Washington lanza un plan para regularizar a migrantes casados con estadounidenses
Este lunes, el Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos devolvió a Cuba 19 balseros
Washington/El Gobierno del presidente Joe Biden anunció este martes un nuevo programa que permitirá regularizar a más de medio millón de migrantes que viven en el país sin un estatus legal, adelantaron funcionarios en una llamada con reporteros.
La decisión, que beneficiará principalmente a las personas casadas con ciudadanos estadounidenses, llega a menos de cinco meses de unas elecciones presidenciales en las que la gestión de la migración se ha convertido en un tema central para los estadounidenses.
El nuevo alivio migratorio es uno de los más importantes desde que la Administración de Barack Obama creó en 2012 el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que ha permitido a más de 800.000 migrantes obtener permisos de trabajo y protección frente a la deportación. Sin embargo, las nuevas políticas tardarán meses en entrar en vigor y concederán a los migrantes la oportunidad de dar solo el primer paso en el proceso para conseguir permiso de residencia en EE UU, que puede prolongarse años.
El programa se apoya en una figura legal conocida como parole, que otorga a quienes ya están en territorio estadounidense protección frente a la deportación y les posibilita solicitar un permiso de trabajo.
El programa se apoya en una figura legal conocida como 'parole', que otorga a quienes ya están en territorio estadounidense protección
Con este permiso, que tendrá una validez de tres años, los migrantes que entraron al país de manera irregular y están casados con ciudadanos estadounidenses pueden solicitar la residencia y, eventualmente, la ciudadanía. "Estas personas tienen profundos lazos familiares y con su comunidad en EE UU", señaló uno de los funcionarios que adelantaron la medida en una llamada con periodistas.
Para solicitar este alivio, la persona tiene que haberse casado con un ciudadano estadounidense antes del 17 de junio de 2024 y haber vivido en el país al menos 10 años.
A su vez, los hijos menores de 21 años de quienes están casados con estadounidenses y que tampoco tengan un estatus legal también pueden obtener el permiso. No obstante, acotaron los funcionarios, los migrantes que hayan sido deportados de EE UU en el pasado no califican para esta protección.
En teoría, las personas indocumentadas pueden obtener la residencia si se casan con un estadounidense. Sin embargo, para hacerlo deben salir del país y acudir a una embajada, lo cual conlleva el riesgo de que se les prohíba la entrada de nuevo por periodos de tres a 10 años, como represalia por haber estado en EE UU sin estatus legal.
Esta situación, reconocieron los funcionarios, ha llevado a que muchas familias "vivan con miedo y se enfrenten a una profunda incertidumbre sobre su futuro". El alivio anunciado permite que los migrantes puedan solicitar la residencia, también conocida como green card, estando en territorio estadounidense.
Además de este programa, el Gobierno de EE UU anunció este martes que buscará "mejorar" el proceso por el que pueden solicitar visas de trabajo algunos de los que llegaron al país de niños y todavía no han regularizado su situación. El Departamento de Estado creará unas "guías" para dar más claridad y acelerar la expedición de visas H1B para esos "soñadores" que se hayan graduado de una universidad estadounidense y tengan una "oferta de empleo" de una empresa estadounidense.
Los anuncios de la Casa Blanca llegan poco más de dos semanas después de que Biden impusiera una serie de restricciones al acceso al asilo en la frontera que han sido duramente criticadas por grupos en defensa de los derechos humanos.
El demócrata, quien se aupó a la presidencia con un discurso pro-migrante que lo colocaba como la antítesis del ex presidente Donald Trump, ha tomado medidas cada vez más coercitivas con la migración. Este último alivio migratorio es interpretado por expertos como un intento por atraer a los votantes latinos, decisivos en algunos estados clave como Arizona o Nevada, tras haber abandonado su promesa de campaña de ofrecer un camino a la ciudadanía a los más de 11 millones de migrantes indocumentados.
La migración sigue siendo un asunto clave en las campañas presidenciales de Estados Unidos y las medidas tomadas en períodos de elecciones podrían beneficiar a los migrantes por muy poco tiempo de salir vencedor el partido contrario. Mientras, los latinoamericanos siguen cruzando fronteras, marítimas y terrestres para llegar hasta el país norteamericano. Este lunes, el Servicio de Guardacostas (USCG) de los Estados Unidos devolvió a Cuba a un total de 19 balseros, y con ellos se elevan a 688 los cubanos deportados desde diferentes países de la región en 2024, de acuerdo con medios oficiales.
Los retornados en esta fecha habían participado en cuatro salidas ilegales por la zona noroeste de la Isla y fueron interceptados
Los retornados en esta fecha habían participado en cuatro salidas ilegales por la zona noroeste de la Isla y fueron interceptados posteriormente en el mar por el Servicio de Guardacostas estadounidense, según detalló el Ministerio del Interior cubano. Con esta operación realizada por el puerto de Orozco, en la provincia de Artemisa, suman 47 las devoluciones en lo que va de año.
Las autoridades cubanas afirman que mantienen "firme" su compromiso con una migración "segura y ordenada", al tiempo que insistieron en advertir el peligro y las condiciones de riesgo para la vida que representan las salidas ilegales del país. Cuba y Estados Unidos tienen un acuerdo bilateral para que todos los migrantes que lleguen por mar al territorio estadounidense sean retornados a la Isla.
También reanudaron en abril de 2023 los vuelos de deportación, principalmente para personas consideradas "inadmisibles" tras estar retenidas en la frontera de EE UU con México. Según datos publicados por la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), en abril pasado llegaron 17.870 cubanos por mar y tierra a suelo estadounidense, la mayoría por la frontera terrestre con México.
Con esa cifra suman 144.378 los cubanos que han ingresado en EE UU en el año fiscal 2024, que inició el pasado 1 de octubre, agregó la CBP. Desde principios de año también fueron deportados cubanos en vuelos comerciales desde Islas Caimán, Bahamas y República Dominicana.