Las reservas del Banco Central de Cuba dan para menos de tres meses de importaciones
Los fondos reportados en 2018 por La Habana contrastan con la información proporcionada por fuentes internacionales
Boston/Recientemente salió a relucir en un artículo en Cubadebate que las reservas internacionales del país habían caído en 2.550 millones de dólares en dos años (2019 y 2020). También se indicó que las reservas internacionales ascendían a 11.528 millones en 2018. Este último corresponde a una cifra no identificada por el Gobierno desde hace décadas. Mientras la primera noticia no es una sorpresa como muestra la escasez de importaciones y para los analistas de la economía del país, el segundo número resulta más difícil de entender. Aquí trato de dar luz a la situación de las reservas internacionales.
La crisis de liquidez internacional que sufre el país desde hace varios años es evidente en la insuficiencia y carestía de alimentos, medicinas y otros bienes importados de primera necesidad. Muchos ni siquiera están disponibles en las tiendas en MLC a precios con elevados sobrecargos. La maxi devaluación del peso en enero de 2021 y en el mercado informal en los dos últimos años es básicamente una expresión de la aguda escasez de dólares. La crisis de liquidez internacional acompaña a la crisis en el consumo y bienestar del pueblo.
¿Cómo entender lo que está pasando con las reservas internacionales? A falta de transparencia del Gobierno en la publicación de cifras e información, los analistas utilizan cifras de fuentes externas
¿Cómo entender lo que está pasando con las reservas internacionales? A falta de transparencia del Gobierno en la publicación de cifras e información, los analistas utilizan cifras de fuentes externas, ya sea de países que comercian con Cuba o de bancos internacionales que tienen depósitos y emiten préstamos a entidades del país. En este caso las cifras están publicadas por el Banco Internacional de Pagos (BIP) en Basilea, Suiza. Ellos publican las cuentas de bancos en 48 países que tienen transacciones con los residentes del resto del mundo, incluyendo a Cuba. Las cifras del BIP reseñan los depósitos en prácticamente todos los bancos internacionales del mundo.
Resulta que las cifras del BIP indican que los depósitos de bancos cubanos, incluyendo el Banco Central, cayeron en 1.950 millones de dólares entre 2018 y 2020, una cifra cercana a la divulgada en el artículo de Cubadebate. ¿Qué significa esto? Señala que los depósitos de bancos cubanos registrados por el BIP corresponden a las reservas operativas del país. Es de interés que las cifras del BIP muestran un alza de los depósitos de Cuba de 920 millones en la primera mitad de 2022, lo cual señala una mejoría en la liquidez del Banco Central después de una caída en 2021, el punto bajo de la crisis. La posición neta de Cuba con el BIP (activos menos pasivos) también mejoró desde el fin del 2021, cuando era negativa en 330 millones, al registrar un pequeño balance positivo de 23 millones de dólares en junio de 2022. De todas formas, Cuba mantiene reservas operativas muy bajas, una frágil posición de liquidez externa. Los depósitos de Cuba en bancos del BIP eran de 2.066 millones de dólares en junio de 2022 o un poco menos de tres meses de importaciones de bienes.
Las reservas internacionales de 11.528 millones de dólares en 2018 reportadas en Cubadebate contrastan con los depósitos de 3.784 millones registrados por el BIP en ese mismo año. ¿Por qué esa gran diferencia? Una explicación es que la primera cifra representa los activos internacionales del Banco Central y no las reservas. Las reservas son activos en moneda convertible disponibles inmediatamente para satisfacer necesidades de pagos externos del país. Los activos en el Banco Central pudieran incluir, por ejemplo, obligaciones provenientes de exportaciones de servicios a Angola, Argelia, Nicaragua y Venezuela que no pueden ser liquidadas inmediatamente.
Los activos en el Banco Central pudieran incluir, por ejemplo, obligaciones provenientes de exportaciones de servicios a Angola, Argelia, Nicaragua y Venezuela
Hay cuatro tipos de activos en moneda fuerte que forman parte de las reservas internacionales: depósitos en bancos internacionales, depósitos en bancos centrales, valores y depósitos en el Fondo Monetario Internacional. Cuba no tiene los dos últimos ya que no es miembro del FMI y no desea tener bonos de Estados Unidos o países europeos que son los valores que usualmente forman parte de las reservas internacionales. Igual puede decirse de depósitos en bancos centrales de América del Norte, Europa y Japón, los más importantes como custodios de reservas. No sabemos si Cuba tiene depósitos en bancos centrales de China, Irán y Venezuela, por ejemplo, pero estos por lo general no serían activos operativos fuera de transacciones bilaterales con esos países.
Todo esto lleva a que los depósitos en bancos internacionales o sea registrados por el BIP constituyan en buena parte los activos operativos internacionales del Banco Central de Cuba. Esto tampoco es sorprendente. Las estadísticas reportadas por el FMI de cinco países vecinos de Cuba (Costa Rica, Guatemala, Jamaica, Nicaragua y República Dominicana) indican que los depósitos en el BIP ascienden al 72% de las reservas internacionales de esos países a mitad de 2022.
La estrechez de las reservas cubanas se deriva de la inhabilidad de generar suficientes divisas a través de exportaciones y además refleja elementos institucionales dados por políticas internas y externas. Entre esas políticas están las sanciones externas y también la voluntad del Gobierno de alejarse de las instituciones internacionales como el FMI que proveen liquidez internacional en caso de crisis de pagos como la que sufre el país desde hace años.
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Nota de la Redacción: El autor ha sido Economista Jefe en la OEA y Director para América Latina del departamento del Institute of International Finance en Washington.
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