apenas unos meses después de anunciarse la búsqueda de Budánov por parte de las autoridades rusas, el encargado de la Inteligencia Militar al interior del Gobierno de Zelenski fue arrestado en ausencia en abril pasado, acusado de terrorismo.
Rusia, sobre cuyo presidente, Vladímir Putin, pesa una orden de captura de la Corte Penal Internacional, que lo considera responsable de crímenes de guerra por la deportación ilegal de niños desde Ucrania en medio del conflicto, también ha puesto en su mirilla a varios políticos de la Unión Europea.
En febrero Rusia anunció esa medida en contra de la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, así como contra varios funcionarios y diputados de Letonia y Lituania, con los que el régimen ruso ha sostenido disputas públicas por las fuertes críticas en su contra tras la invasión a Ucrania.
Al dar a conocer dichas medidas, las autoridades rusas detallaron que la orden contra la jefa del Gobierno estonio y los otros políticos bálticos fue adoptada por la “destrucción y daños” causados a los monumentos de soldados del antiguo régimen soviético en Estonia.