La trampa 20 o el silencio de Rafael del Junco

La Habana/Cuentan los octogenarios que a finales de 1948 la pregunta que más se hacían los cubanos era ¿cuándo hablará Don Rafael del Junco? Y es que durante semanas los radioyentes adictos a la radionovela El derecho de nacer querían escuchar la confesión de que el doctor Alberto Limonta era nieto de Junco. Hubo incluso una guaracha interpretada por el Trío la Rosa que atizaba la angustia con su estribillo: "El cuchicheo que se trae la gente con Don Rafael no lo aguanto yo".

Y el cuchicheo de estos días es cuál será la fecha en que iniciará el fin de la dualidad monetaria, o para decirlo en el lenguaje oficial, cuándo comenzará la "tarea del ordenamiento" y cuál será la tasa de cambio entre el todopoderoso dólar y el maltratado peso cubano.

Todas las veces que Marino Murillo, en su participación en el más reciente programa Mesa Redonda, utilizó el número 20 "como un ejemplo" de cómo podría quedar finalmente la conversión de un dólar frente al peso cubano, se vio precisado a decir que él no estaba afirmando que la conversión del dólar fuera de 20 a 1 frente a la moneda nacional.

Marino Murillo, en su participación en el más reciente programa Mesa Redonda, utilizó el número 20 como un ejemplo de cómo podría quedar finalmente la conversión de un dólar frente al peso cubano

Advirtió que se iba a producir una devaluación, y en consecuencia resulta obvio que cuando un turista entre al país a "disfrutar de nuestras bellezas naturales" no le van a entregar un papel con la barbuda cara de Camilo Cienfuegos por cada billete donde aparece George Washington.

Las apuestas oscilan en dos grupos: los que creen que el cambio oscilará entre 30 y 50 CUP y quienes piensan que estará entre 50 y 80. Es posible que ambas predicciones estén en lo cierto y que la primera se refiera al cambio oficial y la segunda al informal, de manera que si se decide darle a un turista en el aeropuerto 30 pesos cubanos por cada dólar, en la calle le ofrecerán 50 y si lo que se decide es darle 50, en la calle le ofrecerán 80.

La única pista que dio Marino Murillo fue cuando advirtió que al concluir la tarea de ordenamiento una cerveza importada podrá costar el triple de lo que cuesta hoy una de producción nacional.

Esta alusión al triple pudiera dar a entender que tal vez los dólares puedan cotizarse a 75 pesos cubanos que es el resultado de multiplicar 25 por tres. Pero todavía es un cálculo en el terreno de las especulaciones.

La única pista que dio Marino Murillo fue cuando advirtió que al concluir la tarea de ordenamiento una cerveza importada podrá costar el triple de lo que cuesta hoy una de producción nacional

Si se pretende hacer las cosas como es debido no habrá una tasa fija para el cambio, de manera que si, hipotéticamente, cuando se devele el gran misterio, cada dólar valdrá en Cuba digamos que 70 pesos cubanos, ese número variará en dependencia de cómo suba o baje el dólar en el mercado internacional, como debe ser.

Los historiadores de la radio cubana afirman que el prolongado silencio del personaje Don Rafael del Junco, que interpretaba el actor José Goula, se debió a que este pidió un aumento de salario y, como los empresarios se negaron, el autor de la radionovela, Félix B. Caignet, ideó la estratagema de ocasionarle una embolia al personaje para silenciarlo temporalmente.

Algún día nos enteraremos de la causa del prolongado silencio que ha convertido lo que debiera ser información pública transparente en un misterio digno de un culebrón.

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