"A ver si nos vamos", el último mensaje que recibió de su hija antes de su desaparición en México
Casi tres meses sin noticias de seis cubanos que pagaron 1.000 dólares cada uno a un coyote en Tapachula
Ciudad de México/Margarita Bravo lleva 81 días sin saber de su hija, Meiling Álvarez Bravo, de 40 años, y de su nieto, Samei Armando Reyes Álvarez, de 14, y el consulado de Cuba en México, al que recurrió, le pide “aguantar”. Ellos dos, junto con otros cuatro cubanos, Dairanis Tan Ramos y Elianis, Jorge y Lorena, que se encontraban en Tapachula, Chiapas, están desaparecidos desde el pasado 21 de diciembre.
“Llegó el desayuno, a ver si nos vamos, mami. Besitos, después te escribo”. Este fue el último mensaje de audio que recibió Bravo de su hija, aquel día. Le han seguido desde entonces meses de incertidumbre y de preocupación. Esta habanera cuenta a 14ymedio que su hija y su nieto salieron en busca de un mejor futuro, pero su travesía se ha convertido en una pesadilla.
La mujer dice que el último punto de referencia de sus familiares es una casa cerca del Parque Hidalgo, en Tapachula. De este lugar los iba a recoger un coyote identificado por el alias Chapín. “Al sujeto le pagaron 2.000 dólares” para que los llevará en lancha hasta Juchitán, en el estado de Oaxaca, y así evitarían los retenes del Instituto Nacional de Migración (INM).
Al no tener noticias de Meiling y Samei, que usualmente le daban pormenores del viaje, Margarita les marcó al móvil, pero no encontró respuesta a las llamadas ni a los mensajes. “No sé nada de ellos, los mensajes no les llegan”.
Una conocida, prosigue, presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado de Chiapas por la desaparición de Meiling y Samei. Además, “se presentó en la estación migratoria Siglo XXI y la de Huixtla, pero no hay un registro de ellos en estos sitios”. Además, se puso en contacto con el Consulado de Cuba en México para exponer el caso.
Desde Nebraska (EE UU), otra hija suya, Mayelin, contactó al coyote, pero éste le dijo que no sabía nada de los cubanos, que “seguramente los tenía la Guardia Nacional”. Ante la insistencia por saber su paradero, cambió la versión y señaló que “posiblemente fueron arrestados por los agentes de Migración”.
El tal Chapín aventuró, incluso, que pudieron ser víctimas de un secuestro por las células criminales que operan en la región. Al cuestionarlo sobre el dinero que le pagaron por trasladarlos, aseguró que los cubanos se habían marchado con otro coyote. “No tengo nada que ver con ellos ya”, afirmó.
“No sabemos si es verdad o mentira, porque a él fue al que se le pagó”, insiste Margarita.
Meiling y Samei entraron a México por la frontera sur el pasado 18 de diciembre. La travesía la habían iniciado el día 12 del mismo mes, cuando abandonaron la Isla a través de un vuelo a Nicaragua. Según contó Margarita Bravo una pareja de coyotes guatemaltecos identificados como Marilyn y Rafael se encargaron de llevarlos hasta la frontera de Guatemala.
Entre los desaparecidos está también Dairanis Tan Ramos. La migrante, oriunda de Camagüey, según la denuncia de una prima en Facebook, dejó de tener contacto con su familia desde el día 18 de diciembre.
A estos desaparecidos se suma una ola de secuestros de cubanos en Tapachula. “Carguen con los cubanos”, ordenó un hombre, radio en mano, a sus cómplices armados, según denunció un testigo. Desde noviembre no se sabe nada de Reynaldo Leyva Izquierdo, de 54 años, Dalviris Domínguez (47), Leonel Gutiérrez (28) y Jorge Luis Gutiérrez López (58) que vieron frustrada su travesía hacia EE UU.
En ese mismo mes, también secuestraron y asesinaron a las cubanas Leydi de la Caridad Rodríguez Acosta y Ana Mercedes Capetillo Savón. Sus cuerpos desmembrados fueron depositados en un tanque de residuos y abandonados en un paraje que conecta las comunidades chiapanecas de Pumpuapa con Nueva Granada.