Guantánamo vivió el mes de junio más seco en 114 años
La Habana/Un panorama de tierra seca y camiones cisternas que levantan nubes de polvo caracterizan en estos días la provincia oriental de Guantánamo, que está sometida a la mayor sequía desde 1901. Según el servicio hidrológico del Instituto de Meteorología, solo cayeron 51 milímetros de lluvia en junio, un 42% del promedio histórico para ese mes.
Para mitigar los efectos de la sequía, las autoridades suministran agua cada ocho días a unas 69.000 personas. En el primer semestre de 2015 las precipitaciones alcanzaron apenas un 65% de la media habitual. Los nueve embalses de Guantánamo disponen de un volumen de 106 hectómetros cúbicos, lo que representa solo el 39% de su capacidad total.
Con las presas tocando fondo, se deteriora la calidad del agua y el riesgo de enfermedades diarreicas agudas se potencia. Por esa razón, las autoridades guantanameras hacen hincapié en la necesidad de hervir el agua de consumo humano. El temor ante posibles brotes de cólera, que afectan a la vecina Holguín, mantiene también en alerta al sector sanitario guantanamero.
El temor ante posibles brotes de cólera, que afectan a la vecina Holguín, mantiene también en alerta al sector sanitario guantanamero
Fuera del área urbana, la mayor parte de la población está recibiendo el suministro a través de camiones cisternas y los plazos se han extendido en muchos de esos parajes hasta 20 días entre un envío y otro. Mientras, se restringen las asignaciones del escaso recurso a la agricultura y a empresas que se consideran grandes consumidoras.
A toda premura, se acometen unas obras para tratar de redirigir las aguas de algunas presas hacia las zonas más afectadas. Se ha rehabilitado la estación de bombeo Bano Viejo para extraer unos 300 litros por segundo del río Bano y destinarlos al hospital general Agostinho Neto y al reparto Caribe de la ciudad de Guantánamo. También se han implementado en la ciudad tres nuevos puntos de llenado de camiones cisternas.