El peligroso caracol africano se extiende en Cuba ante la inacción de las autoridades

Miami/El caracol gigante africano no solo entró a La Habana en 2013, sino que se está reproduciendo rápidamente y ya se han encontrado especímenes en el centro del país. El molusco, considerado una de las especies invasoras más dañinas del mundo, es portador de peligrosos parásitos que pueden causar enfermedades como la meningoencefalitis y la angiostrongyliasis abdominal.

Antonio Alejandro Vázquez Perera, jefe del Laboratorio de Malacología del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, en La Habana, dijo a la prensa oficial que se debe evitar tocar al animal para protegerse de entrar en contacto con los parásitos o virus que pueda transportar.

Alexei Mora Montalvo, residente en Placetas, dijo a '14ymedio' que la población no tiene conciencia del daño que pueden provocar los caracoles

Alexei Mora Montalvo, residente en Placetas, dijo a 14ymedio que la población no tiene conciencia del daño que pueden provocar los caracoles.

En caso de que se produzca algún contacto deben lavarse inmediatamente las manos con jabón. También es recomendable lavar bien frutas y vegetales, ya que las enfermedades se transmiten al entrar en contacto con la baba del caracol.

El caracol gigante africano (Lissachatina fulica Bowdich) llegó a Cuba a través de un turista nigeriano que llevó los primeros ejemplares a la Isla para fines rituales. A mediados de 2014 un agricultor en Arroyo Naranjo avisó a las autoridades de la presencia de muchos ejemplares en sus cultivos y desde entonces se tienen reportes de su presencia en las provincias de La Habana, Artemisa, Mayabeque y Villa Clara.

"Nadie ha venido a explicarme nada sobre los peligros que trae este caracol, solo puedo decir que son muchos los muchachos que se llevan jabas llenas para utilizarlos como carnada para pescar", dijo al diario oficial Venceremos Leandro Campillo, un vecino de Placetas.

"Hay mucha gente que usa las babosas para pescar clarias en las presas y los ríos. Los muchachos, sobre todo, se van al río La Calabaza y a la presa Minerva con las babosas que extraen de los caracoles sin usar guantes ni ninguna otra protección", señala Mora Montalvo.

Las autoridades han advertido a los residentes de que eliminen cualquier caracol africano que encuentren en un intento por erradicar la plaga. Debido a su gran capacidad reproductiva (pueden poner en el suelo más de 1.000 huevos por año) el caracol gigante africano se extiende rápidamente en los lugares donde llega, desplazando a la fauna local.

Según los especialistas era cuestión de tiempo que esta especie llegara a la Isla, pues está presente en muchos países de Centroamérica y Sudamérica

Según los especialistas era cuestión de tiempo que esta especie llegara a la Isla, pues está presente en muchos países de Centroamérica y Sudamérica.

El caracol gigante africano tiene una concha que puede llegar a medir hasta 20 centímetros de longitud y unos diez centímetros de ancho. Su dieta se compone de hojas y residuos orgánicos del hogar. Comen animales muertos incluyendo a los de su especie.

Para Melissa Corrales la actuación de las autoridades "ha sido lenta" en Placetas. "Para otras cosas hacen trabajos voluntarios y hasta a los guarapitos (reclutas del servicio militar), pero con este caracol que dicen que es tan malo no han hecho nada", lamenta la mujer, que propone "una recogida masiva de caracoles con el apoyo del pueblo".

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